4×02. Ironman en verano…

Si es difícil mantener la concentración durante el invierno, en verano y más concretamente en Agosto se hace complicado y costoso (tedioso, aburrido,… pon el que quieras). Te cuesta buscar gente, ya que la gente suele descansar: pero si los que somos malos descansamos lo mismo que los buenos nunca les alcanzaremos.Siempre he dicho que la única parte que destacaría de mis puestas a punto son la constancia y la motivación: si sé que quiero/tengo que hacer algo, lo hago y punto.

Planifiqué esta parte del año de forma diferente a cómo lo hago siempre… Hay un dicho que dice algo así: si no cambias nada de la preparación, cómo esperas que varíe el resultado. Así que si el ingrediente habitual en mis recetas era: el volumen y las largas sesiones de entreno, ahora la cosa iría por el lado opuesto: intensidad, velocidad y fuerza. Es una apuesta arriesgada ya que para una prueba de más de 10h lo lógico es entrenar mucho tiempo… pero como dijoEmil Zatopeak: Voy a aprender a ir rápido que lento ya sé.

Esto para mí es una tortura, a mi me gusta ponerme elmp3 y correr o rodar en bici hasta que me quede sin batería… pero hacer series (salvo perdidos) no me gusta nada: dar vueltas y que un cronómetro te juzgue, es cuanto menos aburrido.  

 Pero es lo que hay, así que pare hacerlo másameno he buscado divertimentos. En Aste Nagusia y después del reto de las etapas dela vuelta a España participé en la Hiri Krossa, una carrera popular con bastante animación y ambiente, muy recomendable. Mi tiempo es lo de menos, pero más bajo que el año pasado (me acabo de dar cuenta que llevo más de un año sin parar…) y además lo hice después de una dura sesión de ciclismo.

El de rojo que te cojo.

Esto fue un viernes, esedomingo fui a Lezama a correr una carrera de montaña. Así me evito hacer las tiradas largas solo. 25km por el monte es otra cosa… ya me gusta más… mejorando también la marca del añopasado. Pero me ha dejado alguna secuela: una torcedura de tobillo y una rodilla tocada… Creo que ya se acumula el trabajo y los esfuerzos… Espero que no vayan a más.

Y ya por último, participé ayer en una travesía a nado porDonosti, eran 2 vueltas a la concha. 5200m, nuncahabía nadado tanto. Normalmente estas travesías son sin neopreno, pero en ésta se podía usar y ya que lo llevaba y que hacía frío, me lo puse. No me pareció bien, ya que te da bastante ventaja, pero mi objetivo es elIronman y allí todos iremos con neopreno. Hay gente que dice que las cosas se prueban entrenando: discrepo, si entrenas igual que compites o entrenas mal o compites mal. Buenas sensaciones, sin forzar me salió un ritmo interesante. Eso sí, más de 5km nadando se hace pesadete por muy en la Concha que estés…

Falete disfrazado de nadador con neopreno.

Y en esas estamos…

3×05. Vuelta a España. Bilbao-Vitoria. Horno y dolor.

Después de la etapa del día anterior tenía miedo de cómo reaccionaría mi cuerpo ante esta nueva kilometrada. Arranqué con extraordinaria alegría, la media en la primera hora fue superior a los 30km/h algo no muy difícil ya que desde Bilbao hasta Zaldibar es plano. Hasta ahí la cosa fue muy bien, estaba mejor que el día anterior, pese a llegar a casa pasadas las 24:00 ya que tuve que volver a buscar mi coche.

Perfil etapa 20.

La primera trampa de la jornada era el puerto de Areitio, de rampas duras en el inicio pero que suaviza según vas dando pedales. Es un tercera sin mucha complicación.

Alto de Areitio.

Desde aquí, en un rápido descenso y pasando por Ermua, llegamos a Eibar, el sol empieza a pegar fuerte (el sábado hizo más de 37º) y en medio de Eibar tomo un desvío a la derecha. Pasando por el campo de Ipurúa subo Karabietas, un primera, largo pero noble sin muchos sobresaltos… empiezo a notar los rigores de la etapa, del calor y del día anterior. El descenso es algo complicado sobre todo al paso por Elgeta.

