Agur Txiki

Sábado 29 de agosto de 2015

Txiki Benegas fue hijo del exilio vasco y de esa Venezuela que acogió en 1939 a cientos de abertzales que huían de un fusilamiento seguro. Su aita había sido seguidor de aquel sacerdote tolosarra Aitzol (José María Ariztimuño) que había fundado la Asociación Vasca Social Cristiana (AVASC) y donde militaba la flor y nata de aquella intelectualidad joven de un abertzalismo puntero en el PNV. Defensor de oradores nacionalistas castigados por las leyes de la República pudo ser el candidato gipuzkoano en las elecciones de febrero de 1936 al Congreso, puesto que ocupó José María Lasarte.

Estas vivencias tan profundas me las resumía Txiki contándome lo que le había impresionado la agonía de su padre cuando éste no hacía más que repetir “Que el barco no llega, que el barco no llega”. Se refería al Galerna, carguero donde subió Aitzol en Bayona y que fue capturado en alta mar en 1936 cuando el jesuita volvía a Bilbao. Prisionero de los sublevados Aitzol murió fusilado ante las tapias del cementerio de Hernani, tras ser torturado en la cárcel de Ondarreta. Y aquel mazazo lo exteriorizaba Benegas-padre en su agonía como aquel ciudadano Kane (Randolph Hearst) repitiendo el nombre de aquel trineo de su infancia Rosebud.

Aquella generación, que había sufrido la expatriación, dejó en sus descendientes una jerarquía de valores que Txiki hizo suya. De ahí que Benegas hijo siempre fuera el gran valedor de la entente política entre el PSE y el PNV.

Mi aita conoció al padre de Benegas cuando estuvieron los dos refugiados en el monasterio benedictino de Belloc en Iparralde. De allí partieron hacia Venezuela cuando fue abierto el Campo de Gurs y tambores de guerra volvían a sonar en Europa. Y mantuvieron una relación personal y familiar hasta que en 1956 la familia Benegas volvió a Donosti.

De aquellos años recuerdo la celebración del cumpleaños de su hermana en Villa San Bernardo en Aldapeta, al lado de La Cumbre. Le habían regalado una caja llena con trucos de magia, pero a Txiki le gustaba uno que nos sometió a consideración. Trajo un ladrillo y pidió a los críos presentes que soplando tiráramos aquel mazacote. Nos quedamos sin aire, pero el ladrillo ni se movió. ”¿Os rendís?” nos preguntó Txiki.” Siiiiiii” contestamos. Y el listo de él puso una bolsa de papel bajo el ladrillo y lo tiró. ¡Eso es trampa!” le dijimos. Pero él se defendía diciendo que soplando había tirado el ladrillo.

Esta vivencia infantil se la he recordado a Txiki un millón de veces cuando trataba de meternos gato por liebre en cualquier negociación que siempre era facilitada por esa relación personal.

La última vez que le vi me contó como en 1974, reunida la oposición al franquismo moribundo en la calle del Segre y estando allí Tierno Galván, Gil Robles, Ruiz Giménez, Felipe González, Peces Barba, Nicolás Redondo, Dionisio Ridruejo y Ajuriaguerra les detuvieron a todos y les llevaron a la Puerta del Sol donde funcionaba la Dirección General de Seguridad y me contaba como a él y a Juan Ajuriaguerra les trataron con especial dureza, cuestión que hizo que la relación con nuestro Juan se acrecentara y facilitara muchas cosas en aquellos inicios democráticos. El artículo reproducido en Deia este miércoles habla bien de esa humana relación y de sus viajes a Bruselas con Juan para negociar acuerdos pesqueros. Y con la boca pequeña comentaba que se habían equivocado apoyando a Rubial a la presidencia de aquel primer ente preautonómico en perjuicio del mejor derecho de un Ajuriaguerra que aceptó deportivamente aquella jugada.

Asimismo solía contar con humor la primera entrevista que tuvieron en La Zarzuela con el Rey en 1978 y de como Ramón Rubial, presidente del Consejo General Vasco a la sazón le dijo a Juan Carlos que él era republicano y que iba a trabajar para derrocarle. Y contaba decenas de anécdotas y vivencias que quedan inéditas pues lo malo de nuestra generación es lo poco que ha escrito sobre la infrahistoria. Mucho sobre la paz y sobre ETA, pero poco sobre lo que ha sido el lubricante de la política que es lo que nos ha llevado a la actual situación, impensable en aquellos años boreales.

