CEBOLLA – Página 2 – Mantel Bleu

Tosta de bacalao confitado sobre crema de pimientos

Tosta de bacalao. Una tosta elegante y deliciosa que preparamos con una cremita de pimiento y cebolla pochada, verde como el color de la lujuria y con un sabor a bacalao exquisito pues a este refrito le incorporamos la piel de bacalao una vez que lo hemos confitado y lo pasamos por la batidora, turmix,thermomix o … cualquier objeto que tengamos a mano para conseguir esa textura de crema que nos va a hacer hasta relinchar.
Cubrimos la tosta con ese pan de pueblo previamente tostado y que hidratamos con unas gotitas de aceite y el bacalao confitado con coronita de guindilla roja.
Que desayuno, una pena que se termine, pero tiene que ser así porque tras el último mordisco ya la cabeza se pone en alerta verde y damos paso a pensar en los ingredientes de la siguiente tosta.
De momento aquí estoy con el delantal puesto esperando, ánimo que según estéis uniformados empezamos.
INGREDIENTES: 2 Tostas, 2 tejadas de bacalao, 1 pimiento verde italiano, 1 cebolla grande, aceite, sal, 1 poco de guindilla, pimienta y sal.

ELABORACION

Confitamos el bacalao
Calentamos el aceite en una sartén alta o un cazo a temperatura media baja.
Sumergimos el bacalao con la piel hacia arriba y dejamos a temperatura baja unos 20/25 minutos.
Pasado el tiempo comprobaremos que el pescado esté en su punto si se lamina con facilidad.
Sacamos, retiramos la piel que incorporamos a la verdura pochada y reservamos el bacalao.
Preparamos la crema
Incorporamos a la verdura la piel del bacalao y trituramos hasta que nos quede una textura bien suave. Reservamos.

Preparamos la crema
Cortamos la cebolla y el pimiento bien picadito.
Echamos primero la cebolla a la sartén caliente con un buen chorro de aceite.
Empezamos con fuego medio y vamos bajando.
Cuando tengamos la cebolla blandita, incorporamos el pimiento de verde, mezclamos salpimentamos y dejamos a fuego bajo que se vaya haciendo poco a poco.
Cuando todo esté bien pechado, escurrimos bien el aceite, rectificamos si es necesario de sal y pimienta. Reservamos.

Montamos la tosta
Untamos con la crema y encima colocamos el bacalao.
Adornamos con la guindilla y a disfrutar.
Espero que os guste.

Lasaña de calabacín con verduras y morro.

Tocaba una lasaña y hemos elegido esta que es de las más espontáneas.
Lasaña de calabacín con verduras y mucho morro, así que chitón y seriedad desde el principio ya que este morro de ternera estupendo, anda un poco suelto y hemos tenido que limpiárselo varias veces para evitar sus inconveniencias y de la misma a la olla express para ablandarlo y de paso que calle, que nos ha puesto la cabeza como un bombo.
Tras la pasada express, se ha quedado relajado y la hemos embutido en un recipiente y cuando se nos ha quedado frío, tenía un aspecto precioso y muy manejable para filetearlo.
El plato exquisito, el calabacín y las verduras han sido una compañía deliciosa y al final en la mesa nos ha hecho disfrutar.
Animo a los aficionados a la lasaña para que toméis nota de esta receta porque estoy convencida que la vais a disfrutar.
Yo ya estoy aquí preparada con el delantal, así que si os animáis empezamos

Ingredientes para 6 personas: 1 Morro de ternera, 2 calabacines, 1 cebolla blanca, 1 cebolla roja, 2 pimientos morrones asado y pelados, 1 pimiento italiano, 2 dientes de ajo, aceite, sal y pimienta. Para la bechamel: 1/2 litro de leche, 60 gramos de mantequilla, 60 gramos de harina de trigo, nuez moscada y sal

ELABORACION

Preparamos el morro (1 día antes)
Ponemos el morro en la olla express a fuego alto, salpimentamos, cubrimos de agua y cerramos.
Cuando la olla silbe, bajamos a temperatura muy baja y que siga cociendo durante 60 minutos.
Abrimos y escurrimos el morro y lo metemos en un recipiente para que enfríe.
Hay que tener en cuenta que el morro va a coger la forma del recipiente, por lo que es interesante los de forma cuadrada o rectangular.
Lo adaptamos bien, tapamos y a esperar.

Cortamos uno de los calabacines en rodajas y lo ponemos a la plancha.
Con una brocha pintamos las rodajas de aceite y espolvoreamos un poco de sal y pimienta.
Reservamos.
Con el resto de la verdura cortamos y ponemos en la sartén con un chorrete de aceite para que se vaya haciendo.
Salpimentamos y a fuego bajo que se poche durante unos 20 minutos.
Cuando esté blandito, vertemos un vasito del caldo del morro y dejamos que reduzca unos 10 minutos..
Sacamos y pasamos por la batidora. Reservamos.

