El CMB muestra su disconformidad por el modo de ajudicar las plazas MIR propuesto para este año

Sede del Colegio de Médicos de Bizkaia, en Bilbao (Foto Nerea Garay)

Bilbao, 21 de mayo de 2020.-Desde el Colegio de Médicos de Bizkaia (CMB) queremos manifestar nuestra disconformidad con el modo en que este año se llevará a cabo la adjudicación de plazas de formación especializada MIR a través de un sistema, modificado respecto a años anteriores debido a la situación provocada por el coronavirus SARS CoV-2, que propone una elección que se realizará por vía telemática.

En opinión del CMB, la confección de una lista previa que la persona interesada solo podrá modificar hasta 12 horas antes de su turno de elección, que le adjudicará la primera plaza libre de su listado de preferencias y que no le dará la posibilidad de renuncia en el momento, va a provocar más vacantes que nunca por renuncias posteriores de las y los solicitantes que no hayan accedido a la plaza deseada. Como consecuencia, un número importante de puestos, que de otro modo hubiesen sido adjudicados, quedarán desiertos hasta la convocatoria del próximo año, con lo que un elevado número de graduadas y graduados óptimamente preparados no accederán a su formación como especialistas. Esto generará, además, un defecto de plazas sin cubrir que se irá arrastrando a lo largo de los sucesivos años formativos.

Para el Colegio de Médicos de Bizkaia, no facilitar esta integración, que será determinante en el futuro profesional de las y los aspirantes a R1 de este año, sería una gran equivocación. Primero, por lo que supondría de agravio comparativo frente a sus compañeras y compañeros de ediciones anteriores y, segundo, porque en estos momentos extraordinarios y ante la posibilidad de un rebrote de la pandemia, resulta indispensable tener cubiertas todas las plazas de médicas y médicos que el sistema sanitario sea capaz de albergar.

Crecen la deducción fiscal para las donaciones a ONG. ¡A apoyarlas!

Como socio y/o colaborador de Manos Unidas te informamos que para hacer frente al impacto económico y social que está provocando la COVID-2019, se ha publicado en el BOE el Real Decreto-ley 17/2020, del 5 de mayo, que incluye un incremento de los porcentajes de deducción fiscal para las donaciones a ONG de personas físicas de un 5% desde el 1 de enero de 2020. El incremento afecta a las donaciones realizadas por contribuyentes de IRPF y por contribuyentes del Impuesto sobre la Renta de No Residentes que operen en territorio español sin establecimiento permanente. Este incremento no se aplica en los territorios forales. Los nuevos porcentajes de deducción son los siguientes:

  • Deducción del 80% para los primeros 150 euros donados.
  • A partir de ese importe, es decir, para el importe donado por encima de los primeros 150 euros:
    • Deducción del 35%.
    • Deducción del 40% si se trata de donaciones periódicas realizadas durante al menos tres años a la misma entidad por un importe igual o superior.
Imagen deducciones

 Esperamos que esta noticia suponga un impulso motivador en un momento en el que la solidaridad y las donaciones se han convertido en motor fundamental para hacer frente al terrible impacto de esta pandemia que nos ha golpeado a todos. Gracias por ser parte de este movimiento solidario. Cuídate mucho.   Puedes consultar la legislación en: Real Decreto-ley 17/2020, de 5 de mayo. Publicado en el BOE de 6 de mayo de 2020.

ALBISTEAK

Julio Anguita: muere un líder (PCE-IU) honesto e histórico

Excelente artículo de José Manuel Alonso vía @kazetariak, la revista del Colegio y la Asociación de Periodistas del País Vasco

Hay una frase que puede resumir la vida y obra de una persona: ‘el efecto es el afecto’, frase que durante años ha sido aplicada con razón y sorprendentemente a un político de la izquierda más pura, secretario general del Partido Comunista de España (PCE) y coordinador general de Izquierda Unida (IU): Julio Anguita (1941-2020), fallecido el pasado sábado a los 78 años en el Hospital Universitario Reina Sofía de Córdoba. Anguita ingresó allí una semana antes tras sufrir un paro cardiaco en su domicilio.

