Mantequilla – Mantel Bleu

Tarta de caracolas con manzana y salsa de caramelo

Estas caracolas de manzana van a dar mucho que hablar. Es una de nuestras propuestas estrella para el postre en estas fiestas navideñas, un hojaldre relleno de manzana y frutos secos servido calentito y con una salsa de caramelo por encima, … en dos palabras delicioso-delicioso. Ha pasado las pruebas ISO que viene de guISO una especie de visto bueno a todas las etapas de la elaboración y además ha sido galardonado con la mención de honor que solemos otorgar en casa a las iniciativas que dejan un buen regusto de boca y que no es otro que el EDPM, que significa: Está De P… (ésta no me la sé) Madre.
Siempre que un plato recibe esta mención en casa, prácticamente el recipiente donde se ha servido lo limpiamos porque somos mucho de limpiar, pero llega inmaculado y reluciente. Qué gusto!!! cuando tienes la sensación de haber conseguido llegar muy cerca de las expectativas soñadas, para nuestro gusto es una de las mejores tartas de manzana que hemos preparado.
Prepararla es bien sencillo, os espero si os apetece intentarlo, primero ya sabéis que necesito que tengáis el delantal puesto, los ingredientes listos y empezamos.

INGREDIENTES
Para las caracolas: 4 Manzanas grandes (de la variedad que más te gusten), 70g de mantequilla, 100g de azúcar, 1 cucharadita de canela, 50g de frutos secos y 1 lámina de hojaldre.
Para la salsa de caramelo: 150g de azúcar moreno, 70g de mantequilla, 70g de nata para montar, 1 pizca de sal, 2 cucharadas de azúcar glass.

ELABORACION

Preparamos las caracolas
Pelamos las manzanas y cortamos en cuadritos. Reservamos
Ponemos a calentar una sartén y echamos la mitad de la mantequilla a fuego medio alto.
Cuando empiece a derretirse incorporamos la manzana reservada y rehogamos.
Rociamos un par de cucharadas de azúcar, un toque de canela en polvo (al gusto) y dejamos que se vaya haciendo poco a poco.
Removemos de vez en cuando e iremos echando el resto de mantequilla en trocitos de mantequilla hasta terminarla.
Fuego bajo y freiremos unos 25/30 minutos.
Cuando esté blandita retiramos y dejamos que se atempere unos 10 minutos.
Machacamos los frutos secos que vamos a utilizar. Reservamos.
Vamos precalentando el horno a 200º.

Colocamos la masa de hojaldre sobre la encimera.
Estiramos un poco con el rodillo y espolvoreamos azúcar.
Echamos la manzana por encima extendiéndola bien y dejando al final unos 4 cm para que nos resulte más fácil el cierre.
Espolvoreamos los frutos secos y empezamos a enrollar el hojaldre sobre el mismo, poco a poco cuidando que la fruta quede bien repartida.
Terminamos de enrollarlo y apretamos con los dedos para que quede el rollo bien cerrado.
Cortamos en rodajas de unos 3 ó 4 cm y colocamos en un recipiente que sea alto.
(Hay que tener en cuenta que el hojaldre prácticamente dobla el tamaño)
Las rodajas las repartimos por el bol separadas.
Y horneamos a 200º durante 30 minutos.
Sacamos y esperamos 5 minutos que atempere.

Preparamos el caramelo

Incorporamos el azúcar a la sartén caliente bien caliente.
Bajamos a fuego medio y removemos constantemente.
Cuando esté prácticamente líquido incorporamos la mantequilla y revolvemos.
Que nos quede bien disuelto.
Es el momento de añadir la nata y seguimos removiendo.
Para que nos quede una textura más espesa añadir azúcar glass y seguimos removiendo hasta que este todo bien mezclado.
Retiramos y recogemos en una salsera.

Montamos la tarta. Tenemos la tarta atemperada y echamos por encima la salsa de caramelo cubriendo bien todos los huecos.
Seguido a la mesa y a disfrutar.
Espero que os guste.

