Domingo 29 de diciembre de 2024
Escribo esta reseña sacudido por la tristeza que creo nos produce a todos el fallecimiento de Begoña, la esposa del Lehendakari Ibarretxe, fiel compañera, magnífica persona y una colaboradora extraordinaria de su marido en su vida institucional y en su vida deportiva. Una pareja perfecta. GB
Josu Bergara cumple hoy 89 años. Le hemos felicitado en un café enfrente de su casa en Deusto. A la entrada el camarero latino le ha llamado por su nombre así como el encargado. De trato directo y llano la gente lo ve cercano, algo que cada vez es más difícil de ver en los políticos actuales. Recibía continuamente llamadas. Ninguna institucional, de momento. Los departamentos de Relaciones Públicas del Gobierno, Diputación son poco profesionales. Creen que su trabajo es organizar actos públicos o con personalidades desconociendo que el engranaje de una sociedad funciona con el aceite del respeto y las relaciones humanas. Nos decía que ayer un señor le paraba y le enumeraba las cosas que había hecho como político institucional. Y lo agradecía.
Le acaban de operar de cataratas y se va reponiendo. Quien fuera, Juntero, Parlamentario, Secretario del EBB, Consejero, Diputado General celebra su onomástica con buena salud, mente despejada y siguiendo atento la actualidad. Pasea, lee, oye música, va a los conciertos, es un gran melómano y el órgano del Euskalduna está ahí por decisión suya, y a veces se indigna por lo que ve pero su habitual discreción traga algunas insensibilidades o faltas de respuesta. Trabajó en la empresa privada en Santander, Gasteiz y Bilbao entre 1964 y 1977 donde ocupó puestos relevantes. Casado con Rosa M. Ede, tiene tres hijos, Carlos, Josu y Mikel y una hermana, Mariemi que vive en Gasteiz.
Su ama procedía del caserío Ugarteko que estaba donde se encuentra en la actualidad el campo de fútbol de los Salesianos. Juan Mari Atutxa bautizó la Comisaría Central de la Ertzaintza con ese nombre a sugerencia de Bergara. Ese es el motivo del nombre de Ugarteko. Josu le regaló un cuadro del caserío que sigue en el hall, aunque le falta identificación. Se ha pedido pero nunca se ha hecho caso..
Josu Bergara nació en Deusto en 1935. Su aita fue un gudari herido en la guerra. Iban en un coche conducido por él cuando un avión les ametralló. De los cinco se salvaron Teodoro Aguirre, hermano del Lehendakari y él, al que le lesionaron el codo. Tres murieron. En el hospital de Getxo les atendieron muy bien. No quería quitarse las botas pues llevaba quince días con ellas puestas. Al final les dieron un puro. Nos contaba lo del puro diciendo que seguramente era porque estaba con el hermano del Lehendakari. Estuvo en el batallón Larrazabal, con mi aita, aunque los jóvenes del batzoki de Deusto iban a la compañía Arbola Gaña del batallón Arana Goiri. Tras la guerra lo castigaron en un Batallón de Trabajadores y, como entendía de mecánica, trabajó en el Parque Móvil.
Con semejante historial la compañía Braso lo mandó como viajante a Valencia donde su hijo Josu, con cuatro años, dio sus primeros pasos escolares y con 9 vivieron en Sevilla. Volvió y como es cabeza cuadrada estudió ingeniería doctorándose. Ajuriaguerra dejaba solo a los ingenieros que le tutearan. Fue el primer presidente, tras la clandestinidad, de la Organización Municipal de Deusto, y elegido burukide del BBB en febrero de 1977. Trabajó con Ajuriaguerra en la ponencia de organización de la salida del PNV de la clandestinidad. Coincidí con él en el primer BBB presidido por Ajuriaguerra y fuimos miembros del primer Consejo de Administración de EITB, dato que hoy no sirve para nada. El adanismo imperante se lo come todo mientras se rompe la vieja y sana costumbre del respeto a los viejos de la tribu. Como miembro de las primeras Juntas Generales de Bizkaia en 1979 fue portavoz del Grupo EAJ-PNV. Estoy seguro que el actual portavoz no tiene ni idea de este dato.
En 1980 fue elegido parlamentario por Bizkaia del primer Parlamento Vasco y elegido coordinador del Grupo EAJ-PNV. Le llamábamos “el sargento Bergara” y yo iba con él y con varios al Parlamento en su Seat 127 al que llamábamos “la Bergaresa”. Tras la división del PNV en 1986 fue elegido secretario del EBB. Él con Carmelo Sáenz de la Maza y Rafael Suso, bajo la dirección de Xabier Arzalluz, adecuaron el partido a los nuevos tiempos y organizan la Asamblea de Zestoa y la del Arriaga que inició la recuperación electoral del PNV tras aquel trauma de la división y es lo que actualmente sigue funcionando como estructura. Creo que Xabier Barandiaran con su planteamiento de escucha activa debería en primer lugar haberle escuchado a él. No lo hizo y así nos ha ido.
De la secretaria del EBB, Josu Bergara pasó en 1991 al Gobierno del Lehendakari Ardanza como Consejero de Transportes y Obras Públicas. El Metro de Bilbao, Puertos, la transferencia de Aguas, carreteras, el Bec, el Palacio Euskalduna, el Guggenheim con Ortuondo, EITB en su actual ubicación en relación con Andoni Ortuzar, saneamiento de la Ría de Bilbao, Zabalgarbi y diversas infraestructuras tienen su huella. Elegido Diputado General de Bizkaia presidió la Diputación dos períodos entre 1995 y 2003.
Con semejante caudal de experiencias siempre me dice que no escribirá sus memorias, ni sus reflexiones con lo que nos perderemos una parte importante de la historia de estos cuarenta años. Seguramente porque nadie se lo ha pedido. Este nuevo año 2025, en el que se anuncia un trabajo de relanzamiento del PNV en su 130 aniversario, creo que se debería crear una especie de Foro de la Experiencia, movido por gente joven, para que todo este caudal de vivencias no se pierda. Si decimos que la cadena no se rompe, este eslabón está por contar antes de que los de Sortu nos ilustren como se ha hecho y se debe hacer la política en este país.
Ese ha sido y sigue siendo, Josu Bergara, un afiliado, un militante jelkide del EAJ-PNV. Una buena persona. Un servidor público.