Maestro de escuela, ‘califa rojo’, luchador por el bien común

Maestro de escuela y licenciado en Historia, el político nacido en Fuengirola (Málaga, 1941) volvió a su puesto en un instituto de Córdoba tras pasar el liderazgo de IU a manos de Francisco Frutos. Pero nunca dejó de hablar y sentir como político de un partido y defenderlo. Participó en conferencias, eventos públicos y entrevistas hasta el final. Este periodista, como reflejaré más adelante, coincidió con él en algunas de sus visitas y mítines electorales en Euskadi, reconociendo que se prestaba siempre a facilitar programas, ideas y opiniones para todos los medios informativos. 

Conocido como ‘califa rojo’, por ‘sus resultados electorales arrolladores en la ciudad cordobesa de la que fue alcalde de 1979 a 1986’, se le ha reconocido, no solo en su etapa de dirigente del partido comunista sino también como persona: hombre honesto y sin tapujos en sus palabras y mítines. Siempre dijo las cosas claras en favor de sus ideas y de su partido político, incluso cuando sus compañeros se desvariaban escapándose a otros partidos o ideas. El lehendakari Iñigo Urkullu, al lamentar la muerte de Anguita, lo calificó de ‘persona íntegra y comprometida’. Pero no solo comprometida, digo yo, con y por los suyos sino con el pueblo español y la política en general, produciéndose en ocasiones coincidencias con otros partidos, incluso de la derecha, siempre en aquello que entendía como el bien común. 

En 1996, elecciones generales, consiguió más del 10% de los votos

Desde luego, Julio Anguita será siempre un referente de la política con mayúscula, aunque llevaba retirado de la primera fila de la política desde 1999, cuando dejó la dirección de IU después de un segundo infarto. El corazón le había dado ya varios avisos. El primero en plena campaña electoral, cuando se presentaba como candidato a la presidencia del Gobierno en 1993 después de una carrera que lo consolidó como uno de los políticos más respetados a derecha e izquierda. Anguita, tenía un lema ‘programa, programa, programa’ y con ello IU alcanzó sus mayores éxitos electorales, superando ampliamente los dos millones de votos (2.639.774) en las generales de 1993 y 1996, alcanzando en este último año más de un 10 % de los votos y 21 diputados, año en el que José María Aznar ganó por primera vez las elecciones para el Partido Popular. Su periodo al frente de Izquierda Unida se distinguió por la exigencia de concretar acuerdos programáticos y el rechazo a la corrupción. Tras su marcha, IU inició una fase de declive que le llevó a conseguir tan solo dos diputados en las elecciones generales de 2008. 

Julio Anguita se mostraba en ocasiones como hombre liberal, ese liberalismo que consiste, entre otras cosas, en no descartar que el de enfrente pueda tener razón, y la prueba de ello son las últimas intervenciones que conocemos. La última fue hace unos días, en plena pandemia del coronavirus, cuando declaraba: ‘En estos momentos de crispación hace falta serenidad, reflexión y sopesar razones. De cómo salgamos de esta, hoy va a ser mañana’. 

Y para comprobar su grado de honestidad y amor hacia su pueblo siempre recordaremos una de sus últimas intervenciones en las que criticó duramente a la izquierda, acusándola también de que la política se estaba convirtiendo en un problema ético: ‘Lo que me manda mi mandamiento de hombre de izquierdas es no votar al ladrón, aunque tenga la hoz y el martillo (…) Yo miro y juzgo a las fuerzas políticas por lo que hacen, sean del partido que sean. Y yo no pido a mi pueblo otra cosa que juzgue a los políticos por eso que hacen, por el ejemplo que dan, incluso si esos políticos son de la extrema derecha’. 