Crumpets con frutas del bosque

Hoy desayunamos unos deliciosos crumpets. Es un dulce típicamente inglés que tienen este nombre tan divino y que en casa mientras dábamos cuenta de ellos hemos llegado a la conclusión que se llaman así porque crum entendemos que nos quiere avisar del cru-jiente y pet de acariciar porque lo que en realidad llevas a la boca tras elaborar esta rica receta son unas caricias crujientes que luego se acompañan con mantequilla o mermelada o quesito o … frutas del bosque como las que acabamos de desayunar.
Bien es cierto que esta traducción que planteamos es personal, espontanea e intransferible, pero bien pensado, mucho mejor este nombre que el de «tortitas» pues siempre detrás de esta palabra te viene a la imaginación el “bofetón” y te deja un poco en modo alerta, o el pancake que si no lo pronuncias bien esa k repetida no sugiere nada dulce …, pero a lo que vamos, nos ponemos en plan “propuesta internacional” y nos han salido estas crumpets maravillosas que nos han hecho felices en el desayuno.
Así que no os propongo nada baladí, pues ésta es una receta de las que te dejan muy satisfecha y realmente feliz de ver a los tuyos disfrutar en la mesa.
Ya sabéis que no empiezo si no tenéis el delantal puesto, … ahora sí, empezamos.

INGREDIENTES: 20 g de mantequilla, 3 g de levadura, 1 huevo, 15 g de azúcar, 1 toque de sal, 175 g de leche tibia y 100 g de harina.

ELABORACION
Ponemos en un cazo a fuego medio a fundir la mantequilla. Reservamos.
En un vasito desmenuzamos la levadura con una cucharadita de agua tibia y reservamos.
Mezclamos en un bol grande el huevo, la mantequilla fundida, la levadura disuelta, el azúcar, la sal y la leche tibia.
A esta mezcla le vamos añadiendo y batiendo la harina poco a poco.
Tapamos el bol con un paño de cocina o con papel film y dejamos que repose a temperatura ambiente 1 hora.
Con un pincel untamos bien los aros que vamos a utilizar con mantequilla o aceite.
Ponemos a calentar la sartén bien untada de mantequilla o aceite.
Colocamos los aros y vertimos una cucharada de la mezcla en el interior de cada uno.
Dejamos cocer a fuego lento durante 5 minutos.
Cuando se formen unas burbujas en la superficie sacamos.
Retiramos los aros con cuidado (salen empujándolos un poco o pasando un cuchillo de puntita alrededor).
Les damos la vuelta y los llevamos a la sartén.
Freímos durante dos minutos y los sacamos.
Sacamos y los untamos con las frutas del bosque, o mantequilla, o …. lo que quieras porque están calentitos y deliciosos.
Si echas dos cucharadas en el aro, el crumpets te pega un estirón y preparas una mini-tarta muy coqueta. Espero que os gusten.

Sopa de coliflor con crema de queso y bacón

¿A alguien se le ocurre un plato mejor? . En estos días de frío propongo una sopa bien caliente y con sorpresa, … a vosotros no me queda otro que contaros que dentro de esa tapa crujiente de hojaldre se encuentra una sopa deliciosa de coliflor con unos taquitos de panceta que da gloria comérselos, pero en casa, no he soltado ni media pista cuando he colocado las “marmitas en la mesa”. Tremendos nervios, he tenido que aguantar como una jabata miradas de las que ponen los jugos gástricos como escarpias, pero así soy yo, con el delantal puesto me crezco. Al final para que la cosa no fuera a mayores, ha llegado el momento de permitir romper el envoltorio y cómo aún era pronto, la familia ha estado soplando un buen rato pues el caldo llegaba recién salido del horno muy calentito.
Así que para evitar el riesgo de abrasarnos, nos hemos permitido disfrutar de unos entrantes deliciosos, así que cuando hemos dado buena cuenta de ellos, nuestra sopa y los nervios habían conseguido atemperarse.
Abreviando, después de la sopa nos hemos pasado directamente al postre…, también excepcional, pero éste os lo cuento otro día.
Necesitamos una coliflor blanca y preciosa, un caldo de ave y por supuesto esa tocineta con veta perteneciente al porcino con nariz más chata.
Hoy más que nunca es necesario que os arregléis bien para trabajar entre fogones pues vamos a preparar un caldo señorial.
El delantal bien atado para ir preparando los ingredientes.
Enseguida empezamos.

INGREDIENTES: 1, 5 l de caldo de ave, 200 g de tocineta, 1 cebolla blanca o cebolleta, ½ cebolla roja, 1 coliflor pequeña, 2 cucharadas de mantequilla, 125 g de leche, 2 cucharadas de harina, 3 cucharadas de crema de queso, pimienta, aceite, sal, perejil fresco, 2 láminas de hojaldre y 1 huevo.

