Reflexiones a parte, hay que ponerse el mono de trabajo. Mono que nunca me suelo quitar, dicho sea de paso. No soy como los que venden la moto de que nunca entrenan pero siempre te los encuentras cuando sales tú. Será casualidad, quién sabe o mejor a quién le importa esa gente.
Este domingo se disputa en Berriz (donde las txuletas) el campeonato de Bizkaia de Cross, en su modalidad: Individual y por equipos. Este año y tras la fusión del Bihotz Aratz y el C.A Santurzti, acudiré con los colores morados a ayudar en todo lo que pueda al Santurzti a ganar el campeonato de Bizkaia, objetivo principal. Soy consciente de la realidad y de mi nivel, y que de los cuatro que puntúan por club salvo que caiga un rayo, yo no voy a ser uno de ellos. Pero estaré para ayudar en lo que pueda, tirar, sacrificarme… darlo todo y ser valiente.
Soy de los que creo que cuando te enrolas en un equipo debes acatar la disciplina y mientras estás ahí has de darlo todo. Y si no, pues coges la puerta y te marchas. El colectivo por encima del individuo. Será porque vengo del rugby. Al cross y a este campeonato hay que tenerle el respeto que se merece. No me parecería ético llegar a meta con un gramo de fuerza.
Mi estado de forma (tendente a la curva) no es malo del todo. Tras lesotho corrí los 10km de Portugalete (38;10), un 800m en 2:20, la san silvestre de Barakaldo (21:24 en 6km)… y estos últimos días he hecho algún 400m que me da chispica. En navidades he trabajado también muy bien y bueno… lo que tenga que ser será… que como siempre digo: para lo que me pagan bastante hago. A mi con que Jon entienda el sacrificio que tanto el primero como el último van regalar en el barro de Berriz me es suficiente.
Una de las canciones con las que más kilometros he hecho. Es sorprendente cómo cambia el sentido de las letras cuando vas cambiando tú:
https://www.youtube.com/watch?v=dgcHrWoWph8