‘El hombre que no perdió su sombra’

Gregorio Morán, colega que estuvo mostrando durante unos años en Euskadi su crítica a través de su buena pluma, escribió un artículo (21-XI-1991) en su sección ‘Sabatinas intempestivas’ de ‘La Vanguardia’ de Barcelona, donde trabajó durante años, dedicado a Julio Anguita que tituló: ‘El hombre que no perdió su sombra’ y al que presenta de esta forma: ‘Julio Anguita es electoralmente la parte más importante del menguado capital político de Izquierda Unida (…) Sin él IU no es nada, y con él puede aspirar a algo’, lo que se demostró poco después, en las elecciones del 93 y 96. 

Y el articulista señalaba del político algunas de sus frases más sorprendentes por su alejamiento de la cultura marxista, por ejemplo: ‘Nosotros somos como los jesuitas, tenemos toda la eternidad por delante’. Y añade: ‘Julio Anguita no quiere perder su sombra, es decir, el Partido Comunista, y al tiempo es consciente de que presentarse con esas siglas ante el electorado es una provocación. A sus cincuenta años recién cumplidos nadie puede decir de él que constituye el espécimen típico ni del comunista ni del político profesional (…) Su personalidad, sumada al invento de Izquierda Unida, interrumpió la caída hacia la nada’. Y añade: ‘De momento (final de 1991) Julio Anguita sigue su travesía y, a juzgar por la irritación que causa en sus adversarios, no lo debe hacer mal. Algún día habrá que explicarse que lo peor que le puede pasar a un dirigente político es que sus adversarios hablen bien de él’ (…).

Nunca olvidaré un artículo del periodista lírico Manuel Alcántara, al que leíamos todos los días en los diarios de Vocento, entre ellos ‘El Correo’ y el ‘Diario Vasco’, artículo del 28 de abril de 2006, en el que escribía: ‘El ex coordinador de IU, Julio Anguita, cree que después de reformar 17 estatutos de autonomía ‘España quedará como el monstruo de Frankenstein’, llena de parches, tornillos y cicatrices. Ahora sí que no la va a conocer ni la madre que la parió. Algo ha explotado por dentro. En fin: realidad nacional o muerte’.

Se le calificó de ‘nuevo apóstol comunista’

Personalmente tuve oportunidad de coincidir con Julio Anguita al que siempre lo vi como un soñador que hablaba en voz alta. En las entrevistas te contestaba más como amigo que como líder, ajeno a tus propias ideas. Te hablaba incluso de las crisis internas de su partido, se preguntaba él mismo: ¿qué está pasando en IU? Y enseguida, con el tiempo, uno se percataba de que sin él ha sido frecuente el trasvase del voto de IU al PSOE. 

Siempre ponía el ejemplo del diálogo sano, sobre todo con Felipe González. Nunca olvidaré su lucha en octubre de 1991 contra el consumo público de estupefacientes, proponiendo luchar contra el secreto bancario para hacerlo contra el narcotráfico. En el año 97, al tratar de unificar a la izquierda gallega, se le calificó de ‘nuevo apóstol comunista’. Y siempre fue partidario de que los partidos ‘asuman las responsabilidades derivadas de las actuaciones de sus dirigentes, incluso al margen de lo que dictara la ley. Llegó incluso a calificar de táctica propia de los nazis amenazar a los votantes con ‘¡ojo que nos viene la derecha!’. Criticó mucho los pactos postelectorales entre los nacionalistas catalanes con Felipe González y José María Aznar. Y en los debates preelectorales con compañeros de otros partidos acostumbraba a plantear preguntas para ser debatidas en el trascurso de los cara a cara. Todo eso recuerdo de Julio Anguita en mi época periodística activa, a lo que hay que añadir el momento probablemente más trágico (pese a sus infartos) en la vida de Julio Anguita: la muerte de su hijo… 

‘Malditas sean las guerras y los canallas que las hacen’

Muerte en Irak del periodista Julio Anguita Parrado y el cámara José Couso.

