Andreotti y la desmemoria colectiva

Domingo 23 de enero de 2021

Decía José Saramago que se empieza con el olvido y se termina en la indiferencia. Sobre esto leí en un libro, escrito por Giulio Andreotti, aquel viejo zorro de la política italiana decir que un proceso judicial puede ser más sutil que un asesinato.

Siempre me llamó la atención esta personalidad democristiana, siete veces primer ministro y más de una veintena de ocasiones ministro de Finanzas, Tesoro, Defensa, Industria o Asuntos Exteriores así como encausado por una poco clara acusación de conexión con la mafia. La última vez que le vi, en Atenas, en un congreso de la democracia cristiana europea, seguía con atención los debates, tomaba notas e intervenía. Tras tumbarnos una enmienda sobre la regionalización de Europa fui donde él y le hablé de la reunión de Roma de 1946 donde el PNV había sido invitado y le mostré cortésmente nuestra contrariedad por su voto. Me miró con sus ojos achinados, respiró y se excusó. ”Recuerdo aquella reunión de 1946 que fue fundamental, pero no pensé desgraciadamente en ustedes al votar, que salvaron los principios de la DC, sino pensaba en la Liga Norte”. El hecho  no es óbice para  destacar su figura que presidió Italia de una manera casi total durante cuatro décadas. Retirado de la primera línea y como senador vitalicio tuve la suerte de verle en reuniones de la Unión Interparlamentaria y en otras de signo europeo. Con su creciente joroba, no se podía dejar de reconocer que semejante personalidad era un fuera de serie a la hora de zurcir acuerdos. Maquiavelo lo hubiera elegido como retrato de otro Príncipe.

Escribió un libro “De prima Re Publica” sobre la historia de la República italiana, desde el referéndum sobre la monarquía en 1946 hasta nuestros días. Y es que en 1946, sólo el PNV y un partido suizo acudimos al Congreso de la naciente DCI en Roma tras la guerra donde emergió con fuerza la figura del europeísta Alcide de Gasperi, siendo Andreotti su secretario. Y fue también en aquella oportunidad en la que no triunfaron las presiones de la embajada franquista en Roma y el  ex diputado alavés Francisco Javier de Landaburu fue el invitado más importante de aquel partido que iniciaba una singladura de gobierno. El libro pues, es muy interesante.

“Mi libro -dice Andreotti-, traduce una preocupación personal por el hecho de que muchos de los nuevos políticos saben poco o nada de lo que hicimos nosotros en el pasado. Hay una tendencia a cancelar todo lo que significa “viejo sistema” o “viejo régimen”, lo que permite a los políticos de hoy poder decir “nosotros somos estupendos” y “nuestros predecesores no hicieron más que barbaridades”.

“Italia tiene una serie de problemas justamente porque ha crecido rápidamente, y es verdad que si un defecto puede achacársele es el no haber entendido que una sociedad que crecía de manera tan rápida a nivel económico, en calidad de vida, tenía necesidad de construir ese progreso sobre una base moral más fuerte. Considero que la crítica de Pier Paolo Passolini a la DC, acusándonos de materialistas, y recordándonos que “non in solo pane vivit homo”, fue válida. Aquello merecía una reflexión que no hicimos entonces porque lo consideramos un ataque político”.

“Yo el poder no lo concibo como un cargo público, como un mandato político. El poder lo entiendo en términos de influencia sobre la opinión pública. Indro Montanelli, por ejemplo, tuvo más poder que un ministro. Bajo esta perspectiva, pienso que el poder no desgasta si uno sabe comunicarse con la gente. Naturalmente, si se contempla el poder como ejercicio de un mandato, como un cargo público, sí que puede desgastar, incluso interiormente. Dicho esto me parece que una cierta profesionalidad política siempre cuenta, porque hoy estamos asistiendo precisamente a una gran falta de preparación para la vida pública e incluso del gusto de hacer política”.

Seguiría transcribiendo pensamientos de un político a tiempo completo que seguramente con el tiempo tendrá el debido reconocimiento. Con el viejo zorro no pudo ni la peletería a la que le llevaron las reyertas de su país tras el hundimiento del Muro y el fin de la política de bloques, ni los odios africanos hacia un tipo inteligente con las ideas claras al que he recordado viendo el pésimo espectáculo de un Boris Johnson, político exitoso en esta sociedad del espectáculo, la antítesis de Andreotti, al que nunca le ha importado mentir, frivolizar, mal usar el poder. En estos días se nos daba una de las pautas que siempre ha utilizado para salir flotando en todas sus crisis, su fórmula cínica y mágica que no es otra que “la desmemoria colectiva”. El tipo sabe bien que la gente se olvida de todo, tiene memoria de pez y en tiempos de crisis la falta de seriedad y de rigor se sustituye por el pan y el circo, el enamoramiento de la superficialidad, la infantilización de la política, la manipulación de la realidad, la exageración y sobre todo la falta de formación histórica de la clase política. Sobre todo esto. A pesar de que se nos diga que hay que escuchar fuera, cuando no se escucha dentro. Falta de cultura de país y de sentimiento de partido humanista.

