Kromosoma sintético

El invierno ha sido benigno, acompañado de lluvias copiosas pero muy concentradas y ciclogénesis explosivas, nada novedoso excepto en su intensidad puntual y repetición inusitadas. Podríamos tomarlo por cambios cíclicos del tiempo, pero es un muy repetitivo y constante a largo plazo: la temperatura media de la Tierra sigue subiendo, con altibajos pero subiendo.

Todos los expertos aceptan el cambio climático como hecho constatable acelerado por la actividad humana. Hoy divulgarán el informe del Panel Intergubernamental de Expertos sobre el Cambio Climático (IPCC) confirmando que los impactos del calentamiento global ya son visibles en todos los continentes y océanos, con un panorama nada halagüeño si no se toman medidas correctoras, porque hoy sabemos inequívocamente que la mayor responsable de esta situación es la actividad humana.

Día sin humos, día sin coche, día del árbol … como otros días recuerdo por Gaia, el sábado en “la hora sin luz” muchos/as a las 20 horas apagamos la luz en solidaridad con Gaia-Tierra, nuestro hogar común.  Mera anécdota, puro símbolo, algo testimonial si lo hace una persona, pero no si lo hiciéramos miles, millones prescindiendo de esa luz que produce la contaminación lumínica que sufrimos.

Las calamidades que anuncian los expertos son apocalípticas: si subiera un grado la temperatura, disminuirá un 20% la cantidad de agua, los cambios pluviométricos inducidos alterarán los sistemas hidrológicos y afectarán a la disponibilidad de agua y a su calidad, millones de personas sufrirán inundaciones costeras, se reducirán los bosques y la biodiversidad; si subiera dos grados, los arrecifes de corales y el Ártico estarían en lista de extinción. Además, se reducirá la seguridad alimentaria, aumentará la pobreza, las desigualdades pobres/ricos se ampliarán, la economía mermará entre un 0,2-2 % y aumentarán las enfermedades y los problemas sanitarios.

El Langone Medical Center (Nueva York)ha publicado un gran avance biotecnológico, la síntesis  exnovo de un cromosoma funcional completo de levadura, un organismo eucariota complejo como el de animales o plantas. No es crear vida artificial, pero sí algo parecido a inventar un software e introducirlo en el ordenador.  Mejor pan, cerveza y combustibles pueden ser sus aplicaciones. El siguiente paso será sintetizar todo el genoma y se estará más cerca de crear la vida artificial, con sus dilemas éticos pero también con ventajas en terapia génica.

Si estos avances biotecnológicos impensables hace 15 años son viables, acaso podría imponerse también está rapidez tecnológica para atajar el cambio climático.

A no ser que no falle la capacidad tecnológica, sino que sobre codicia humana.

El hombre no ha entrado en casa…

Aunque la mujer sí haya salido de ella.

Setecientas mujeres asesinadas por sus exparejas en los últimos diez años son un muestrario horroroso de la violencia de género, pero no es éste el problema vital ni la situación habitual de la inmensa mayoría de las mujeres. Mayoría social que sí vivimos/sufrimos otro tipo, no de violencia, pero sí de agresión continuada de baja intensidad que es lo que denominamos desigualdad.

 Desigualdad en los estudios, son más ellas con mejores resultados, pero al saltar al campo laboral ocupan menos puestos de relieve; es el techo de cristal. Desigualdad en los sueldos, a igual trabajo inferior retribución. Desigualdad son los despidos encubiertos por estar casada o embarazada. Desigualdad es la significativa mayor tasa de desempleo entre mujeres.

Por esto, recordar el 8 de marzo a la mujer es como el Día de las Enfermedades Raras: “celebrarlo un día” y olvidarlo los 364 restantes. Pero las mujeres no son enfermedades raras, sino la mitad de la población, y el quid de que el 8 de marzo desaparezca del calendario de fechas D tal vez esté en la otra mitad, al menos tanto como en nuestra mitad femenina. Porque las mujeres, las jóvenes prácticamente todas, han dado el paso de lo privado a lo público, de casa al ágora. Estudian, trabajan, Universidad, empresa, comercio… en todas las actividades. Pero si la mujer ha salido a lo público, no por eso ha dejado de seguir estando en casa: atención en el hogar, hijos/as, cuidado de mayores; es la conocidísima doble (y hasta triple) jornada laboral de la mujer. Aquí entra la mitad imprescindible para la igualdad: la corresponsabilidad del hombre, su coparticipación, no como mero ayudante, sino como titular a pleno derecho de su mitad de responsabilidad. Sin esta conciliación laboral-familiar la igualdad de la mujer será un desiderátum inalcanzable.