En abril de 2003, este periodista dirigía ‘El Mundo del País Vasco’ y seguía puntualmente las crónicas que escribía su compañero Julio Anguita Parrado, enviado especial del periódico en la Guerra de Irak, como estuvo también tras los atentados terroristas suicidas del 11 de septiembre de 2001 cometidos por la red yihadista Al Qaeda. Y fue el 7 de abril de aquel 2003 cuando recibíamos la noticia de que el joven compañero fallecía al ser alcanzado por un proyectil iraquí lanzado contra la Segunda Brigada de la Tercera División de Infantería estadounidense y, un día después, la muerte de José Couso, cámara de informativos Telecinco por un tanque de EEUU cuando tomaba imágenes desde el hotel Palestina. 

El reportero Julio Anguita Parrado firmaba sus crónicas para ‘El Mundo’ y lo hacía junto a los soldados estadounidenses en primera línea. Aquella fatídica jornada los militares a los que acompañaba iban a tomar una posición enemiga en una misión arriesgada. Julio Anguita Parrado, aconsejado por los mandos de EEUU, se quedó en la base. Esa decisión resultó fatal, porque allí fue a caer un misil iraquí que mató al periodista, mientras que la avanzadilla regresó sin bajas aquel día. 

La muerte del cámara José Couso fue diferente, ya que su posición en el momento del ataque la conocía perfectamente el Ejército de EEUU. El hotel Palestina era el edificio elegido por el gobierno iraquí para alojar a la prensa internacional. El reportero gráfico, que grababa para Telecinco en aquellos momentos junto a nuestro conocido y premiado compañero Jon Sistiaga, se asomó al balcón de su habitación 03 del piso 14. Allí enfocó a un carro de combate M1 Abrams que avanzaba por uno de los puentes sobre el río Tigris. El tanque giró su torreta y abrió fuego. El proyectil impactó un piso más arriba, en el 15, matando en el acto al periodista ucraniano Taras Protsyuk, de la agencia Reuters, e hiriendo de gravedad a Couso, que fue trasladado al Hospital San Rafael de Bagdad, donde falleció mientras era operado de urgencia. 

El Pentágono reconoció la autoría del ataque alegando que los soldados que dispararon contra el hotel, al mando del sargento Thomas Gibson, estaban respondiendo a fuego enemigo, pero ningún periodista internacional fue testigo de ningún disparo hacia aquel tanque blindado. 

Julio Anguita padre, en aquellas fechas excoordinador general de Izquierda Unida, recibió la noticia de la muerte de su hijo cuando iba a intervenir en un acto organizado por la Unidad Cívica Republicana en el Teatro Federico García Lorca de Getafe. Subió al estrado y manifestó, visiblemente emocionado: ‘Mi hijo mayor, de 32 años, acaba de morir, cumpliendo sus obligaciones de corresponsal de guerra. Hace 20 días estuvo conmigo y me dijo que quería ir a la primera línea. Los que han leído sus crónicas en el diario ‘El Mundo’ saben que era un hombre muy abierto y buen periodista. Ha cumplido con su deber y yo por tanto voy a dirigir la palabra para cumplir con el mío …/… Ha sido un misil iraquí, pero es igual, lo único que puedo decir es que vendré en otra ocasión y seguiré combatiendo por la tercera república. Malditas sean las guerras y los canallas que las hacen’.

‘La bomba es una bomba antes de ser noticia’

230 periodistas murieron en Irak, entre ellos el hijo de Julio Anguita.

Hace unos cuarenta días que se han cumplido los 17 años de aquel doble crimen de los periodistas Julio Anguita Parrado y José Couso. Y hace dos años Arturo Pérez-Reverte escribía un artículo que lo recordaba. ‘No conocía a Julio Anguita Parrado ni a José Couso. Eran jóvenes, y yo me jubilé después de los Balcanes; donde, por cierto, enterramos a cincuenta y seis colegas. No sé qué llevó a Julio y José hasta el misil o la granada que los mató, aunque puedo imaginarlo. En cuanto a por qué murieron, debo decir lo que creo: que murieron porque querían estar allí. Fueron voluntarios a un lugar peligroso, y el padre de Julio Anguita lo resumió con una entereza admirable: ‘Mi hijo murió cumpliendo con su deber’. Punto. Hacían un trabajo duro, y salió su número. En la lotería donde se combinan el azar y las leyes de la balística, les tocó a ellos. Suma y sigue. El resto es demagogia y literatura’. 

