Nos asomamos una vez más a nuestro litoral, esta vez lo hacemos a través de Bakio. Este pequeño municipio esta rodeado casi por todos los puntos cardinales de montes como el Burgoa, el Garbola o el Jata. Es por el norte, en su abertura al mar Cantábrico, donde se expande gracias a su preciosa playa de sobra conocida por los veraneantes y surfistas.
Más info: www.bakio.org
A cada paso nos encontramos panorámicas como esta. La costa de Bakio es un lugar privilegiado, rodeada de playa, acantilados, calas y paseos. Pero también merece la pena perderse por sus caminos del interior. Entre caseríos y montes fácilmente os encontraréis verdes laderas cubiertas de viñedos. Y es que este lugar está considerado la cuna del txakoli de Bizkaia!
Estamos en un lugar privilegiado para el cultivo de la vid; el valle protegiendo Bakio de los vientos del norte, la brisa del mar acariciando las uvas que después aportará esa acidez tan característica al vino, el «zirimiri»,… así crecen sus viñedos.
Este vino se ha cultivado durante siglos en sus caseríos. Los comienzos de su elaboración se pierden en la memoria de Bizkaia, a pesar de que una fuerte crisis en 1980 casi lo hace desaparecer, este vino y sus viñedos se encuentran hoy día en su mejor momento. Han sabido conquistar los paladares de fuera y dentro de nuestras fronteras.
Si os gusta este vino tan nuestro os recomiendo que os acerquéis hasta aquí a descubrir sus raíces. Existen cuatro bodegas adscritas a la Denominación de Origen Bizkaiako Txakolina Además, Bakio cuenta con un «Txakolingunea», un espacio donde os ayudarán a conocer todos sus secretos.
Este lugar os sorprenderá a cada paso. Es todo un espectáculo de mar, olas, olor a brisa y monte.
Está formado por siete pequeños barrios donde se encuentran sus más de cien caseríos, algunos de ellos centenarios. No os olvidéis de recorrerlos. En uno de sus barrios, en el camino que bordea la costa y que llega a Bermeo, nos encontramos con este tesoro del románico, es la ermita de San Pelayo (San Pelaio o Doneperai en euskera).
Es una de las construcciones más antiguas y mejor conservadas de esta época de Bizkaia. Probablemente es del siglo XII, increíble que mantenga casi completa e intacta su planta original.
Sin duda que Bakio es mucho más que su increíble costa de calas y playa!
Aqui os dejo el video de cuando Agroviajeros TV paso por aquí: