Bizcocho para el desayuno. En repostería una pareja que siempre ha funcionado ha sido la chispeante naranja de la mano del chocolate, … hay por ahí verdaderas delicias con este dúo que se intensifican con la llegada de los fríos ¿quién no ha disfrutado con unas naranjas confitadas bañadas de chocolate?… aquí que somos mucho de exagerar las formas, aparte de disfrutar es que hemos llegado a gritar de gusto,… pero vamos al desayuno de hoy y nos preparamos este bizcocho “marmolado” de naranja con cacao del bueno. Lo de marmolear el bizcocho os va a encantar y si el recipiente que utilizáis es redondo en vez de rectangular, os quedan unas vetas muy interesantes.
Hoy encendemos el horno para recibir un bizcocho que huele a gloria, nos ponemos el delantal y empezamos.
INGREDIENTES: 250g de harina, 150g de azúcar, 3 huevos, 100g de mantequilla, 1 naranja, 1 yogur, 1 cucharada de levadura, 3 cucharadas de cacao, 1 pellizquito de sal.
ELABORACION:
Precalentamos el horno a 180º
En un bol incorporamos la harina y la levadura, mezclamos bien y reservamos.
En otro bol echamos los huevos con el azúcar, batimos hasta que quede bien integrado y a continuación añadimos la mantequilla, el yogur y la naranja triturada*.
*Limpiamos bien la naranja, quitamos las dos puntas, cortamos en cuatro trozos y trituramos con la piel en una batidora
Por último echamos la harina y la levadura que tenemos reservada y mezclamos todo bien.
Separamos la masa en dos boles diferentes y en uno de ellos espolvoreamos el cacao y mezclamos bien.
Sacamos los recipientes donde vamos a presentar el bizcocho, lo untamos de mantequilla o forramos con papel de horno.
Echamos la mezcla con una cuchara grande, primero en el centro una cucharada de la masa amarilla, seguido también en el centro una cucharada de masa con cacao y así sucesivamente hasta que acabamos con las masas.
En casa hemos rellenado dos recipientes.
Al horno durante 30/35 minutos, abrimos, comprobamos pinchando con un palito y si nos sale limpio, sacamos.
Esperamos, aquí se precisa tener los nervios “templados”, los minutos se hacen interminables, es un bizcocho con muy buenos olores y éstos hacen perder los papeles a cualquiera que en esos momentos se acerque a la cocina, pero… al final, sacamos los cuchillos, lo fileteamos salvajemente y con un café iniciamos el disfrute del desayuno.
Espero que os guste.