En mayo votaremos en Europa porque somos europeos/as; podríamos copiar en algo a nuestros conciudadanos/as del Norte, por ejemplo en los horarios. Tenemos series televisivas hasta altas horas de la madrugada, partidos de fútbol a las once de la noche… que inciden en los horarios especialmente de los niños/as; tenemos dos o más horas para comer, en lugar de hacer jornada continua; no se facilita el horario laboral complementario de la pareja, por citar ejemplos.

Claro que no solo es cuestión de leyes, pero el día que el 50% de la pareja-masculina entre en casa la igualdad de oportunidad de la mujer será un hecho casi consumado.

El céntimo extraviado

Lo llamaron céntimo sanitario, pero ni era impuesto progresivo-proporcional ni se empleó en la sanidad. Su finalidad era meramente recaudatoria, una mordida o donativo mafioso más que a una carga fiscal.

Esta semana Correos británico introdujo un nuevo sello de Alan Turing como británico distinguido. Turing fue el informático/matemático que descifró el código de la Enigma nazi durante la Guerra Mundial. Pero no será héroe nacional, porque desde 1952 sigue siendo legalmente un delincuente por homosexual.

A Galileo(RIP1642) tardaron 359años en levantarle el anatema, pero poco beneficio y pudo obtener en vida de su genialidad astronáutica.

Entre 2002/2012 catorce comunidades cobraron un céntimo por litro de gasolina. Su finalidad fue exclusivamente recaudatoria, más astilla o mordida que impuesto reglado, tan ilegítimo como legal; legal porque parlamentos lo votaron al diktat del pensamiento neocom “más muchos pocos, que pocos muchos”, consiguiendo de paso que sus amigos “Bárcenas et al” no tuvieran que pagar tantos impuestos o incluso ninguno. Sabían que su implantación era ilegal, pero hicieron oídos sordos.

Ante la demanda de un empresario catalán del transporte, ahora el Tribunal Superior de Justicia de la UE sentencia que es ilegal porque vulneró las leyes comunitarias y debe ser devuelto a los ciudadanos. He aquí el nudo gordiano. Porque esta alegría pública difícilmente podrá transformarse en gozo privado. En Euskadi no se cobró, pero lo hemos pagado al viajar fuera, por lo que podemos entender todavía mejor a quien lo aportaron diariamente durante 10 años. Pero de estos diez años sólo podrá reclamarse facturas de marzo-2010 a diciembre-2012. Además, sentencia en mano, la devolución se hará si hay factura. ¿Quién de ustedes no las guarda? ¡je,je! ¿Y quién no archiva las facturas de gasolina durante 10 años? ¿Quizá alguna gran empresa de transporte? Tal vez. ¿Y a quién reclamar: al ayuntamiento, a diputación, a la comunidad autónoma, a la hacienda central…? Nadie lo sabe. Otro vericueto legal. Así que de los 13mil millones recaudados podrán reclamarse unos seis mil, ¿el resto? Al limbo mariano.

Sería buen bálsamo democrático que pagaran quienes lo votaron a sabiendas de su ilegalidad. ¡Écheles un galgo a esas liebres parlamentarias! Podrían destinar lo recaudado ilícitamente a su presunto fin: sanidad pública. Lo dudo/dudamos.
La sentencia será una alegría pública que suena a brindis al sol. “Recuerden” la alegría de Galileo el 31diciembre1992 cuando Juan Pablo II le indultó por su teoría heliocéntrica.
Pues eso, que mirar al sol de la Justicia retardada escuece en los ojos y sangra al bolsillo.

Todo legal

 La puerta giratoria es la metáfora de una realidad pública-política española que nada tiene de poética sino de prosaica ambición personal.

El año pasado el consejero de sanidad de Madrid sr. Lamela inauguró un hospital público del que concedió su explotación privada a la empresa Assignia Infraestructuras en cuyo consejo de administración entró él mismo cuando salió (o le catapultaron) del cargo público. Salto con red en pocos meses, con conflicto espurio de intereses entrelazados.

J.M. Benito, alto cargo en Sanidad de Castilla la Mancha, adjudicó contratos por 36millones de euros a la empresa CLECE-ACS, en la que comenzó a trabajar como asesor ocho semanas después de su cese en el cargo público.

