El horno global

Según la OMM, julio fue el mes más caluroso desde 1880

Lo llaman Tierra, otros Mar, los entendidos Gaia, algunos Ama Lur,  pero este verano Horno Global va pintiparado.

Aunque por estos lares no lo parezca tanto porque a veces el dios lorenzo disimula un poco y se entretiene jugueteando entre las nubes, la Organización Meteorológica Mundial (OMM) confirma que el recién finado julio ha sido el más caluroso en la historia de la Tierra desde que existen registros fiables, digamos que desde 1880, aunque son bastantes los expertos que sostienen que este aumento quizá sea el más elevado desde hace 120 mil años.  A pesar de negacionistas recalcitrantes, parece evidente que el incremente de 1,5ºC por encima de los niveles preindustriales se debe primordialmente a la combustión de carbón, petróleo, gas y a otras actividades humanas ligadas a su uso.

El viernes pasado, después de calentarnos la oreja y encendernos la preocupación con esta noticia, todos los medios la hilvanaban con los buenísimos datos del movimiento turístico especialmente aéreo, pero también por carretera y hasta por mar, casi como en un intento compensatorio de estímulos informativos. El aeropuerto de Loiu firma el mejor mes de su historia y avanza hacia un verano de récord” repetían sudando de admiración tras citar los 45 Celsius en Sevilla y Córdoba.

Si en todo momento del día están volando simultáneamente sobre la Tierra una media de entre 10.000 y 20.000 aviones comerciales que transportan entre 1,5 y dos millones de pasajeros y que cada uno de estos trastos voladores consume unos 4 litros de queroseno por segundo, hagan un cálculo estimado del combustible que se utiliza y estimen las toneladas de gases de efecto invernadero que se producen.

Me imagino a miles de usuarios con el abanico en la mano sudando la gota gorda en la cola de espera para embarcar, pero dudo que haya quien se haya planteado cancelar su vuelo por motivo del motivo principal del tórrido bochorno que soportan. En realidad, he de confesar que yo también me subiré a uno de esos artefactos productores de CO2 dentro de unas semanas y ni pensar en cancelar mi vuelo generador de canícula. ¡Faltaría más!

De hecho, es posible que muchos ya se estén apuntando a la lista para navegar por el polo norte en crucero en el verano de 2027, ¿o será antes? En la lógica humana, al parecer este anhelo no es incompatible con quejarse del horroroso calor que soportamos in crescendo cada verano en este horno global.

nekanelauzi25@hotmail.com @nekanelauzirika

Fútbol, copa, rey y España

No sabría muy bien si el orden en el que dispongo las piezas del título es el más apropiado para dar con precisión en la diana de la primacía real de estos cuatro fenómenos; porque si ya por separado cada término da para una colección completa de dislates, la amalgama de la tétrada en variaciones con repetición podría llevarnos al paradigma de las contradicciones. Pónganlos ustedes en el orden que prefieran.

No, yo no vi el Madrí-Osasuna ni en Sevilla ni en la tele, pero me coincidió el partido de fútbol de la final de copa del rey de España en la capital del Reyno, es decir, en mi querida Pamplona/Iruña, y he de decir que no había un rincón de la ciudad que no recordara que para los pamplonicas/navarrostodos era un gran acontecimiento; es la lógica alegría de la cenicienta al verse reconocida en palacio. No me imagino, ni por asomo, tamaña ilusión en los prepotentes capitalinos del reino, en esta ocasión de España. Por cierto, ya nos gustaría ver celebrar otras actividades y eventos multitudinarios como lo ha hecho la afición futbolera de Osasuna: hinchas con sentimiento, orden, entrega, respeto, orgullo, alegría, fiesta, pasión … todo en perfecta armonía para el disfrute colectivo. ¡Chapeau! Hasta con pelín de sana envidia bilbaína, aunque solo sea hasta el año que viene.

