Nos ponemos de fiesta entre fogones porque hoy tenemos una receta que llega con ADN del Botxo y aunque es verdad que hay varias versiones sobre los motivos de su nacimiento, la opinión es unánime tras disfrutar del primer bocado: impresionante.
Si os gusta el bacalao estáis de suerte, es un pescado que cuenta con recetas infinitas para deleitarse y aquí os dejo otro estilo para que lo podáis incorporar a vuestro recetario.
Imprescindible para iniciar la elaboración atarse el delantal. Empezamos.
INGREDIENTES (para 2 personas): 4 trozos de bacalao desalado, 2 cebollas blancas, 1 pimiento rojo, 1 pimiento verde, 2 dientes de ajo, 1 guindilla, 1 ramito de perejil, 1 cucharada de pulpa de pimiento choricero, aceite de oliva virgen extra y sal (con prudencia, dependiendo siempre del salado del bacalao).
ELABORACION:
Preparamos la verdura
Picamos la cebolla, los pimientos, el perejil y 1 ajo.
Calentamos una sartén y echamos un chorrete de aceite.
A fuego medio alto incorporamos primero la cebolla, rehogamos y añadimos los pimientos.
Mezclamos bien, añadimos con mucho tiento la sal (hay que tener en cuenta que el bacalao al cocinarlo le sube mucho la sal) y cuando empiece a estar blandito echamos el perejil y el ajo picado.
A fuego bajo dejamos que se vaya sofriendo poco a poco, unos 15 minutos.
Sacamos y escurrimos el aceite.
Añadimos a la fritada la pulpa del pimiento choricero y mezclamos durante unos 2 minutos.
Reservamos.
Preparamos el pil pil:
En una sartén a fuego medio alto incorporamos el aceite de la fritada.
Salteamos el ajo fileteado y reservamos.
Seguido colocamos el bacalao primero por arriba y movemos la sartén en círculos sin parar.
Cuando notemos que la salsa empiece a ligar, damos la vuelta al pescado por la cara de la piel y no paramos de mover hasta que la salsa esté completamente emulsionada.
Emplatamos:
Echamos en el plato la salsa, la fritada y encima el bacalao.
Espolvoreamos por encima la guindilla picada y el ajo laminado.
A comer! … espero que os guste.












INGREDIENTES: 300 g hongos, 2 cebolletas, 1 diente de ajo, pimienta, sal, aceite de oliva y 125 g de nata o leche elaborada, 12 kokotxas de bacalao, harina, sal y aceite de oliva.













Una vez reunida con el bacalao que se presta esta semana para protagonizar nuestra ansiada tosta y de la mano de un pan bajo el brazo, un pimiento italiano que desde que se ha colado en mi bolsa en la verdulería fiel a su estilo provocador sólo hace más que silbarme (que distinto con los morrones, que aún siendo de la misma familia siempre te los encuentras enfadados), … bueno pues a lo que iba, se avecina tosta y con ello lógicamente ya el ánimo lo tenemos planeando y empezamos por marinar a este pez que aunque esté «desalao» aún sigue haciéndome reír.





