Cuentan que un forofogoitia empeñó el colchón para ir a una final Athletica. Seguramente leyenda urbana. Los clubes españoles de fútbol profesional adeudan 3.530millones de euros; su deuda fiscal es de 752millones y deben a la seguridad social 10,6millones.
Aunque reflotados-amnistiados en varias ocasiones y usufructuarios del 7,5% de las quinielas, están entrampados hasta las cejas y las televisiones ya no les pagarán más en junio. Los dos grandes junto a Valencia, Osasuna y Athletic tienen asegurada su supervivencia económica… ¿el resto? ¿Será la deuda del futbol el adiós a la terapia social?
Dice el mediático Punset que la realidad es aburrida y que andamos buscando afanosamente algo para evadirnos de ella, desde la tele a la wii, y en este éxodo desde la tediosa realidad hacia el no-aburrimiento se coloca el fútbol, el circo romano moderno. Adobado con dosis de tensión-competición tenemos el cóctel perfecto de pasión enardecida. Cada día nos desayunamos con novedades que hacen quejumbrosa nuestra realidad: la deuda creciente, la prima de riesgo disparada, el déficit galopante, créditos negados, sangrantes recortes sociales, jefe del Estado escopeteando, el paro enseñoreado… También se producen noticias buenas, pero…
Pero si dispusiéramos de un pulsómetro social han sido la eliminación europea (lo sabe hasta una nofutbolera) del Madrí y del Barça y el finiquito del entrenador de éste las que han copado los medios, pero sobre todo las conversaciones y la ocupación mental preferencial de la población. Para qué decirles de la pasión-alegría estruendosa de los aficionados rojiblancos del otro Madrí y sobre todo de nuestro Athletic txapeldun. La espita abierta de la pasión está permitiendo evadirse de SU realidad a un buen número de tocados por la crisis y por las deudas.
Como desde los poderes públicos se nos oculta por sistema la verdad, algún “bienpensado” habrá imaginado que el gobierno rajonyano nos ocultó este punto de su plan estratégico de ahorro: «que ningún equipo de futbol llegue a una final, por el bien de nuestra salud económica-financiera». Si era por el ahorro les ha salido bien con Madrí y Barça, pero el marianismo no ha servido para detener los efluvios pasionales de los más atléticos.
Así que aquí la pasión irrefrenable provocará el orgásmico castigo de gastarse los ahorros en la Europa de perros atados con longaniza. Bilbainada o pasión futbolística desnuda para un atronador Gora Athletik que nos liberará de la aburrida realidad, aunque nos transmute la pasión en deudas.