Karabieta.

Ya estamos en Gipuzkoa… paso un momento muy crítico porque no tengo agua, no veo donde cogerla y no quiero desviarme… son las 15:00 y dar pedales es como hacer rodillo en una sauna… Ahora empieza la etapa… En esta parte cojo un pájara de las buenas, creo que me mareo un poco porque sin querer me meto en una autovía… un coche me insulta diciendo que si soy bobo; un poco, le contesto. Después de pasar Deskarga, que no es puntuable, creo que esto se acaba, subir y bajar este puerto me ha dejado fundido… entro en un bar y me tomo dos cocacolas seguidas y como lo que tengo… aun así hasta Arrasate lo paso muy mal.

En Arrasate paro en una gasolinera y me tomo otra cocacola y un litro de aquarius… una barrita que llevaba y tiro dirección Elorrio, ya he pasado la parte Guipuzkoana. Me digo, que si en Elorrio no mejoro en lugar de subir Urkiola me marcho para casa y listo que no me va la vida en esto.

Subo el Alto de Kanpazar, pensaba que era más duro pero con todo el desarrollo metido y poco a poco subo. El sol ya va descendiendo y parece que me recupero. Los dolores musculares del día anterior hoy son dolores articulares, te duelen músculos que en teoría no influyen en el pedaleo; espalda, brazos… del calor se me han hinchado los tobillos y se me escurren las manos del manillar.

Kanpazar, punto de inflexión.

Una vez abajo y ya viendo Urkiola a lo lejos, par0 a coger agua, llamo a casa y les digo que igual no subo Urkiola y que tiro para casa que esto es muy duro. Aun así parece que las fuerzas me van viniendo… Paso Durango y me planto en el cruce: O para arriba o para casa… decido subir, no me lo perdonaría nunca.

Subir Urkiola tiene su aquel, son un montón de curvas que parece que una mente macabra ha puesto para torturarte… cada pedalada es un combate que debo librar… subo en 45min saco la foto y para abajo. La etapa terminaba en Gazteiz pero no tenía a nadie que me fuera a buscar así que bajo y media vuelta.

Se acabó.

Conclusiones: Esto es muy duro. Lo más duro que creo que hay, y he visto o experimentado mucho. No es tanto el dolor muscular que puedes tener tras una maratón es una sensación de vacío total como si alguien te haya quitado las fuerzas. 21 días haciendo esto debe desgastartemucho. En carrera es todo el rato lo mismo, un pedal otro, los mismos sabores en la boca (hay momentos que no comes porque estás de las o geles hasta las narices), en pelotón los nervios deben ser increíbles, te duele todo no sabes como sentarte… Una vez que terminas, tienes que ir hasta el hotel y todo el tiempo que no estés descansando corre en tu contra… es estar 24h pensando en ciclismo. Solo apto para gente de otra pasta.

Hecho, a pensar en otra cosa…

3×04. Vuelta a españa, etapa 19: Noja-Bilbao. Dolor.

Siempre he dicho que no soy muy inteligente y que para aprender las cosas tengo que vivirlas, tengo que tocarlas y saber cómo son. Por eso ayer trate de meterme, de algún modo, en la piel de un ciclista. Y por ello realicé la primera etapa de la Vuelta España, de las dos que pasan por Euskadi. La 19: Noja-Bilbao.

La etapa, a priori, no será excesivamente dura para los ciclistas, se trata de una etapa con dos puertos de tercera y dos de segunda (los dos pasos por el Vivero, ya en Bilbao). A mi me costó mucho. Las razones pueden ser varias, seguramente por mi estado de forma, por el calor, por el viento, por mi estado de forma… desde Niza que no montaba en bici más de 6h, esto fue hace mes y medio, desde entonces he trabajado otras cosas con sesiones más cortas por lo que una aventura de estas se sabía que iba a ser dura…

Yo salí de Laredo, ya que me era imposible salir de Noja, desde ahí me dirigí a Colindres para coger la ruta en el lugar exacto. Di un par de vueltas por Laredo para equilibrar los kms… y en ruta. El paso de Laredo tiene un sprint especial, es llano y recto no hay más, solo que la aproximación a toda velocidad y el estado de la carretera puede ser «divertido», siempre que circulo por Cantabria me acuerdo de las declaraciones de Revilla: » No tenemos TV autonómica pero tenemos las mejores carreteras…» jo jo jo.

