Reconocimiento a José Miguel Eizaguirre – La culpa es del establishment nacionalista.

Sábado 20 de enero de 2018

El jueves por la noche, en el Carlton, el Consorcio de Aguas Bilbao Bizkaia y Metropoli 30, presentaron un interesante libro de José Miguel Eizaguirre, director-gerente durante cuarenta años de este importante conglomerado de Abastecimiento y Saneamiento de Aguas.

El acto valió la pena pues puso de manifiesto el trabajo bien hecho, la continuidad en el mismo, la planificación continua e inteligente, la manera de trabajar y sobre todo la entrega de muchas gentes que tuvieron en su día la visión de darle a Bizkaia lo que necesitaba incluso bajo el franquismo.

Lógicamente salió a colación la figura de Ángel Galindez, verdadero cerebro y guía de todo un proyecto que nació con una Ría que era solo una maloliente y famosa cloaca navegable, una agua de Bilbao no potable, restricciones, y miedo a las sequías. Por eso la palabra más repetida fue la de la planificación en algo que no se ve, demanda mucho presupuesto, pero es vital para que la gente viva sana y confortablemente.

El concejal Barkala hizo la presentación con respeto y humor destacando el nacimiento de Eizaguirre en Albistur (Gipuzkoa) y sus cuatro décadas de trabajo para sentar las bases del saneamiento actual de Bizkaia. Tomaron decisiones “con visión de largo plazo, arriesgadas, costosas, complejas, difíciles, pero necesarias”.

Mi mujer María Esther me llevó de consorte a un acto en el que estuvo en su salsa, no en vano logró con Iñigo Urkullu que Durangoaldea entrara en el Consorcio, lo mismo que Ondarroa cuando estuvo en la Gestora y lleva trabajando lo indecible para que Busturialdea y Alto Nervión lo hagan en beneficio, fundamentalmente, de los usarios. Cuanto más potente sea el Consorcio, mejor será para todo.

Eizaguirre, con 87 años, pronunció un discurso con datos y recuerdos de hechos y personas que a todos interesó y que se cerró con un gran aplauso hacia toda una trayectoria.

 

El fiscal del caso de Miguel

Estoy viendo Suits, la serie de Netflix. Se trata de la vida y vicisitudes de una serie de abogados en Nueva York. Engancha. Y suelo preguntar a los abogados que conozco si lo que viven los protagonistas de Suits en el sistema judicial norteamericano tiene algo que ver con el procedimiento judicial que tenemos por estos lares. Algunos me dicen que básicamente sí, aunque cambien los ritmos y las puestas en escena y hasta la decoración y los modos porque la esencia es que la fiscalía tiene que demostrar con pruebas que existió un delito, la defensa defender y el juez dictar sentencia. Lo mismo aquí, pero más lento y farragoso.

Viendo los capítulos con mi mujer nos llama la atención, por ejemplo, la beligerancia en Estados Unidos de la Fiscalía que no duda en amenazar, intimidar, ir al bufete de abogados, esperar a su “presa” en la puerta de su casa, meterla en un coche para que declare, seguirle con llamadas y detectives. Y solemos comentar que parece increíble esa manera de proceder que llega al insulto.

Sin embargo, ayer, viendo y escuchando al fiscal Josu Izaguirre acusar a los implicados en el caso De Miguel, su actuación tan desbordada, tan genérica, tan malintencionada, tan histriónica, tan volcada contra el PNV, a veces nos pareció sacada de la serie Suits. Decir que los acusados actuaron con desvergüenza y que contaban con el apoyo del establishment para reclamar el pago de comisiones ilegales solo tenía como mala intención implicar a todo el PNV en la trama, sin prueba alguna, de manera genérica y con evidente mala intención porque estaba hablando para la cámara de televisión que tenía delante.

El fiscal sabe que tras la sentencia del caso Palau, el juicio de la Gurtel y todo ese ambiente de corrupción sistémica es fácil que sus palabras caigan en terreno abonado para su manipulación, que es lo que está tratando de hacer con total desvergüenza. Veremos cómo queda la cosa.

Acusar sin pruebas sabiendo que hay una cámara delante es muy grave pero descubre una línea obsesiva de actuación: el PNV es el culpable y no los que se sientan en el banquillo. Lo quiere el fiscal, lo quiere Madrid que no soporta que la corrupción sea solo la del PP, porque de los Eres ya nadie se acuerda.

Me gustaría saber quién es este fiscal, y el porqué de sus mala idea y de si seguirá con esta línea argumental que el juez debería rechazar ,porque lo demás se impone la pregunta: Si está tan seguro que el culpable es el stablishment ¿por qué no amplía su acusación a todo el PNV?.

No lo hará porque sabe que el PNV nada tiene que ver con este presunto grupo extorsionador que se prevalía de su posición mientras traicionaba a un PNV que había depositado su confianza en ellos, en el supuesto de que así se demuestre. Y de momento, lo único que hay es carnaza para la fiera antipeneuvítica a cargo de un fiscal con muy mala intención.

Ni en Nueva York se ve esta forma de actuar.

2 comentarios en «Reconocimiento a José Miguel Eizaguirre – La culpa es del establishment nacionalista.»

  1. el fiscal la ha cagado al meter al establisment…porque que establisment??hay diversos establisment pero no sabemos a cual se refiere exactamente aunque parece que apunta…pero establisment en un proceso judicial es muy impreciso cuando se piden tantos años y se supone ser preciso para ello claro….es contradictorio en si mismo

  2. Sin verdadera oficina de control para identificar las personas que se acercan de los aparatos politicos, nunca tendremos una seguridad entera !!

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