ELABORACION

Cortamos la tocineta en tacos y calentamos en la sartén hasta que se doren.
Retiramos y reservamos.

Con la grasa de la tocineta que nos ha quedado en la sartén y si es necesario añadimos un chorrete de aceite, ponemos a freír la cebolla bien picada.
Removemos bien para que coja el sabor de la tocineta y que se vaya haciendo poco a poco.
Salpimentamos y seguimos removiendo hasta que esté blandita y con un tono dorado, sobre unos 12/15 minutos.
Desengrasamos y reservamos.
Aquí podemos elegir si pasar la cebolla pochada por la batidora o tal como está la incorporaremos más tarde a la sopa.
En nuestro caso la hemos batido y nos ha quedado un puré de cebolla que reservamos.

Ahora le toca el turno a la coliflor que estará bien limpia y cortada en ramilletes pequeños.
Echamos a la sartén con la grasa sobrante de la cebolla, salpimentamos y la salteamos durante unos 8/10 minutos.
Retiramos y reservamos.

En una sartén echamos la mantequilla y cuando se derrita incorporamos la harina. Removemos bien y vamos echando la leche poco a poco sin dejar de remover.
Tendremos el fuego medio bajo para conseguir que la harina se haga y nos quede un tono dorado.
Cuando tengamos la cremita bien disuelta, incorporamos la crema de queso, seguimos removiendo.
Si necesitamos más líquido, una vez que se nos acabe la leche, echamos caldo.
Removemos bien hasta que esté todo disuelto. Probamos y salpimentamos.

En una olla ponemos el caldo de ave a calentar, incorporamos la cebolla, seguido la coliflor, los taquitos de tocineta y por último nuestra bechamel de crema de queso.
Cuando rompa a hervir retiramos, rectificamos si es necesario la sal y la pimienta y reservamos.

Emplatamos:
Una vez que esté la sopa fría, cortamos el hojaldre a la medida de nuestro bol (un poco más para poder sujetarlo).
Repartimos la sopa en los 6 boles y echamos el perejil fresco bien picadito.
Cubrimos con el hojaldre y guardamos hasta ½ hora antes de servirla.
Precalentamos el horno a 200º y 30 minutos (aquí mirar las instrucciones que señalan en la masa de hojaldre sobre temperatura y tiempo).
Batimos bien el huevo y reservamos.
Cuando queden 10 minutos para terminar el horneado sacar y pintar con el huevo para que nos quede bien dorado.
Sacar y a la mesa. Un poco de paciencia que tiene que atemperar un poquito , … rompemos y a comer, vais a disfrutar un montón.
El hojaldre aporta un toque crujiente que a esta sopa le va de maravilla y está deliciosa.
Espero que os guste.

Sopa de calabaza con crujiente de queso y cacahuetes

Seguimos con la sopa semanal. Sopa de calabaza con crujiente de queso y cacahuetes, ese caldo preparado a fuego lento y que en esta casa se convierte durante el otoño en algo cotidiano a la hora del almuerzo y nos permite además disfrutar de un plato delicioso.
De la mano de una calabaza de la huerta de Yuper de Muskiz, un caldo de pollo, un poco de jamón de primate (cacahuetes) y queso, nos sale una sopa impresionante.
Necesitamos para bordar la receta poner mucho cariño y ganas en la elaboración y como así ha sido, el resultado no ha podido ser mejor.
La primera ración ha caído a media tarde, en plan muy francés, una cena liviana acompañando a nuestra “soupe” de una ensalada y fruta fresca.
Permitido una copita de vino, un trocito de pan y a esperar a que llegue mañana …, porque repetiremos, … para eso hemos preparado unas cuantas raciones.
Si os animáis ya sabéis, tomar nota de los ingredientes y a colocarse el delantal.
Yo me quedo aquí esperando, según estéis preparados empezamos.

INGREDIENTES: 1 kg de calabaza, 1,2 l de caldo de ave, 1 puerro, 1 cebolla, sal, pimienta y mantequilla.

