Deliciosas torrijas. Estas rebanadas de pan empapadas en leche, huevo y luego fritas es uno de los postres tradicionales que llevan más de 2000 años siendo un bocado imprescindibles en todas las cocinas. En Francia se llaman pain perdu, que viene a querer decir pan perdido, … no quiero ser mal pensada pero esto me da que se debe a que una vez pasadas por la sartén y en nuestro caso bañadas con un chorrete de almíbar de naranja son muy susceptibles de perderse … ¡qué listos estos franceses! en verdad demuestran que tienen una gran conocimiento de «La condición dulce».
Urge ponerse el delantal porque de la misma vamos a preparar este postre tradicional.
Empezamos.
INGREDIENTES
Para las torrijas: 1 barra de pan para torrijas, 1 l de agua, 150 g de azúcar, 1 cucharada de zumo de limón, 1 palo de canela, 1 piel de naranja, 1/2 piel de limón, 3 huevos, 1/2 l de aceite y 1/2 cucharilla de canela molida.
Para el almíbar de naranja: 250 g de zumo de naranja, 20 g de zumo de limón, 200 g de azúcar y 1 piel de limón.
ELABORACION
Preparamos las torrijas
Ponemos a calentar en una cazuela el agua, con el azúcar, el zumo de limón, el palo de canela y la piel de la naranja y el limón cortada en tiras.
Cuando rompa a hervir dejamos 10 minutos, apagamos y esperamos a que se enfríe.
Cortamos la barra en rebanadas de unos 2 cm y las incorporamos en un bol.
Colamos el almíbar y cubrimos con él las rebanadas para que se unten bien.
Batimos los huevos y ponemos la sartén con el aceite a calentar.
Rebozamos en el huevo cada rebanada y las freímos en la sartén hasta que estén doradas por ambos lados.
Sacamos y dejamos sobre papel de cocina para que escurran el aceite sobrante.
Mezclamos y cucharada de azúcar con la canela y espolvoreamos con esta mezcla las torrijas.
Reservamos.
Preparamos el almíbar de naranja
Cortamos la piel de limón en tiras e incorporamos con el resto de ingredientes en un cazo.
Cuando rompa a hervir dejamos que siga cociendo unos 10 minutos.
Sacamos y dejamos que se temple. Reservamos.
Emplatamos
Servimos las torrijas en el plato y las acompañamos con un chorrito de almíbar de naranja.
Espero que os guste.
Esta receta está inspirada en el recetario Thermomix y echarla el ojo ha sido una idea estupenda por lo que mi agradecimiento por este dulce descubrimiento.






INGREDIENTES: 350 g de harina de repostería, 2 cucharaditas de levadura tipo Royal, 100 g de azúcar, 1 cucharadita de vainilla (o anís, o ron, o el aroma que más os guste), 2 huevos, 1 pizca de sal y 100 g de mantequilla blandita. Para freír: aceite de oliva. Para espolvorear: azúcar glass.
ELABORACION: En un bol echamos la harina, la levadura y la mezclamos. Añadimos el resto de ingredientes y amasamos hasta conseguir que la masa esté espesa y todo los componentes estén bien unidos, con una textura como el de las rosquillas. Si tenemos un robot de cocina empezaremos a amasar primero a velocidad baja y a medida que se vayan integrando los ingredientes subimos la velocidad hasta conseguir una masa compacta. Una vez tenemos la masa lista, hacemos una bola con ella, la cubrimos con film y la guardamos en la nevera una media hora. En una sartén alta o en un cazo echamos abundante aceite y calentamos a temperatura media alta. Sacamos la masa del frigorífico y con una cucharilla vamos sacando pellizcos y con las manos untadas con un poco de harina vamos formando las bolitas. Echamos las bolitas al cazo para que se vayan friendo (hay que tener en cuenta que crecen bastante por lo que tenemos que freír pocas cada vez). Al principio se quedan en el fondo del cazo, pero enseguida salen a flote y cuando están doradas sacamos y dejamos sobre papel de cocina para que desengrasen. Por último, las espolvoreamos con azúcar glass y ya podéis empezar con esta dulce adicción. Espero que os gusten.