Hubo otras palabras entonces que se quedaron grabadas en el periodismo más duro, el de estar en el frente y frente a la bomba que es noticia. De la muerte de Julio Anguita Parrado y José Couso, como las de otros que recordamos, se escribió algo que apuntamos para no olvidarlo: ‘Ellos, estos, viven y trabajan en la situación límite del periodismo, cuando la bomba es una bomba antes de ser noticia. Nosotros la recibimos ya como noticia, o sea, desactivada (…) El día que falten estos reporteros que buscan la verdad, la justicia, el relato de la conmoción y la tragedia humanas, morirá el periodismo de verdad; el periodismo se convertirá en parte de la industria de la construcción o del mueble o del motor o del pirulí con sabor a fresa (famoseo de famosillos) o en marujeo de políticos, el pirulí con sabor a naranja y limón’ (…). 

Ahora, cuando el padre de Julio Anguita Parrado ha muerto empeñando su corazón siempre al borde del infarto para hacer de la política, en este caso la suya, la comunista del PCE e IU, un deber: el de ser honesto, claro y solidario con la realidad y su gobierno, y por eso sentimos que una persona humana cercana e importante, pese a sus ideas no coincidentes con las nuestras, se nos va, nos duele profundamente. Y nos queda desearle ¡ese descanso en la paz de los más sacrificados, realidad y símbolo toda su vida, la del político Julio Anguita!…

El innovador trabajo sobre el Síndrome de Rett recibe el Brain Prize 2020 de la Fundación Lundbeck

Los investigadores han mapeado el síndrome de Rett, un trastorno neurológico raro que afecta principalmente a las niñas durante la primera infancia. Su investigación también ofrece una visión única de la epigenética al indicar que los trastornos del desarrollo neurológico no son necesariamente irreversibles.

Copenhague, 19 de mayo 2020.- Al nacer, una niña con síndrome de Rett se parece a los demás bebés sanos. Durante sus primeros años, se desarrolla como debería, gana peso y no muestra signos de que sus genes estén ocultando una enfermedad rara. Sin embargo, cuando alcanza la edad de uno o dos años, su desarrollo se detiene. Gradualmente pierde las habilidades que ha adquirido, desarrolla características similares al autismo y comienza a hacer movimientos involuntarios con las manos. Con el tiempo la enfermedad se estabiliza, y puede lentamente empezar a desarrollarse, pero el desarrollo se verá afectado el resto de su vida.

Hoy, gracias a los dos neurocientíficos Huda Zoghbi y Adrian Bird, comprendemos este trastorno neurológico inusual, el síndrome de Rett y, además, su investigación innovadora nos acerca a un tratamiento. Por esto, los dos profesores reciben el premio más prestigioso del mundo para la investigación del cerebro, el Brain Prize de la Fundación Lundbeck, valorado en más de 1,3 millones de euros, que en esta edición de 2020 celebra 10 años de su creación.

Según el Profesor Richard Morris, presidente del Comité de Selección del premio, “se concede el Brain Prize 2020 a la Profesora Huda Zoghbi y a Sir Adrian Bird por su trabajo fundamental y pionero sobre el síndrome de Rett. Su investigación estableció la importancia de la regulación epigenética tanto en el desarrollo del cerebro como en el mantenimiento de la función normal del cerebro adulto. También señala nuevas oportunidades para el tratamiento de este y otros trastornos del neurodesarrollo».

Por su parte, Jan Egebjerg, Director de Investigación de la Fundación Lundbeck, destaca la importancia de este nuevo avance: “El cerebro es increíblemente complejo y, por lo tanto, muchos de sus mecanismos básicos, por ejemplo, cuando se trata de enfermedades, todavía son territorios inexplorados. Las enfermedades del cerebro representan una carga enorme, tanto para el individuo como para la sociedad. Por lo tanto, es vital que impulsemos la investigación del cerebro. Esto significa, sobre todo,  dar más dinero a la investigación, pero también es importante que honremos a los investigadores que a menudo dedican toda su carrera a descubrir nuevos territorios y ofrecer los mayores avances en la investigación del cerebro. Estos son algunos de los objetivos de The Brain Prize”.

