A un mes… ni más ni menos. A un mes de lo que puede ser la experiencia más importante de mi vida deportiva, espero que vengan más. Otro continente, otra cultura… vuelta a las raíces del atletismo, nos vamos a África.
Reconozco, y no me avergüenza, que soy un poco folclórico y que vivo de manera muy intensa todo (lo que me interesa), sin rubor digo: que puedo ser el Bustamante del trail. Ya lo dije por aquí, pero creo que esta carrera/oportunidad me viene en el mejor momento, deportivo? no, personal. El que siga esta bitácora low cost desde sus inicios, sabrá que ha habido un descenso en cuanto a la cantidad (no se si a la calidad) de las competiciones. Me acuerdo del 2011: 3 medios Ironman, Ironman de Niza, Ultratrail de los Monegros, Challenge de Calella, maratones de montaña, temporada de ciclocross… Pero desde la llegada de Jon, ni he podido y ni he querido hacer estás carreras tan extremas.
Visto con perspectiva, esta actitud era una mentira a uno mismo. Y qué hay más triste que mentirse a sí mismo?. O mejor dicho, no se puede pasar del todo a la nada, hay algo que queda pendiente. El adicto tiene eso ahí y a la mínima sale. Y algo así me pasó con este Ultratrail. Había tomado una decisión: dejar la larga distancia para centrarme en carreras más cortas, porque creo que me van mejor, porque creo que puedo hacer más al año y porque creo que con el tiempo que tengo es lo mejor… Pero amigo… cuando «me se» puso a tiro ni lo dudé. Había que ir, había que cerrar esa página de mi vida, y había que hacerlo con algo importante. Y con la distancia que más me gusta, el ULTRA.
Y así es como me lo planteo. Cerramos un capítulo, esperemos que no sea el epitafio, y abriremos otros. Pero las cosas se cierran bien. A lo grande. Para los que el deporte es más que un hobby y el correr más que un deporte, las carreras de este tipo son algo más. Con un componente personal y que no se ría nadie, casi espiritual. Tu y la montaña. Cara o cruz. Tu y tus miedos. Bien o mal. Pensamientos que debes cerrar y dejar ahí para siempre. Un Ultra no es correr mucho rato, al menos no lo es para mí.
Cuando te enfrentas a una carrera así, puedes salir victorioso o salir derrotado. No te permite irte al burladero, has de enfrentarte de cara y superarlo. Vas a tener miedos, inseguridades pero esa es la gracia. Es algo más que correr, es mucho más que correr. El que toma la salida no es el mismo que el que llega a la meta, para bien o para mal.
Seguiremos por esta línea, intentando explicar algo que para mi es muy difícil de explicar pero que al menos lo voy a intentar.