Leo que le pitaron al rey y como republicana de corazón, condición y hechos me congratula saber de esa pitada al monarca de una corona no refrendada y heredera directa del franquismo. Incluso con la música-tapadera a todo trapo y el micro de la tv apagado por orden gubernativa, espero que se escuchara la pitada desde Irún hasta Algeciras.

Ya no la llaman copa de España, sino del rey. Me imagino que sería incongruente tildar “de España” a una competición donde sólo una minoría de los futbolistas participantes son súbditos españoles. Porque más allá de que a mí el fútbol me guste entre cero y nada, la mayoría de esos futbolistas son profesionales al servicio de una empresa que les paga y punto. Es decir, que el borbón y la borbona fueron a presidir un encuentro de empresas representadas mayoritariamente por extranjeros escandalosamente remunerados, nada de España ni patria ni bandera rojigualda ni mandacarajos por el estilo, digámoslo en prosa. En apoyo a mis palabras me soplan que mientras Osasuna tiene 3 extranjeros, el Real Madrid, máximo representante del fútbol patrio-patriotero, tiene 18 no españoles y que el 7 de enero en un partido no sé contra quién, no había ningún españolito en su equipo. Serán cosas de la globalización y de la pasta gansa que mueve el espectáculo.

Comprenderán que no haya ido a Sevilla ni visto el partido. No tengo la dicha existencial de ser pamplonica; ni he practicado ni me ha gustado nunca el fútbol como deporte y menos aún como espectáculo empresarial; no soy monárquica; mi españolidad y españolismo dejan mucho que desear y no comprendo porque me recriminan cuando juega ese equipo de Madrid y yo no le apoyo siendo tan español. En fin, que la tarde en Pamplona fue preciosa contemplando como todos los comercios lucían en rojo su apoyo al equipo de la salud. Y leído en un comercio de Iruña: “el caer no resta mérito alguno a la gloria de haber subido», buena reflexión de Calderón de la Barca que dedico a Osasuna.

No se conturben, no escribo esto por inquina bilbaína tras ser eliminados, porque al fin y al cabo el curso futbolero del año que viene llevará al Athletic a su enésima final y no tendré que hacer ex novo este comentario, sino que podré reproducir casi ad pedem litterae esta misma columna.

@nekanelauzirika

Gran tenedor

Los bancos y fondos de inversión en comandita gestionan más de 240000 viviendas

Alguno podría llegar a pensar y a coligar que este título está relacionado con restaurantes de alto copete, porque, de hecho, en muchos países en lugar de estrellas tienen tenedores para clasificar a sus restaurantes y los de lujo muestran orgullosos sus cinco tenedores, como aquí sus tres estrellas Michelín. Pero no va de comandas ni comensalías, porque el término “grandes tenedores” que ahora boga en primera informativa me dicen que se refiere a propietarios de pisos, a dueños de muchos inmuebles. Ya pueden comprobar que no me codeo mucho con potentados tenedores de múltiples viviendas.

Pero sí hablo con personas del común que por motivos diversos han ido incorporando a su patrimonio pisos, casas, garajes y otras propiedades inmobiliarias. Vicente es un “jubileta” feliz que complementa su escuálida pensión de autónomo con el alquiler de dos modestos pisos, uno por herencia de su esposa, en un pequeño municipio; le presento cual feliz jubilado, aunque en realidad debiera decir que era feliz, porque ahora mismo se muestra entre expectante y consternado ante la nueva ley de vivienda. Ley que clasifica a quienes tengan cinco inmuebles como grandes tenedores y les aherroja a los más severos controles administrativos y fiscales. Porque nuestro Vicente también heredó primero la mitad de un caserío y hace poco la otra mitad a medias, pero que a efectos de esta ley le adscribe a la cuenta de los grandes tenedores. Así que Vicente, que va donde va la gente, anda con hormigueo en el cuerpo y casi no le alcanza el cuello a la camisa.

