Cuando desde el Aeropuerto de Abu Dhabi te diriges hacia la ciudad tienes la sensación de que en cualquier momento alguien te va a hacer entrega de unas tijeras y delante de un gran lazo vas a tener que realizar dos cortes, entregar el trozo de cinta a la autoridad competente y recoger el consabido ramo de flores entre una salva de aplausos y flashes que inmortalizan el momento en el que acabas de dar por inaugurada la ciudad.
Una vez en el centro, nos acercamos a La Corniche, desde donde se disfruta de unas vistas sensacionales de la ciudad. A un lado del paseo, el mar de un intenso color azul y al otro, una sucesión de edificios de formas imposibles en cristal y acero, que reverberan el sol implacable del mediodía.
Porque sí, …era el mediodía y tras 90 minutos de recorrer el paseo y empezar a notar que la suela de las playeras se estaban mimetizando con las plantas de los pies y que allí no es usual toparse con una terracita para tomarse algo, abandonamos las palmeras del paseo y paramos un tanto desesperadas un taxi con destino al Emirates Palace Hotel.
Este hotel cuenta con siete estrellas y se habla de que es el más caro del mundo, de hecho es entrar al vestíbulo principal y ver la cúpula y (… aunque llegamos con la sesera hecha trizas por el calor) notas que aquello huele a caro de carísimo, así que con esa gracia que nos caracteriza, nos dimos un garbeo por las ¨zonas comunes¨ que nos sentó estupendamente. Una vez retomamos una temperatura razonable en nuestra masa gris, sentadas como maharanís nos tomamos un merecido refrigerio que consistió en un café (con regalito de bombones) y un surtido de sandwiches que nos supieron divinos.
Ya se nos había echado la noche cuando visitamos la Mezquita Sheikh Zayed y desde luego que mereció la pena. Noche estrellada y la mezquita, maravillosamente iluminada. Disfrutamos de los altísimos minaretes y sus innumerables bóvedas, el conjunto cuenta con más de 1000 columnas en el exterior, rodeando un patio amplísimo y abierto, todas ellas decoradas, como los suelos con motivos incrustados en piedras semipreciosas. La sala principal tiene 10 lámparas impresionantes realizadas por Swaroski y la alfombra que la cubre pesa 47 toneladas y si! … también es la más grande del mundo.
La Mezquita es una verdadera maravilla.
… La verdad es que en Abu Dhabi nos lo pasamos muy bien, tras la locura del paseo (a estas alturas no nos ponemos aún de acuerdo a quien se le ocurrió), con una temperatura de 50° y otras anécdotas … que quedan en nuestra memoria, Eguzkilore saltó de nuestro bolsillo y se encaramó a la mesa para ser fotografiada con objeto de dejar sentado que este día merecía un papel en nuestro rincón con encanto. Y aquí está.
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