Una experiencia, un reto, un desafío… no hay mejores palabras que definan lo que vivimos el sábado. Perdonadme si utilizo la primera persona del plural, no es ni falsa modestia ni un error víctima de los recortes en educación; es porque el sábado aunque corrí yo, si no es por todos los que estuvisteis allí, no hubiera sido posible.
Siempre decía, que no hay cosa peor que la lluvía, la odio… el agua en la piscina o en un vaso. Pues el sábado la tuvimos toda, algo que de salida me trastocó. A las 5:45 salíamos de casa dirección a Santurce, nada hacía presagiar la que nos venía encima. En el ayuntamiento de Santurce las primeras gotas… Allí estábamos para salir, vinieron mis tíos y mi primo Mikel me ayudo acompañándome con la bici hasta la cima del Serantes. Este primer monte, aun de noche, y únicamente con la luz del todo terreno de mi tío se me hizo corto, quizás aun con las fuerzas intactas. En el Serantes me despedí de ellos y rumbo al mar… Punta Lucero me esperaba… aun pensaba que solo eran cuatro gotas… Pero de eso nada… desde el minuto cero hasta las 11:30 llover y llover… El primer sector el que terminaba en la arboleda se me hace rápido y me lo ventilo con 1h de adelanto sobre el horario previsto. No sabía si me había cebado con el ritmo… eso se vería más adelante.
En la arboleda y dispuesto a correr el segundo sector estaba Txema, que supo regularme en todo momento y que me llevo hasta Sodupe. En este sector, el del macizo de la Arboleda/Triano pasamos los primeros momentos de apuro. Hasta llegar al Pico Ventana tuvimos dos sustos debido a la niebla… para ser honestos creo que no llegamos a llegar, pero Txema me hizo desistir de hacer una misión suicida (nunca mejor dicho) y arriesgarnos a perdernos. Creo que pasamos pero no vi el buzón.
Una vez dejamos este traspiés seguimos corriendo a buen ritmo dejando cumbres como quien no quiere la cosa… mención aparte merece la subida al Ganerantz, expuestos al viento y a la lluvia… Una vez estuvo superado éste, solo nos quedaba el Gasteran y el Pico de la Cruz… la niebla hacía que no lo viésemos por ningún lado.. tensión… nos habremos perdido?… un ráfaga de viento y ahí estaba… Menos mal.
Recuperamos un poco el aliento y nos diriguimos hacia la zona del Enkarterri… la niebla nos vuelve a jugar otra broma y por error confundo el Aldapaz con el Eretza… bueno otro más de regalo… hemos perdido la cuenta… pero 12 o así habremos pasado… Deshacemos nuestros pasos y llegamos al Eretza… este se me hace duro ya que es imposible subir corriendo la última parte y la niebla a esas alturas es fría y húmeda. Tocar el buzón, unas nueces y corriendo para Sodupe. Segundo sector hecho, me encuentro muy bien… soy feliz.
En Sodupe me cambio de ropa, algo seco, se que este tramo que me queda es con mucho el más duro. Sabía que con niebla lo era aún más, así que mentalizado para sufrir. Allí cojo a mis dos últimas liebres que tiraron de mí en los tramos más complicados, Asier y Gustavo… si no es por ellos igual estoy corriendo por el Ganeko todavía.
En este punto de la historia podemos extendernos infinitamente o ser algo más escuetos… lo vivido en este sector da para muchos posts… Vamos a resumirlo. Se subían el Gallarraga y el Ganeko, dos de los montes más altos de Bizkaia y los más altos de la zona. Ambos tiene cierta dificultad técnica… La niebla se nos cerró y apenas veíamos a más de 3m… subimos el Gallarraga suave para no asumir más riesgos de los necesarios y nos dirigimos a lo que para mí era y es la sección más dura… unir Gallaraga y Ganeko. Hay varias opciones, cuanto más alto cojas el camino mas complicado y menos tienes que ascender luego… digamos que vas casi recto… Visto el día nos decantamos por la opción más segura ir por la más baja y subir el Ganeko entero…
Esta parte fue un infierno… no veíamos el buzón y no dejábamos de subir… una loma… otra subida… un poste… Okondo… pero donde estamos… los silencios entre los tres se empiezan a hacer largos… hay nervios… al fin vemos la mesa que nos indica que estamos en el Ganeko… en 2min vemos la pista y a correr… en ese momento me mete un latigazo la espalda que me deja seco… no se si es el frío, la tensión, las vibraciones de todo el día… me recupero y cuesta abajo (que también cansa) hasta el Pagasarri.