Los ganadores de este año

De origen libanés, la Prof. Huda Zoghbi es profesora de genética en el Baylor College of Medicine y el Texas Children’s Hospital en Houston. Entre otras cosas, identificó el gen que causa el síndrome de Rett. Su currículum completo se puede consultar aquí.

Sir Adrian Bird es profesor de genética en la Universidad de Edimburgo, donde ha trabajado la mayor parte de su carrera. Se le describe como pionero de la epigenética, y diseñó, entre otras cosas, el primer modelo de ratón del síndrome de Rett. Su trayectoria profesional en detalle está disponible aquí.

El síndrome de Rett

El síndrome de Rett es un trastorno del desarrollo neurológico congénito poco frecuente que afecta principalmente a las niñas, ya que los fetos masculinos generalmente mueren durante el embarazo. En los raros casos en que los niños sobreviven, generalmente se ven afectados más gravemente por el trastorno que las niñas.

El síndrome de Rett está causado por una mutación en el gen MECP2. El trastorno ocasiona, en diversos grados, discapacidad mental y física.

Sobre el Brain Prize

El Brain Prize es el principal premio de investigación del cerebro del mundo dotado con más de un millón de euros y se otorga anualmente desde el año 2010, como parte del trabajo de la Fundación Lundbeck para apoyar y promover la investigación en ciencias biomédicas. Cada año, la Fundación concede subvenciones de casi medio billón de coronas danesas. Aproximadamente la mitad de esta cantidad se dona a temas relacionados con la salud del cerebro, principal área de interés de la Fundación. Parte de esta dotación económica proviene de los beneficios generados por Lundbeck y de esta forma se reinvierte en la sociedad.

Hoy, gracias a los dos neurocientíficos Huda Zoghbi y Adrian Bird, comprendemos este trastorno neurológico inusual, el síndrome de Rett y, además, su investigación innovadora nos acerca a un tratamiento. Por esto, los dos profesores reciben el premio más prestigioso del mundo para la investigación del cerebro, el Brain Prize de la Fundación Lundbeck, valorado en más de 1,3 millones de euros, que en esta edición de 2020 celebra 10 años de su creación.

Según el Profesor Richard Morris, presidente del Comité de Selección del premio, “se concede el Brain Prize 2020 a la Profesora Huda Zoghbi y a Sir Adrian Bird por su trabajo fundamental y pionero sobre el síndrome de Rett. Su investigación estableció la importancia de la regulación epigenética tanto en el desarrollo del cerebro como en el mantenimiento de la función normal del cerebro adulto. También señala nuevas oportunidades para el tratamiento de este y otros trastornos del neurodesarrollo».

Consejos para lograr un sueño reparador, clave para una buena salud

LA CALIDAD DEL SUEÑO ES FUNDAMENTAL PARA REFORZAR NUESTRO SISTEMA INMUNITARIO, SENTIRSE BIEN Y AFRONTAR EN EXCELENTES CONDICIONES CADA NUEVA JORNADA

A lo largo del sueño nocturno el organismo se repara y el sistema inmunológico se fortalece, por lo que los trastornos del sueño pueden alterar este sistema. Por ello, dormir mal nos hace más propensos a contraer infecciones, entre otras muchas alteraciones. «El descanso es fundamental para desactivar las hormonas del estrés, especialmente el cortisol. Los corticoides sintéticos se usan en medicina por su efecto eminentemente inmunosupresor. De la misma manera, la inactivación de la melatonina lleva consigo un estado permanente de inmunodeficiencia», explica el doctor Vicente Mera, responsable de Medicina Interna y Healthy Ageing en SHA Wellness Clinic.

