Cada 7 horas: violación tras violación

Hoy en Zorrotza, un intento de asesinato por #ViolenciaMachista a una mujer de 18 años. Zarautz, dos denuncias por violación. Iruña, cinco denuncias por “sobeteo”. Eibar, una denuncia por agresión sexual esta madrugada. Un suma y sigue de mujeres que son vejadas, violadas, agredidas y asesinadas que no tiene fin. Una lista de la vergüenza que alcanza ya la cifra de 38 mujeres asesinadas y seis menores en el estado español.

Y una entra en el verano con el auge de las fiestas a tope, con el miedo en el cuerpo de mirar las noticias en cualquier momento del día y encontrarse con una maldita y cruel nueva noticia al respecto. Pero no se crean, no todos los medios contribuyen a su condena y escarnio. El primer día de Sanfermines en las dos ediciones del Teleberri de nuestra televisión pública vasca, estuvieron casi 10 minutos hablando de los heridos en el encierro y ni palabra de las agresiones machistas que ya habían empezado a producirse. Las mujeres tenemos que ser asesinadas o violadas para tener derecho a un titular.

Esta escalada de violencia contra las mujeres no tiene fin. Sobre todo, teniendo en cuenta que nos enteramos de una mínima parte de la realidad ya que sólo sabemos de las que son denunciadas. Una #CuestióndeEstado a todas luces que todo el mundo rechaza pero que a la hora de la verdad poco se hace por atajar y erradicar de una vez por todas a esta lacra que está acabando con la vida y dignidad de las mujeres. Que pone fin a sus vidas o que las arruina para siempre.

La responsabilidad política es incuestionable. Hoy ha sido Bilbao, pero sin ir más lejos en Euskadi, 1.333 mujeres denunciaron haber sufrido violencia machista en el primer trimestre de este año, lo que supone un aumento del 8,2 % en comparación con el mismo periodo del año pasado. Sólo en Bilbao las agresiones sexuales entre los meses de enero y febrero duplicaron por mes, las cifras de los mismos meses en 2015 y 2016. Y en Bizkaia, el año pasado 94 mujeres acompañadas de sus hijas e hijos (86 en total), tuvieron que marcharse de sus casas huyendo del maltrato machista.

En el estado español, se produce una violación cada siete horas. Díganme si no es para poner los pelos de punta y tomarse en serio que esto tiene que acabar de una vez por todas, pero no con palabras, no sólo con declaraciones y concentraciones en las puertas de las instituciones. Hay que dedicar recursos, hacer una Ley decente, trabajar la prevención, dejar de victimizar a las mujeres y aumentar las penas a los maltratadores y asesinos.

Miren, si hay un acuerdo en esta materia en el que coinciden las personas expertas, es que cuantos más recursos se dediquen a combatir la violencia machista, menos mujeres sufrirán los efectos de esta lacra. La fórmula, parece clara.

Mientras, estamos asistiendo a un freno unilateral por parte del Partido Popular al trabajo que se está haciendo desde diferentes ámbitos políticos y del movimiento feminista para revisar la Ley Orgánica 1/2004, de 28 de diciembre, de Medidas de Protección Integral contra la Violencia de Género. Y no sólo eso, en el estado español se han firmado unos presupuestos, con el apoyo del PNV, Ciudadanos, Coalición Canaria, y Foro Asturias, , que podríamos llamar “los presupuestos de la Igualdad recortada”: el Instituto de la Mujer y para la Igualdad de Oportunidades mantiene su presupuesto del 2016, que ya había sido cuantiosamente recortado: sólo entre 2011 y 2013 un 47%, y en el presupuesto destinado a prevenir la violencia contra las mujeres hoy se destina la mitad del presupuesto de 2008.

Unos presupuestos, los de este año, en los cuales la lucha contra la violencia machista ha sido parcheada con una tibia subida dando así cuenta de la poca seriedad de un gobierno que maquilla levemente las cifras sin asumir la necesidad de más recursos.

Este partido hoy en el poder con la connivencia de quien no supo oponerse en su momento, no sólo lleva años recortando los presupuestos en Igualdad entre mujeres y hombres, sino que además, no hace otra cosa que poner zancadillas en  este tema. Por ejemplo, con fecha 26 de Julio de 2013, fue aprobado por el Consejo de Ministros en plena mayoría absoluta del PP, el proyecto de Ley de reforma local: Ley de Racionalización y Sostenibilidad de la Administración Local. Entre otros aspectos, y por señalar aquellos que tienen que ver con lo que nos ocupa, dicho proyecto suponía la eliminación de las competencias municipales de servicios sociales, educación, sanidad y vivienda, lo que supondría un recorte y menoscabo en la autonomía que ahora posee el entramado municipal en el desarrollo e implementación de las políticas de igualdad. Desde el Gobierno vasco se criticó dicha ley porque invade el marco competencial vasco y no tiene en cuenta la singularidad del sistema foral de régimen local en Euskadi, derivada de sus derechos históricos. Esta Ley 27/2013 de 30 de diciembre de 2013, entró en vigor al día siguiente.

Como diríamos coloquialmente, los firmantes de estos presupuestos nos “están tomando el pelo” a todas, pero sobre todo a las mujeres que sufren violencia machista.

Es indudable que soy muy crítica con lo que se hace y con lo que queda por hacer a nivel político. Pero sobre todo, rechazo rotundamente esta danza maldita de indiferencia que pone en juego la vida de las mujeres y de sus hijas e hijos y cuya banda sonora es la hipocresía. Todo ello me remueve las tripas y a menudo no me deja respirar. #ErasorikEZerantzunikGabe