El sábado 15 de enero falleció en su Araia natal Félix Ormazabal. Don Eduardo, el párroco de San Pedro, en su sentida homilía destacó de él los dos amores de su vida, además de su familia. Araia y el pueblo vasco con su propia identidad. Cura social muy comprometido en sus primeros años, el mundo rural fue su pasión y entrega además de haber sido Consejero de Agricultura y Diputado General de Araba. En su tiempo nació Artium y el proyecto de la Catedral, entre mil actividades y programas. También fue parlamentario donde le conocí en 1980. Fue asimismo presidente del Araba Buru Batzar. Escuchándole al sacerdote recordé a los presidentes de las ejecutivas alavesas del EAJ-PNV desde 1976. Mikel Estabillo, muerto en fatal accidente, José Mari Gerenabarrena, visitador incansable de todos los pueblos y con una gran cultura histórica, Xabier Agirre, resistente junto a Joseba Azkarraga, Patxi Ormazabal y Mikel Estabillo bajo la férula de Luis Mari Sánchez Iñigo, asimismo recientemente fallecido. Todos esos presidentes ya no están con nosotros y me da que sin haber dejado nada escrito y sin que nadie se tome el trabajo de contar  la verdad  de estos casi cincuenta años ni decir como estaba Araba en 1975 y como está ahora. Un trabajo casi desde cero, de poner en pie, desde el punto de vista institucional y democrático, la actual realidad. Somos un pueblo ágrafo y de ahí nos viene que las librerías estén llenas de títulos con historias manipuladas. Si a esto se le añade una resistencia de nuestras  instituciones, a las que hay que casi mendigar cuatro duros, porque no son ellas las promotoras de esa recuperación para editar la historia silenciada, el resultante no es muy halagador.

Animaría a los chavales a leer e interesarse por la historia con el fin de  lograr una mayor perspectiva de las cosas. Se entendería mejor las claves de la política y el por qué hemos durado tanto superando a grupos que basan su atractivo y sus posibilidades en la “desmemoria colectiva” de Johnson a los que nos les importa nada ignorar, tergiversar, silenciar o manipular lo realizado por hormigas tipo Ormazabal, Xabier Agirre, Sánchez Iñigo, Periko Arrrizabalaga basándolo todo en el desconocimiento de la historia de   unas generaciones a las que nadie  les ha enseñado qué ocurrió de verdad en Europa, en el estado español, en Euzkadi  y en Araba en estas décadas fundamentales.

Decía Julio Caro Baroja que “para liquidar a los pueblos se comienza por despojarles de su memoria, se destruye su cultura y su historia y alguien les escribe libros, les da otra cultura y les inventa otra historia… luego el pueblo comienza a olvidar lentamente lo que es y lo que era». Pero no solo lo decía  él. Václav Havel insistía en que ”sin memoria no hay continuidad histórica y así no es posible mantener una identidad”.

Algo de todo esto creo nos está pasando si seguimos creyendo que estas son batallitas del abuelo Cebolleta y no aprendemos de gentes con experiencia como Andreotti que se lamentaba del desconocimiento absoluto de lo hecho y no haber crecido asentados en una base moral más fuerte. Como decía sabiamente el viejo zorro, ”no solo de pan vive el hombre”.

10 comentarios en «Andreotti y la desmemoria colectiva»

  1. Andreotti, amigo de mafia, cuando el río suena …

    Efectivamente si es un ejemplo a seguir por los políticos, pero no de la gente honrada.

    Respecto a la lectura, ya estamos otra vez promocionando «Editorial Batzoki S.A».

    Te recomiendo que leas «El principito», enseña mucho más, de lo que es la vida.

  2. Andreoti fue un politico con clarooscuros…eso si muy sagaz ..de esa democracia cristiana tan poliedrica de los setenta , de esa democracia me quedo con aldo moro asesinado por las autollamadas brigadas rojas.
    Al hilo de este asesinato que rompio la posibilidad del compromiso historico entre la D.C. y el PCI, que quizas hubiera cambiado a mejor la politica italiana , llamo la atencion en lo » bien» que eligen los terrorismos a sus victimas polticas, vease como eligio ETA a Buesa y Ordoñez que quizás fueran los dos políticos mejores que tenía el socialismo vasco y los populares vascos.
    Por supuesto lo de » bien» lo defino para sus intereses y no para ambas sensibilidades politicas y por encima de todo para la propias sociedades donde actuaron los terrorismos en Italia y en España

    Por otra parte, de acuerdo con las frases que has reproducido de Julio caro baroja y de havel.

    Hay pocos reconocimientos a los combatieron la dictadura y a los encabezaron las instituciones en los primeros años de esta democracia…y mucho adanismo.

  3. Gran personaje Andreotti y magistral relato Iñaki. Mucho tenemos que aprender y al tiempo, no olvidar

  4. La historia es a su pueblo lo que la columna vertebral a todo ser.
    Lamentablemente, las voces de la política cada vez más ignorantes y abstraídas de la cultura y de la historia se benefician de la ignorancia y falta de memoria del pueblo y atienden a intereses circunstanciales y demagogos.