Los ciudadanos/as no sabemos a ciencia cierta si Enagás es una empresa privada, pública o según, pero sí que las exministras Tocino y Palacios, el expresidente de Alianza Popular, Hernández Mancha, el expresidente del Tribunal de Defensa de la Competencia del Gobierno de Aznar, Gonzalo Solana, y el hasta hace unos días director general de Industria y de la Pequeña y Mediana Empresa, Luis Valero, serán del consejo de administración de esta empresa “privada” con unos ingresos superiores a 70.000 euros al año, una nadería comparado con lo que cobrará como consejero delegado Marcelino Oreja(jr), tras su paso por responsabilidades públicas… sí, lo han acertado, en áreas de energía. 

No se apuren, no pasa nada, todo legal, como ha sentenciado el Tribunal Supremo, que no ve delito en que 60 diputados cobren por gastos de alojamiento y manutención 1.823,26 euros al mes pese a contar con vivienda propia en la capital del reino.

No extraña que el Consejo de Europa critique  la ‘puerta giratoria’ de los  parlamentarios y en general de los políticos españoles, no tanto cuando están en ejercicio sino especialmente cuando cesan en sus cargos, desde los que giran su puerta sin solución de continuidad a empresas privadas relacionadas con los ámbitos de su anterior actividad pública.

Podría rastrearse algún indicio de incompatibilidad e irregularidad, pero en general en todos estos giros de puerta no existe ilegalidad comparable al terrible delito del parado que arregla grifos.

El Consejo insiste en la total falta de códigos éticos que controlen estos trasvases en España, pero en el país de Roldán/Armada, Gürtel/Filesa, Gal/fondos reservados… hablar de códigos éticos y deontológicos es pedirle a Rinconete, Cortadillo o al Lazarillo de Tormes que paguen el metro o que no sisen a los amos que les roban a ellos.

Pero claro todo es legal, faltaría más. 

 

Todos somos suizos

Aunque  seamos de segunda, porque en realidad nuestra íntima ambición inconfesada es que quisiéramos ser suizos, confederados de la Helvetia feliz con fuentes manando leche y miel. Y entre sorbos de esa fuente degustar chocolates, llegar puntuales con precisos relojes, esquiar en interminables pistas blancas, encontrar trabajo seguro y bien remunerado, disponer de 70.000euros de PIB, depositar nuestros ahorros en bancos fiables (junto a las grandes fortunas mundiales), pasear por calles impolutas… bueno, no es un sueño sino una realidad suiza algo edulcorada. En la Confederación Helvética viven 8millones, pero a nosotros/as nos gustaría ser de los 6,2millones con ciudadanía suiza, no de los dos millones que allí habitan sin serlo y que saben de las leoninas condiciones administrativo-legales para acceder a la ciudadanía. Claro que no todo es pan y edelweiss en el país alpino, el 7,6% vive bajo el umbral de la pobreza (maticemos: menos de 2.200 francos suizos/mes) y el 9,3% de los niños sufren esa misma pobreza, pero esto no resta un ápice de intensidad a nuestra ambición del dorado helvético.

Quizá por ello nos haya caído como un cántaro de agua helada su decisión de controlar la inmigración, incluso la de UE: aeropuertos, carreteras, contratos, beneficios sociales… todo bajo estricto control; ha sido decisión mayoritaria adoptada en una votación democrática a las que tan habituados están los suizos, no como en estos lares, donde posturas como éstas las adoptan cuatro en un gabinete de viernes correquetepillo. Por eso mismo pueden adoptar decisiones que otros muchos desearían y no se atreven, como fue no dejar instalar minaretes. Y nos afecta, porque con 25 años, los estudios terminados y paro en vigor, siempre quedaba la recámara: “hago la maleta y emigro…” a Suiza, a Bélgica, Inglaterra, Dinamarca, Alemania… pero todos estos países, de una u otra forma, están constriñendo la entrada y engrasando la salida: la invitación-invectiva es perentoria.

Mientras Suiza decreta cerrojazo al emigrante con votos, leyes y sutiles controles, por aquí también echamos el cerrojazo a nuestro modo, con vallas, concertinas, balas de fogueo, pelotas de goma, mucho tricornio, internamientos denigrantes, expulsiones indignantes… y de camino mucha declaración política con cúmulos de mentiras y verdades a medias, “digo Diego, aunque antes quise decir digo”, explicaciones y desmentidos inverosímiles.

Somos, o pretendemos ser suizos, pero ejercemos de segunda, de suburbio, sólo en lo menos bueno, porque nadie quiere conocer lo que de verdad queremos.

Como diría mi alter ego, en Berna separtenlacaja con nuestra cutre forma de copiar su xenofobia.