Si por un casual, no tan improbable debido al aumento de la “turistificación y de la gentrificación también en las ciudades vascas, la zona de sus pisos la declaran tensionada y su caserío pasara a estar en zona de interés turístico rural, a mi amigo le van a hacer un siete en su cortito traje económico de jubilado.

Frente a otros modelos de uso de vivienda en Europa, en el Estado español durante décadas nos han inculcado y marcado a fuego de hipoteca bancaria la idea de adquirir la propiedad de la vivienda, de la primera y de la segunda residencia y de las que hiciera falta, para asegurar por medio de este patrimonio el porvenir de la vejez. De modo que, frente a otros países de nuestro entorno, algo más del 77% de la población española disfruta de vivienda habitual en régimen de propiedad, cuatro puntos menos que en 2014, pero, aun así, son tres de cada cuatro ciudadanos. Casi uno de seis hogares dispone de segunda residencia y solo el 1% de los propietarios tienen más de diez inmuebles.

Pero hete aquí que son los bancos y los fondos de inversión en comandita quienes gestionan más de 240000 viviendas y aquellos han puesto en manos de estos más de 110000 casas y pisos para dedicarlos al alquiler. Son los auténticos grandes tenedores y no mi transido Vicente, el jubilado preocupado. Porque la nueva ley, al rebajar el tratamiento de gran tenedor a quien posea cinco inmuebles, apenas araña a los grandes buitres (sanguijuelas dirían mi ama) inmobiliarios, pero clava su daga a fondo en los muchos vicentes que creyeron que aumentando como hormigas su patrimonio estaban ahorrando. Ojalá me equivoque, pero a poco que a su ayuntamiento le pique ahora el ardor recaudatorio, podrían declarar sus pisos de zona tensionada y dejarle con sus alquileres a culo pajarero.

De pequeña ya me decían que aprendiera de los cucos, que son listos y ocupan prestados los nidos ajenos. Lo dicho, leyes nuevas para vicios viejos.

@nekanelauzirika

El lujo luce músculo exclusivo

Bolsos se lujo para quien tenga músculo financiero suficiente.

Hace algunos años había un tal primo de Zumosol que lo arreglaba todo. Ahora, si fueras primo más o menos cercano de Louis Vuitton, también lo arreglarías todo, porque está en el top de ganancias empresariales.

No sé si a fulano, mengano o zutano, o quizá a usted, le gustan los postres hechos con partículas de oro o llevar perlas auténticas en los zapatos o incrustaciones de diamantes de verdad en sus diademas o si usa marcapáginas de plata, o si para ir de Durango a Donostia usaría helicóptero o si su bolso de mano cuesta 300.000 euros.

Pueden sumar cuantas lujosas locuras de este estilo se le ocurran, pero, aunque les parezcan extravagantes son reales y cada vez más presentes, no solo en el hit parade social de Londres, París, Nueva York, Boston, sino también en Pekín, Moscú, Tokio, Dubai e incluso en Bujumbura, que es donde más limusinas de lujo juntas he visto en mi vida. 

Enfrente de esa lujuria de lujo, la falta de cereal, los sueldos misérrimos, la explotación de niños/niñas en muchos países, la compraventa de personas, la trata de blancas, los millones de humanos que viven con menos de tres dólares al día… 

Yo no diría que este segundo aspecto sea el revés de la moneda, sino más bien el canto de la jodida moneda de la ambición humana.

Durante el último mes nos han ido cayendo como noticias escalonadas los beneficios escandalosos, insultantes en muchos casos, de empresas tecnológicas, de comunicación, de bancos, eléctricas, gasísticas y, posiblemente como consecuencia de la guerra y de la sequía, los pingües beneficios de empresas de grandes multinacionales de alimentación y, por supuesto, de fabricantes y vendedores de armas.

Pero no, aunque lo pudiera parecer, no son ninguno de estos grandes emporios empresariales los que figuran en la cúspide del ranking de ventas y beneficios estratosféricos.