  5. LA REALIDAD ES QUE MUCHOS NO NOS INTERESAMOS POR LA POLITICA HASTA QUE NO VEMOS NUESTRO RANCHO ARDER, PORQUE HAY MUCHAS COSAS MAS INTERESANTES, ENTRETENIDAS Y DE AYUDA INDIVDUAL DIRECTA, VERDADES MAS PROFUNDAS Y ESENCIALES, PRIORITARIAS, PRINCIPALES. PERO LLEGAN MOMENTOS FUNESTOS QUE NOS HACEN CONSCIENTES DE QUE HAY QUE TENERLA EN CUENTA.

  6. Andreotti fue el caballo de Troya que las mafias de toda Italia colocaron en el poder para evitar que el comunismo llegara al poder. En Grecia, Portugal y España los USA lo arreglaron con la dictaduras militares, en Italia se entendieron con las Cosas Nostras para conseguir el mismo objetivo.

  7. Por aquello devque la memoria colectiva es flojita y se guía más por los relatos de una parte que por la Historia, uno de cada cinco españoles votaría hoy a VOX.
    Resulta llamativo que últimamente no se publiquen estudios de intención de voto en la CAV. ¿Por qué será?

  8. A veces tocas tantos temas, que es difícil centrarse en uno. Andreotti, si, fue un personaje que nunca se sabrá de verdad si le tenemos que aplaudir a rabiar o si le tenemos que poner un cero. Posiblemente, sea un personaje de claroscuros que no se pueda analizar así, de sopetón. A mi si me gustaría que en el PNV, se valorara más, y cuando digo valorar más, digo a valorar a través de diferentes medios, el trabajo que el Partido desempeñó después de la segunda guerra mundial.
    Fue creyente e iniciador de lo que ahora conocemos como UE, cuando en España, las izquierdas pensaban en el paraíso de Stalin, viendo aquellas repúblicas Soviéticas y no Soviéticas como Yugoslavia, Polonia, Rumania etc. como el modelo político y de sociedad a seguir. Esto dejó sonrojado a muchos cuando la Perestroika llegó a la caída del muro de Berlín, la caída de Caucescu etc. Y las derechas de España, donde estaban? Pues con Franco, nunca ha habido un movimiento fuerte de centro Derecha en España, con un sentido democrático en condiciones. Por lo tanto, en aquellos años post II Guerra Mundial, solo hubo un actor en España (y no es de confesión española precisamente) que luchó por una democracia digna y por la reconstrucción de la vieja Europa en una Unión Europea. Ese fue el PNV, y esto, la mayoría de la gente lo desconoce, se necesita más información, más reportajes sobre aquellos años, para que la gente sepa, donde estuvo cada uno.
    Por eso y porque nunca se ha alejado de ello, estaré cerca del Viejo pero Moderno Partido.
    En aquellos tiempos, de igual forma, se empezó a crear el telón de acero. y esto fue de suma importancia para los Franquistas, su régimen Nacional Católico que no Nacional Socialista, era necesario para las fuerzas democráticas para tenerlo como al menos medio amigo. Y esto hizo que su dictadura se alargara en el tiempo.
    Cuando hablas de Mikel Estabillo, José Mari Gerenabarrena, Xabier Agirre y ese largo etc. de personas que hicieron posible que hoy Araba vote abertzale, me siento que siempre les deberemos algo, también a muchos que nunca se habla de ellos, pero que fueron importantes, como Antonio Muro y Alvaro Medrano en Lapuebla, de Alfonso besa en Villabuena, de Juanjo Saez de lacuesta en Lantziego, de los Ganzedo en Aiala, de mucha gente que hizo que Araba, haya cambiado tanto ideológicamente. A través de las Ikastolas como en Lapuebla, Agurain, Laudio, Vitoria, .. a través de estar en todos los cotarros que se organizaban. Hoy no soy tan optimista, pero espero que las semillas de aquellos, nos hagan seguir creciendo.

  9. Decía Vazquez Montalbán, creo que con acierto, que nuestra patria está en el paisaje sentimental de nuestra infancia. Y, digo yo, que lo que nos une a nuestra patria, nuestra infancia como seres, es la memoria. No habría mar sin ríos. Las memorias no nos llevan al pasado. Nos traen del pasado.
    Por eso las derechas no admiten la ley de la memoria histórica. Es el lugar donde no quieren ir, pero tampoco quieren los vientos que les trae, esencias de injusticia y atropello, sabor a estado de derecho de pies podridos, hundidos de el barro de la ignominia. Y aunque duela, habría que asumirlo – y repararlo- para seguir hacia adelante.
    Hace poco oí en una película británica a un personaje aristócrata decir de un plebeyo nuevo rico que tenía mucho mérito pero no había acertado en la elección de sus antepasados. Eso le pasa a la democracia española.

  10. Esnepel.
    Cita muy oportuna e interesante.
    No se me ocurre mejor manera que definir la transición española y con menos palabras.

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