Durante el sueño, el cerebro pasa por cinco fases diferentes: las etapas 1, 2, 3, 4 y el sueño de movimientos oculares rápidos (MOR o REM en inglés). Diferentes cosas ocurren en cada etapa. Por ejemplo, pasamos por distintos patrones de ondas cerebrales (patrones de actividad eléctrica en el cerebro) en cada una de ellas. Nuestra respiración, ritmo cardiaco y temperatura pueden ser más rápidos o lentos en ciertas etapas.

Algunas fases del sueño pueden ayudarnos a sentirnos más descansados y con energía al día siguiente, así como a estar más reflexivos y a formar los recuerdos. Según la Sociedad Española de Neurología (SEN), entre un 20 y 48% de la población adulta española sufre, en algún momento de su vida, dificultad para iniciar o mantener el sueño, y más de un 30% de la población se despierta con la sensación de no haber tenido un sueño reparador, cuando no finaliza cada día demasiado cansado. A pesar de estas cifras, la SEN estima que más dos tercios de las personas que padecen problemas de sueño no buscan ayuda profesional.

Son numerosos estudios los que han demostrado que un sueño de calidad es básico para tener buena salud. Dormir de forma adecuada mejora nuestro rendimiento mental y corporal, y reduce el riesgo de accidentes laborales y de tráfico. Pero un sueño de calidad también protege a nuestro cerebro, ya que durante el sueño se restaura la función cerebral en aspectos como el aprendizaje, la memoria o el estado de ánimo.

INCREMENTA LA OBESIDAD


La privación parcial crónica de sueño «causa déficits cognitivos, favorece el incremento de peso y la obesidad, así como la hipertensión arterial, además de producir un aumento de la incidencia de trastornos, principalmente los relacionados con el riesgo vascular, a su vez muy relacionados con enfermedades neurológicas como el ictus o el Alzheimer», comenta el Carles Gaig, coordinador del Grupo de Estudio de Trastornos de la Vigilia y Sueño de la SEN. Por lo tanto, el riesgo de mortalidad aumenta de forma significativa en aquellas personas que duermen menos de seis horas diarias.

Pero, ¿conocemos las claves para dormir mejor? La Sociedad Española del Sueños (SES) recomienda que se fijen unos horarios y unas rutinas para organizar el día, sobre todo de los pequeños, aunque es algo que los mayores también debemos hacer. Insisten en que hemos de levantarnos e irnos a dormir cada día a la misma hora, con pocas variaciones, y establecer una rutina de comidas y actividades.

El deporte es una de las mejores vacunas contra el insomnio; lo ideal es practicarlo hasta primera hora de la tarde. Después, según los especialistas, puede tener en muchas personas el efecto contrario, ya que aumenta los niveles de adrenalina y esto activa el cerebro.

¿Y qué podemos incluir en nuestro ritual relajante nocturno? Podemos optar por una ducha con agua caliente, que ayuda a relajar la musculatura y despejar la mente, y meternos en la cama con la luz de la mesilla y un buen libro (a quien le relaje, porque no es un consejo general). Pero hay más cosas que sería bueno incorporar si tenemos problemas para conciliar el sueño.

A saber:

  • Visualizar un momento feliz. Podemos viajar a un hermoso momento del pasado e imaginar situaciones placenteras que nos gustaría vivir.
  • Escuchar una melodía relajante. Un estudio comprobó que la música suave nos hace sentir que hemos descansado mejor. También puede ayudarnos a conciliar el sueño escuchar grabaciones con sonidos de la naturaleza.
  • Justo antes de acostarnos€ Los expertos aconsejan que limitemos el consumo de líquidos a última hora del día. Y si nos despertamos por la noche, aunque sea por otras causas, no ir al baño, ya que acostumbramos al cuerpo y luego será este el motivo de que nos despertemos.


Y si a pesar de todo no dormimos bien, podemos escribir lo que nos preocupa. Ponerlo negro sobre blanco hará que lo que es un ruido sordo en la mente se concrete, y de esta forma podremos abordarlo. Si no conciliamos el sueño salvo delante de la televisión, los expertos recuerdan que no es una buena idea dejar la caja tonta encendida toda la noche, aunque tenga el sonido bajo, porque hace ruido y desprende luz.