ELABORACION:

Preparamos la cebolla
Ponemos la sartén a calentar y echamos la mantequilla.
Según se derrita, incorporamos la cebolla cortada en juliana.
Sazonamos y salpimentamos, bajamos el fuego y removemos bien.
Dejamos que se vaya haciendo poco a poco, rehogando de vez en cuando para evitar que se queme.
Cuando esté blanda y doradita sobre unos 15 minutos, retiramos y reservamos.

Preparamos la calabaza
Colocamos la olla a fuego medio, con el caldo de ave, la calabaza, la zanahoria y los puerros limpios y cortados en trozos.
Salpimentamos y dejamos hasta que rompa a hervir.
Bajamos la temperatura y que se vaya cociendo poco a poco durante unos 50 minutos.
Revisamos que la verdura esté cocida y retiramos.
Añadimos la cebolla y pasamos la batidora.
Opcional, si os gusta que el caldo esté fino, pasar seguido por el chino.
Reservamos.

Preparamos el crujiente de queso y cacahuetes
Sobre un plato, encima de papel de horno colocamos unos cacahuetes y espolvoreamos con queso rallado (aquí el que más nos guste).
Tapamos con otro papel de horno y aplastamos con un plato.
Metemos en el microondas 5 minutos.
Sacamos, esperamos que enfríe y ya tenemos nuestros crujientes que le van a dar a nuestra sopa un toque muy especial.

Emplatamos
Servimos en bol y colocamos encima un trocito de crujiente.

Feliz sopa, feliz semana.

Tarta con té verde y crema de naranja

Esperanzador color para una tarta deliciosa, verde con té Matcha y además japonés … ahí queda eso.
Este té tiene además de un delicioso sabor y un intenso olor, un color verde que aporta a las recetas un toque exótico.
Se utiliza mucho en cocina por su textura en polvo ya que esto le permite una perfecta combinación con los ingredientes y además cuenta con una larga lista de beneficios para la salud.
Es la primera vez que cocino con el “nipón” así que me he asegurado con una receta de prestigio de la mano de directoalpaladar.com y ha salido muy rica.
La tarta es muy contundente y recuerda mucho a la textura del mazapán.
La cubrimos con una crema de naranja impresionante que le da el toque preciso.
Yo ya estoy preparada para empezar de nuevo, me pongo el delantal y entiendo que Juan Carlos (está dedicada especialmente para él) e Irati también lo tendrán puesto, horno, utillajes de repostero feliz y … empezamos.
Espero que os guste. Ingredientes para el bizcocho: 250 g de mantequilla a temperatura ambiente, 250 g de azúcar molida superfina, 4 huevos grandes, 250 g de harina de repostería con levadura, 3 cucharadas de té Matcha, cucharaditas de leche.
Ingredientes para la crema de naranja: 150 g de mantequilla a temperatura ambiente, 300 g de azúcar molida superfina, 2-3 cucharadas de zumo de naranja y la piel rallada de una naranja.

ELABORACION
Preparamos el bizcocho:
Batimos la mantequilla con el azúcar hasta obtener una crema fina.
Incorporamos los huevos de uno en uno, batiendo bien cada vez que añadimos uno.
Agregamos una cucharada de harina con el último huevo para evitar que se cuaje la masa.
Vamos echando poco a poco el té matcha, el resto de harina y batimos hasta que esté todo bien integrado.
Echamos la leche poco a poco y mezclamos hasta que tengamos la masa bien integrada.
Preparamos el molde cubriendo con papel de horno untado con mantequilla o aceite para evitar que se nos pegue.
Depositamos la masa y la horneamos a horno precalentado a 180º durante 40 minutos o hasta que pinchando con un palillo este salga limpio.
Sacamos y esperamos que enfríe.

Preparamos la crema de naranja:
Batimos la mantequilla con una batidora eléctrica hasta que nos quede una crema muy suave.
Añadimos poco a poco el azúcar molida y seguimos batiendo hasta conseguir que la crema esté bien fina.
Echamos el zumo, la ralladura de naranja y removemos hasta obtener que quede bien emulsionada.
Reservamos.

Montamos la tarta
Cortamos el bizcocho por la mitad, emborrachamos las dos mitades con el sobrante del zumo de naranja.
Rellenamos con la mitad de la crema, tapamos con la otra mitad del bizcocho y repartimos por encima el resto de crema.
Hay que mantener fría hasta el momento de servir.

Espero que os guste.