De Laredo salgo buscando el primer puerto del día, la Granja, un tercera. En el libro de ruta no te marca como puerto dos «tachuelas» que hay de camino, pero que hacen pupita, la salida de Laredo por el Risko y la subida de Liendo hacia Guriezo.

Alto de la Granja.

Una vez que llegas a Guriezo y hasta que pasas a Bizkaia el recorrido es como un diente de sierra. Dos puertos de tercera, el ya mencionado de la Granja y las Muñekas. Son carreteras retorcidas, que se te agarran y que no te da descanso. No hay un metro ni llano ni recto. Puede ser un punto para que algún equipo endurezca la carrera ya que son casi 40km graciosos.

Las Muñecas.

Una vez que pasas esta parte de la etapa entras en una tramo de calma… es relativo… por lo menos para mi. Desde el alto de las muñecas hasta Bilbao no hay marcados ningún hito montañoso, pero para llegar a Sodupe a mi no se me ocurre otra forma que subir el Alto de Humaran… no se por dónde irán, pero yo fui por ahí. En este momento pensé que se acababa todo… el dolor de piernas era muy fuerte, empecé con alegría pero los dos pasos de tercera y las tachuelas del camino hacen que en el avituallamiento de Sodupe (me paro en la gasolinera ya que nadie me espera con la bolsa de comida) vea muy complicado el terminar. Quedan 75km aún.

Sodupe.

El tramo de Sodupe a Bilbao es muy sencillo, es llano, pero si entra el aire como ayer se hace difícil… las piernas me duelen mucho. He pasado ya las 3h que llevaba de entreno y eso se nota, a partir de aquí toca sufrir… los puertos me han dejado KO.

Llego a Bilbao, la entrada es complicada por las obras y hay momentos que los hago por la acera. Voy hasta el ayuntamiento y subo a Begoña por la cuesta que detrás. No se si es por ahí pero no me sé otro camino para ir a Extxebarri y luego a Galdakano. Ya llevo algo más de 100km y me consuela pensar que solo me quedan 50km… el dolor de piernas se ha convertido en calambres.

Por fin en Bilbao.

Lo único destacable de Bilbao a Galdakano y a su vez a la rotonda de Erletxes, es el aire, los semaforos y los coches. Ya tengo en la cabeza la subida al vivero… solo la he hecho una vez y en coche… sé que es dura. En este momento ya pasado el 105km, mi cabeza se apodera de mi cuerpo y toma las riendas de la situación. Si hasta ahora me dolía todo, ahora mi cabeza parece que ha actuado como bálsamo reparador y me da un poco de tregua.

Las subidas al Vivero merecen un capitulo aparte… con un inicio muy muy duro y un tramo de descanso, son 25min de subida sin parar… en ese momento veo que mi rodillas empiezan a llorar… el sudor cae por la tibia y llega al calcetín. Entro en una especie de trance y llego arriba. Es en ese momento, cuando no sé si por que sé que estoy de vuelta para casa o porqué, pero me vuelven las fuerzas…

Artxanda.

Resumiendo, etapa dura por ser rompepiernas, pero con cuatro pasos para mi duros. No tanto para los ciclistas.

Desde que bajo de Artxanda y voy para casa en bici pienso en la etapa de hoy, bajo el ritmo bebo y trato de guardar lo mas posible. En casa me como un plato de pasta, descanso un rato y voy a Laredo a buscar mi coche, el que dejé a la mañana. Me ha costado dormir por el dolor de piernas y ahora parto para la segunda etapa.

Un saludo.