Domingo 20 de julio, temperatura 23º despejado.
A las 7:00 am, nos dirigimos a por nuestro coche para iniciar nuestra ansiada aventura.
Llegamos 10 minutos antes de la hora prevista y formalizamos todo el papeleo de los seguros eligiendo el paquete más completo: ante todo tranquilidad.
… Y fue ésta una idea muy acertada pues a las 8:17 minutos salíamos con nuestro NISSAN SENTRA y a las 8:18 ya rellenábamos nuestro primer parte de siniestro y de la misma nos realizaban un cambio de coche, éste de color blanco precioso.
Sólo comentaré que la salida no estaba nada clara y salir, salimos (valga la redundancia), pero, … ¿por donde? …pues curiosamente por donde entran estos americanos.
Resumiendo: había unos pinchos en el suelo de los que ponen en las películas para detener por la interestatal a Godzilla y … sí, notamos que el coche tenía reticencias de proseguir, pero para algo está el acelerador, pues lo dicho, aceleramos y sólo reducimos la marcha cuando vimos que todo el personal salía a despedirnos, cosa que tampoco nos sorprendió porque son muy simpáticos, pero bueno al final todos contentos porque las ruedas (fue un milagro), no reventaron.
¿Alquien piensa a estas alturas que el ánimo decayó? …, pues para nada, imparables, en 20 minutos ya estábamos saliendo y sí, todos fuera, despidiéndose o rezando que de todo había.
Entrañables las caritas, …que bien se lo tomaron, aún cuando se nos pasa la risa, nos emocionamos.
GPS orientado a la señal de partida, música especial para el evento (no podía faltar Fito con sus Fitipaldis) y en su búsqueda entramos motorizadas a Chicago.
Llegamos: foto de la señal, música a tope y a la aventura, sin olvidar a Victor Muntané Pavillard, conocedor de esta ruta y que ha editado el libro «Mi sueño y pasión» que llevamos cómo una biblia bajo el brazo.
Arrancamos: 1er día.
Visitamos : WILLOWBROOK, donde desayunamos en el Dell Rhea´s Chicken Basket, un establecimiento que desde 1992 ha sido elegido por la ROUTE 66 HALL of FAME, como el lugar donde puedes degustar el mejor pollo de la zona de Chicago.
Estaba delicioso, el servicio muy agradable y el lugar merece la pena. Este restaurante se abrió 1930 y enseguida recogieron una merecida fama por las cestas que preparaban de pollo, según una receta de unas campesinas de la zona.
JOLIET, Visitamos el Rialto Theatre, un edificio precioso, el hall que pudimos llegar a ver impresionante.
Estaba esa mañana reservado para la entrega de graduaciones del Ramussen College, que no supimos muy bien cual era la especialidad, pero tras ver la fila de graduadas/os supimos de la misma que no habían cursado estudios de nutrición.
Santo Dios! como tienen que ser los pupitres en ese College …., seguido nos fuimos a ver la prisión de Joliet, ya cerrada desde hace años y que en la película The Blues Brothers (Granujas a todo ritmo) de John Landis aparece.
Además esta ciudad nos ofrece el primer centro de visitantes de la Route 66, un sitio muy divertido, con muchos personajes, fotos, historia de la ciudad, sus personajes famosos, … pasamos un buen rato de aquí para allá como trasportadas a otra época.
Y por fin nos íbamos a encontrar con el primer gigante de la ruta «Silver Cross» y resulta que el dueño ha cerrado el negocio y se lo ha llevado.
Menudo chasco!, … pero más tarde estuvimos a los pies de GEMINI GIANT y nos hicimos unas fotos para el recuerdo.
Seguimos y realizamos una parada en el HELLY´S, un lugar donde se puede tomar un refresco, comerse una buena bandeja de un menú interminable o apuntarse a los marines. Muy completo el lugar.
Luego una visita en BRAIWOOD, al restaurante POLK-A-DOT DRIVE IN acompañadas de Marilyn, Elvis, James Dean que estaba fuera porque en el local no dejan fumar y los ruidosos Blues Brothers (lógico, lo típico por estos lares).
Resumiendo: 203 millas, llegamos al motel y cenita sana. Pijama y a coger fuerzas que mañana volvemos a la carretera.
SEGUIMOS EN CONTACTO. Nos vemos de camino a Pontiac.