Sí, como habrán visto, leído y oído, sabrán que son las empresas dedicadas al lujo las que están obteniendo en todo el mundo beneficios no ya escandalosos, sino insultantemente escandalosos, incluso comparado con esas otras empresas que ya ganan mucho más que mucho.

Dando vueltas a la pregunta de  cómo puede ser tan lucrativo el lujo habiendo tantos y tantos pobres declarados, se me ocurre pensar que quizá sea debido a que los traficantes de armas, los banqueros, los intermediarios de alimentos, los que explotan a niños y niñas, y quienes controlan nuestras comunicaciones y  nuestra tecnología, gastan/derrochan sus astronómicos beneficios, obtenidos de aquel modo con mucha mano en B, en lujos tan imprescindibles” como un Ferrari chapado en oro de precio indecente o un bolso de piel de leopardo con incrustaciones de diamantes y otras piedras preciosas por un módico precio de cien mil euros.

Con razón Vuitton está en el top de los beneficios empresariales. 

Y nosotros no somos los primos de Louis Vuitton.

@nekanelauzirika

El dios de la lluvia ya no llora en abril

Cueva de los Goros. Caminando sequías. Nunca había visto seca la entrada de esta cueva en abril

Ya sé que en la Feria de Abril estarán muy contentos con este dios.

El 22 de abril Día de la Tierra. Aunque seguramente me repita y no diga nada que otros/as muchos no hayan ya comentado en sus análisis y artículos, es difícil pasar de puntillas por encima de este día recordatorio de que no hay planeta B, que la Tierra es la única casa que tenemos y que esquilmarla es tirar piedras en nuestro propio tejado.

Y lo digo hoy, aunque me gustaría hacerlo también el próximo sábado y el 11 de agosto y el 23 de noviembre… y todos los días del año, porque mantener la casa en orden y equilibrio sostenible debiera ser una tarea cotidiana.

Pero recuerdo haber sobrevolado en helicóptero hace algún tiempo Madrid y sus alrededores, quedándome atónita al ver miles y miles de piscinas privadas, mientras a no muchos kilómetros de allí tenían restricciones para el consumo humano y del ganado.

Hoy veo los embalses en sus cotas más bajas en un mes de abril, que parece que se olvidó del refrán «… aguas mil». Pero no observo muchos movimientos para racionalizar el consumo en hogares, industrias y explotaciones ganaderas. Y tampoco aprecio que se incentiven muchos planes para ordenar nuestra disponibilidad de agua a la larga. ´Se imaginan que no pudiéramos comer este año patatas del país porque la sequedad de la tierra impidiera su siembra. Ni pimientos, ni tomates, ni alubias…

Pero mientras tanto, visto desde este Norte del Sur Europeo, algunos otros parecen contentes, porque con la subida de las temperaturas y escasez del agua en el Sur del Sur, un flujo importante de turismo basculará hacia este Norte del Sur todavía relativamente verde; como si el avance inmisericorde de la falta de agua y ascenso de temperaturas no fuera con nosotros, ahora mismo y más dentro de unos años.

En la España peninsular hay cuatro desalinizadoras, mientras que en Israel, con un territorio como Extremadura, tienen 60 en funcionamiento. Aquí, los grandes embalses están exangües en pleno abril. Y cuando lleguen los rigores del calor estival, la evaporación se llevará hasta el barrizal, pero aquí a casi ninguna administración se le ha ocurrido fabricar masivamente aljibes cerrados para evitar estas pérdidas por evaporación. Hay muchos más ejemplos técnicos.

Lo malo es que frente a soluciones tecnológicas racionales y factibles, pronto tendremos propuestas de procesiones y rogativas a vírgenes y santos más o menos meones, y cuando vuelva algo de agua nos olvidaremos de los lamentos, también de las rogativas, y, por supuesto, de las soluciones hidráulicas factibles.

Y volveremos a chapotear sin guardar memoria de que el Dios de la lluvia cada año llora menos en abril. Y podríamos terminar caminando sequías como las que ahora yerman los suelos de Sud´án.

@nekanelauzirika