Ahí nos esperaban mi primo Mikel y mi hermano que subió a darme una sorpresa… todos a lo verano azul y más contentos que Falete en un buffet libre bajamos para Bilbao… a medio camino una voz: Iker! era Ander que se nos une y nos acompaña! Gracias a todos.
Entramos en Bilbao que parecemos los jinetes de la apocalipsis, barro, sudor… nos da igual somo vencedores.
Según nos vamos acercando se ve el ayuntamiento… me emociono al ver tanta gente, no me lo esparaba y no creo que me lo merezca. En ese momento se junta muchas sensaciones, dolor, alegría, emoción, agradecimiento…
Ya está Iker, hemos terminado… no hace falta correr más. Un sueño hecho realidad, hacer lo que más te gusta con quien quieres… eso es la felicidad.
Creo que es el momento de dar las gracias. En especial a mi padre, que si no es por el esto no hubiera sido posible y no me refiero a la parte logística que eso se ve en las fotos, moviendo a la gente llevando los avituallamientos… me refiero a que si el no me hubiera enseñado a superarme a creer en mi mismo y a tratar de ser mejor cada día este no lo hubiera hecho. A Lucía que siempre ha confiado en mí aunque cada día le digo cosas más raras, y nunca duda de que lo pueda hacer, es más me facilita tanto las cosas que hubiera sido imposible llegar hasta aquí sin ella. A todos los familiares que se acercaron hasta allí, especialmente mi madre y mi hermano que me dijeron cosas muy bonitas. A todos los amigos y compañeros del Deia que dejaron de hacer sus cosas por ir a verme, muchas gracias. A los compis de Onda Vasca, en especial a Begoña que se entregó la causa. A las liebres; Txema, Gustavo, Mikel, Jon, Ander y Asier que me ayudaron a Luisma que no pudo venir por ser padre. Y también a mi sobri Iker-txu por si en algún momento le sirve para superarse, que nació justo para verme llegar.
Y también porque no, hay que ser sincero, a las empresas que han confiando en mí para ayudarme con el material: A Trirunners por la ropa de la prueba, a Victory Endurance por los avituallamientos, a Bioiberica (Artroactive, Tendoactive e Hialosorb) por ayudarme con las lesiones y con los regalos para las liebres, a Multióptica Élias por regalarme unas gafas, a Reinventa tus limites por llevame los entrenamientos, Compressport por las medias de competición y a los chic@ de Jean Luis David Artea… Gracias!!
Bueno pues eso es todo… si alguien tiene un sueño que no deje de intentarlo.
Pues eso es todo, habrá retos más duros, más largos, las lluviosos, más calurosos…pero este ha sido el mío.
Más fotos en la Facebook de Correr no es de Cobardes.
Noticia en el Deia:
[Enlace roto.]
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SORTEO SUUNTO AMBIT:
Como sabéis me comprometí a probar el suunto ambit. Durante los entrenos previos a este reto lo hice, en breve os haré un análisis mucho más en detalle. Pero como se va a sortear uno entre todos los blogs que lo testaron, ustedes no deben ser menos. Así que todos los que dejen un comentario con nombre y apellidos entraran en un sorteo del susodicho reloj.
Impresiones:
El Ambir destaca por la facilidad de uso, si que es cierto que la mayoría de los parámetros se configuran a través del PC, pero una vez lo tienes configurado es muy sencillo e intuitivo. La precisión y captación de señal GPS no tiene comparación con cualquier otro. He probado los garmin 305, 205 y 310 y no tiene color. Destaca que se puede usar como reloj de pulsera algo de lo que carecen sus competidores.
Para mi es un reloj de montaña, se puede usar para triatlón o para natación o simplemente correr por asfalto pero no sacaríamos todo el jugo a esta máquina, brújula, barómetro, desnivel….Te da unas prestaciones acordes a su precio, por lo que si no vas a utilizarlas yo me dacantaría por el T6 de suunto. Ahora bien si lo tuyo es la montaña, el Ambit está diseñado para ti.
Suerte a los dejéis comentarios.