Otro de los consejos que apunta la National Sleep Foundation es que el dormitorio esté libre de aparatos electrónicos, ya que la luz que desprenden los móviles, tablets o portátiles activa zonas del cerebro que afectan al sueño y eso puede hacer que nos despertemos durante la noche. Mejor dejarlos fuera del dormitorio y usar un despertador clásico.

EL SUEÑO QUE NECESITAMOS


La cantidad de sueño que precisamos depende de varios factores, incluyendo la edad, estilo de vida, estado de salud y si se ha dormido lo suficiente. Las recomendaciones generales para dormir son:

  • Recién nacidos: 16-18 horas al día.
  • Niños en edad preescolar: 11-12 horas al día.
  • Niños en edad escolar: por lo menos 10 horas al día.
  • Adolescentes: 9-10 horas al día.
  • Adultos (incluyendo adultos mayores): 7-8 horas al día.


Durante la pubertad, el reloj biológico de los adolescentes cambia y es más probable que se acuesten más tarde que los niños y adultos, y tienden a querer dormir más por la mañana. Por otro lado, algunos piensan que los adultos necesitan dormir menos a medida que envejecen, pero no hay evidencia que lo demuestre, aunque es cierto que al hacernos mayores tendemos a dormir menos o a pasar menos tiempo en el sueño profundo y reparador. Además, las personas mayores se despiertan más fácilmente. 

En cifras* El 32% de la población se despierta sin haber tenido un sueño reparador.* Un 35% llega muy cansado al final del día.* Cerca del 60% de la población nunca hace la siesta, y solo el 16% dice hacerla habitualmente.* Una hora es la duración media de la siesta en el Estado español. Demasiado larga.* Más de cuatro millones de personas en el Estado sufren algún trastorno de sueño crónico y grave.* Un 30% de la población española se despierta con la sensación de no haber tenido un sueño reparador o finaliza el día muy cansada.* Aproximadamente el 20-25% de la población infantil sufre algún tipo de trastorno del sueño.* El riesgo de mortalidad aumenta de forma significativa en aquellas personas que duermen menos de seis horas diarias.

La buena siesta

  1. Temprana. Se hace antes de la 5 de la tarde para que no interfiera en el sueño nocturno.
  2. No debe de superar los 20 minutos. Si descansas bien por la noche deberías despertar espontáneamente tras 15-20 minutos de siesta.
  3. Mejor tumbados. No es preciso que te acuestes, pero sí la haces en una butaca, recuéstate con las piernas en alto.
  4. Poco ruido y poca luz. Aunque tampoco se trata de hacerla en oscuridad total, como cuando vamos a dormir por la noche.
  5. Y si no te duermes, relájate. Aprovecha así para descansar el cuerpo y la mente.

Doce consejos prácticos

  • Irnos a la cama antes de media noche.
  • A la hora de dormir, no usar en el dormitorio ningún elemento que pueda generar distracción como televisiones, teléfonos móviles, etc.
  • Impedir (con persianas, cortinas, etc.) que la contaminación lumínica y sonora nos interrumpa el sueño.
  • Evitar cenar muy tarde.
  • Mantener la temperatura de la habitación entre los 20 y los 22 grado.
  • No consumir excitantes (bebidas con cafeína) después de la merienda.
  • Hacer ejercicios de respiración, relajación mental y muscular antes de ir a dormir.
  • No dormir siestas prolongadas.
  • Utilizar siempre el mismo aroma en la habitación y ropa de cama. Preferiblemente el de lavanda.
  • Suplementar con infusiones de melissa y/o pasiflora, y/o dosis bajas de magnesio y/o melatonina, una hora antes de ir a la cama.
  • No hacer ejercicio intenso poco antes de acostarse. Como mucho, alto suave y relajante.
  • Levantarse temprano. Lo mejor es de forma natural con la luz del sol.