Llega el clásico de estos fogones para dar un toque exquisito al fin de semana y como estamos en junio y ya han aparecido las brevas que son los primeros frutos de la higuera, las hemos fileteado para presentarlas sobre un buen pan y a esperar a ver si os gusta.
Por supuesto esta fruta de la higuera no iba sola, la hemos apoyado sobre una confitura de piquillos que daba gloria verla y además para dar más grandeza al bocado, hemos colocado unas lascas de foie, rallado una trufa, rociado con aceite de oliva y para acabar un toque de crema balsámica de higos.
En casa personalmente nos hemos quedado sin habla, concretamente en ese limbo que suele denominarse «estar en la higuera»… y no miento cuando digo que de esas ramas no queríamos bajar.
A estas alturas sólo nos queda el reportaje gráfico de las tostas, porque aquí no ha quedado ni una triste miga y digo triste por no ser antisistema con las frases hechas, pero si soy sincera yo las he notado bien contentas.
Aquí os dejo los ingredientes para que os preparéis este homenaje.
Animo y a ponerse el delantal y no le déis más vueltas os lo merecéis, os lo digo yo.
Empezamos.
ELABORACION
Confitura de pimiento del piquillo
Método tradicional
Trituramos todos los ingredientes y los ponemos a cocer a fuego bajo durante 20 minutos, removiendo muy a menudo.
Probamos, rectificamos, retiramos y esperamos a que se enfríe para empezar a untar.
Thermomix
Troceamos los pimientos 5 segundos en velocidad 4.
Añadimos el azúcar, el vinagre y el agua y programamos 35 minutos, temperatura varoma, giro a la izquierda y velocidad cuchara. Retiramos y esperamos a que se enfríe para empezar a untar.
Emplatamos
Montamos la tosta
Untamos la tosta con la confitura y seguido colocamos la breva fileteada.
Ponemos las lascas o virutas de foie.
Rociamos con aceite de oliva y vinagre balsámicos.
Aromatizamos rallando la trufa por encima.