Todos los lunes en La SER mantenía una amable tertulia con él moderados por Isabel Cobo y Eva Domaika. Cada uno en su esquina pero tratando que la acritud de posiciones distintas en algunos momentos no desbordara el vaso. Y a él le gustaba ese juego de esgrima donde siempre primaba la necesidad de que las dos grandes familias ideológicas vascas llegaran a acuerdos sustanciales en beneficio de Euzkadi. Esto no quiere decir que no nos enzarzáramos en temas como el GAL, la financiación de partidos o su chavismo inicial, últimamente reconvertido.

Oigo que se le va a hacer un gran homenaje. Lo mereció en vida por los muchos servicios prestados a su partido y al país. Consejo General Vasco, Constitución, Estatuto de Gernika, transferencias y un largo etcétera sin olvidarnos de un Xabier Arzalluz con el que discutía de todo pero manteniendo ese hilo de la amistad respetuosa y de las bromas inteligentes. Corcuera, Araceli, Guerra, Dios, Felipe……El discurso de la Amnistía, lo trituradora que era la política y como no le gustaban las primarias.

Fumaba mucho y ese ha sido el gran puñal que ha acabado con él. Mantuve con Txiki la última tertulia el 30 de marzo y hace un mes le mandé un   whatsapp preguntándole como estaba y si pensaba volver al aire.” Tengo problemas de respiración y en la radio se nota mucho. Pero si, espero volver. Un abrazo” me contestó literalmente hasta que este martes supimos todos de su fallecimiento.

Con Txiki Benegas se va una parte sustancial de la historia vasca de los últimos tiempos, un político vocacional, un socialista posibilista y una persona entrañable. Un buen tío. GB Txiki…..Que la sociedad vasca te siga recordando como lo haremos los que te seguimos apreciando.

Bien por DEIA. A Gurutze se le olvidó el alcalde.

Viernes 28 de agosto de 2015

Jon Castañares enciende el txupi 001

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

Conozco a Gurutze Beitia y me parece un crack. Me comentaba Erkoreka que se le quejó de que no habíamos ido en Madrid a la obra de teatro en la que participaba. Josu le contestó que ya no está en Madrid y se entiende no fuera pero si Gurutze me hubiera avisado habría ido con un buen ramillete de vascos temporeros madrileños.

Gurutze Beitia como pregonera en el balcón del Arriaga al inicio de las fiestas  leyendo su pregón lo hizo de traca. Es lo mejor que he visto y oido, porque actuaba, recitaba, cantaba, interpretaba, fue breve y siempre con esa sonrisa tan expresiva en los labios.

Pero como todo en la vida, le faltó un algo para que el pregón fuera perfecto. Y no me refiero a nombrar a San Nicolás como la Catedral. Me refiero a su omisión a la figura de Jon Castañares, recientemente fallecido, el primer alcalde de la democracia y con quien de verdad empezaron las fiestas y nació Mari Jaia.

Gurutze si aludió a los actores fallecidos Marilú Díaz el pasado 20 de mayo, Aitor Mazo el 7 de mayo, y Alex Angulo el 20 de julio de 2014. Pero de Castañares fallecido el 5 de mayo, ni palabra.

¿Corporativismo?. Pues mal. El mensaje de su pregón era para todos los “Villanos” de la Villa y ahí hay de todo. ¿Por qué ese empeño en silenciar a Castañares, bilbaíno, niño de la guerra, hombre consecuente que tuvo que enfrentar el marrón de una alcaldía sin un duro y con todo en contra?.

Si, ya sé que han fallecido más bilbainos, pero alcaldes este año, solo uno, y ese de Bilbao y promotor de la fiesta por la que Gurutze estaba en el balcón.

Confío sea una omisión involuntaria. Pero cuando comenté esto en tw me salió el listo de turno diciendo que Azkuna también había fallecido, si, pero el año pasado y no fue quien estuvo en la génesis de estas fiestas con aquel concejal del PNV, el bueno de Julián Fernández. Y además, Azkuna, ha tenido el reconocimiento que ha merecido. ¿Por qué silenciar a uno a cuenta del otro?. ¿Es que hay alcaldes de primera, de segunda y de tercera?. En el PNV, que yo sepa, eso no funciona así.

Y la muestra la tenemos en Deia. El martes 25 de agosto publicó una bonita foto del alcalde Castañares disparando el txupín desde el ayuntamiento de Bilbao. Y encendía la mecha con un puro. Bien por Deia que nos recordaba este dato tan silenciado. Aquí no todo fue Txomin Barullo, sin negar su importancia, pero en momentos en los que la política de manera injusta mete en el mismo saco a todos, ahí está el ejemplo de un hombre bueno como Castañares, fallecido en mayo y del que hay una especie de conjura para no acordarse de él, salvo DEIA.

Y ojalá Gurutze Beitia si tiene oportunidad, subsane la omisión, en recuerdo de un alcalde que fue quien puso en marcha la Aste Nagusia y que ya fallecido y desde el otro mundo no le va a crear ningún problema si lo alude.

TRES EX-PORTAVOCES DEL PNV EN EL ENTIERRO DE BENEGAS

Jueves 27 de agosto de 2015

Iñaki entierro Txiki BenegasFaltó Marcos Vizcaya pero Xabier Arzalluz, Josu Erkoreka y yo estuvimos en el cementerio de Polloe donde fue enterrado este jueves Txiki Benegas. Lo destaco porque no es habitual que Arzalluz acuda a este tipo de actos y sin embargo lo ha hecho. Y los tres nombrados hemos trabajado en Madrid con Benegas como portavoces parlamentarios. La Amnistía, el Pacto de Madrid, las Transferencias….

Fui con Erkoreka a este emotivo y triste acto donde lógicamente estaba su familia así como su familia política echando solo en falta a Felipe González, a Enrique Mugica, a Nicolás Redondo padre e hijo, a la presidenta del Parlamento Vasco y al alcalde de Donosti. Por lo demás allí estaba Alfonso Guerra, Rubalcaba, Rodríguez Ibarra, Sáenz de Coscolluela, Martín Toval, Corcuera, Marugan, Patxi López, Idoia Media, Egiguren, Luena, Gasco, Arriola, Santano los hermanos Buen, Manolo Huertas, Pastor, Marañon, Dimas Sañudo, Torrontegui, Pedro Hernández, Bereziartua, Landaburu,….y nadie del PP, y menos de Bildu. Mal estilo frente a una personalidad clave en los últimos años.

He escrito sobre el jelkidismo de su padre y en este entierro hemos visto una manifestación de lo que fue aquella militancia. El hijo de José Artetxe, burukide del GBB del PNV y amigo de Benegas padre es sacerdote misionero en Burkina Faso y en otros lugares y mantenía con Txiki una muy buena relación de tal manera que alrededor del panteón y antes de que el féretro bajara al silencio, ha tomado la palabra y ha hecho un elogio fúnebre impresionante que ha sido aplaudido por todos los presentes antes de dar paso a un emocionado Alfonso Guerra que ha pronunciado una oración cargada de poesía y de ensalzamiento a la figura desaparecida. Ojalá esas dos oraciones se publiquen.

Pérez Rubalcaba me ha comentado como él y yo tenemos muchas vivencias con Benegas y ha recordado una donde además estaba Juan Mari Ollora en La Moncloa. Nos ha comentado como los partidos han cambiado porque la procedencia de la generación que se va y la actual no tienen nada que ver. No es lo mismo proceder de la lucha contra el franquismo que de la lucha por el poder en estado puro reconociendo que él nunca ha sido hombre de aparato porque aparato solo había en Andalucia y en Cataluña. ”Y en Gipuzkoa” le ha terciado Erkoreka. ”Si, en Gipuzkoa también”.

Marugán me ha comentado una vivencia agradable con Arzalluz Se le ha acercado y saludado pensando no se acordaría de él y, Arzalluz, le ha dicho: ”Claro que me acuerdo. Tú con Txiki y nosotros sacamos adelante la CAF de Beasain cuando nadie daba un duro por ella y mira ahora lo que es“. Y Marugán nos repetía complacido las palabras de Xabier porque él recordaba perfectamente lo que tuvieron que hacer para que una empresa en ruinas y a punto de ser liquidada volviera a renacer

Estaba Martín Toval portavoz del Grupo socialista hasta que fue desbancado por Solchaga y con quien mantuvimos una buena relación. Vive retirado en Málaga. Y Sáenz de Cosculluela, ex portavoz y ex ministro casado con una santurtziarra que veranea en Laredo y brindaba por las cualidades de la mujer vasca. Y Gorka Landaburu que se quejaba del poco espacio que había tenido para glosar la figura de Benegas en las tertulias de Claudio, con razón, porque de allí se pasó a la chocolatada prohibida.

Rodolfo Ares ha hecho de maestro de ceremonias con habilidad y Manolo Huertas me ha comentado, junto a Jon Larrinaga, como su hija le comentaba en casa sobre las tertulias de los lunes diciendo que le gustaban. Y con su hijo Pablo he hablado de lo que cuento en el artículo Agur Txiki sobre los juegos de magia. ”Si, si, nos hacía trampas comentaba con cariño”.

Su viuda Maite nos ha comentado que nos apreciaba mucho y poco a poco nos hemos ido dispersando y pensando en lo dicho por Guerra: ”Los muertos siguen vivos en el recuerdo de los que les quisieron”