Preparamos una bechamel ligera
En un cazo vamos calentando la leche.
En otro recipiente incorporamos la mantequilla a fuego lento y cuando esté derretida añadimos la harina y dejamos que se cueza, hasta que coja algo de color.
Vamos incorporando el toque de nuez moscada y la sal.
Es el momento de remover bien con una espátula la harina con la mantequilla hasta conseguir que la mezcla se desprenda de las paredes del cazo.
Cuando la leche que tenemos calentando rompa a hervir, la vamos vertiendo poco a poco y seguimos removiendo.
Cuando tengamos todo integrado sin grumos, probamos y rectificamos.
Dejamos unos 7 minutos cociendo.
Retiramos y reservamos.

Montamos la lasaña
En un recipiente colocamos una primera base de calabacín.
Seguido fileteamos el morro y vamos cubriendo.
Ponemos una capa de la crema de verduras.
Repetimos de nuevo con los calabacines y nueva de morro.
Echamos la bechamel cubriendo todo y rallamos queso por encima.
Metemos al horno que estará precalentado a 200º y dejamos durante 30 minutos.

Servimos y estoy convencida que os va a encantar esta propuesta.

Crema de zanahoria con queso gorgonzola

Sugiero arrancar este otoño con una crema preciosa de color naranja de la mano de unas zanahorias que ya las tengo preparadas, bien limpias y dispuestas a participar en un plato delicioso.
También tengo un queso gorgonzola que me ayudará a conseguir un toque cremoso con sabor ligeramente picante.
Me reservo unos trocitos para preparar unas bolitas de este italiano rebozadas con sésamo tostado.
Esta crema promete, primero por lo fácil que se prepara y desde luego por lo rica que está … y no olvidemos esas pelotillas crujientes que cada vez que te encuentras con una, tienes la sensación de que te ha tocado un premio.
Razonablemente engalano la mesa con un mantel verde y el delantal del mismo color pues tengo la esperanza de que muchos de vosotros vais a estar interesados en sacar esta receta tan facilona.
Todos juntos, … empezamos.
Esta receta se la dedico a Mertxe por esas gallinas tan preciosas y por ser tan fiel a Mantelbleu. Entrañable y feliz cena la del otro día, habrá que repetir.
INGREDIENTES (para 5 raciones): 500 gr de zanahorias, 200 gr de cebolla, 40 gr de aceite de oliva, 140 gr de queso gorgonzola, 400 gr de caldo de gallina, 140 gr de nata líquida, sésamo, pimienta negra, sal y comino.
ELABORACION
Calentamos la sartén, echamos el aceite y seguido incorporamos las zanahorias y la cebolla troceadas.
Bajamos a temperatura media y dejamos que se fría durante 10 minutos.
En una olla calentamos el caldo de gallina, salpimentamos al gusto y ponemos una pizca de comino.
Incorporamos la verdura al caldo y dejamos que se vaya cociendo poco a poco,durante unos 20 minutos hasta que la zanahoria y la cebolla esté blandita. Reservamos.
En un cazo aparte mezclamos 100 gr de queso gorgonzola con la nata y calentamos hasta que nos quede una crema.
Incorporamos a la olla con la verdura y dejamos que se haga unos cinco minutos.
Pasamos la batidora, probamos y rectificamos con la sal y la pimienta.

Pintamos una sartén con un poco de aceite, calentamos y echamos el sésamo para que se nos tueste. Retiramos.
Con el queso sobrante, hacemos unas bolitas con cuidado y las rebozamos sobre el sésamo de la sartén.
Servimos las raciones y colocamos las bolitas.

Espero que os guste.

Arroz caldoso con sepia y mejillones al estilo Jambalaya

Si os apetece preparar un arroz caldoso impresionante, ya estáis tomando nota de los ingredientes.
Recién cocinado está de ponerse hasta los codos, pero si sobra he de decir que al día siguiente servido en mesa, hubo hasta aullidos de satisfacción.
Ahora me gustaría contar la historia de este plato, que lo probé en un viaje hace algunos años (no muchos desde luego, porque estoy hecha una chiquilla) y me encantó. Hace unos días me llega una receta y según leí los ingredientes me vino a la memoria el plato y de inmediato me sentí imbuida del «efecto Proust», … así que os podéis imaginar cuanto he disfrutado cocinando esta receta de la gastronomía cajún*.
Eso sí !!!, la he tuneao un poco y si bien en la original el arroz va acompañado de pollo, cerdo y langostinos, en casa la hemos cocinado con sepia y mejillones. El resultado exquisito así que os animo fervientemente a preparar este arroz que seguro que os va a sorprender.
El delantal preparado y empezamos.

*La gastronomía cajún es la cocina tradicional de los francocanadienses expatriados al Estado de Luisiana tras la incorporación de los territorios franceses a la Corona Británica. Se trata de una cocina más bien rústica donde las verduras aromáticas como los pimientos, las cebollas y el apio están catalogados como la santa trinidad. El aspecto de esta cocina es más mediterránea que norteamericana, debido a la fusión cultural del pueblo cajún entre italianos, españoles, franceses y otros.

INGREDIENTES (para 6 personas): 100 gr de cebolla, 100 gr de pimiento rojo, 100 gr de apio, 2 dientes de ajo, 400 gr de tomate pelado, 1 ó 2 cayenas, 250 gr de arroz, 600 gr entre agua y fumet de pescado, 100 gr de aceite de oliva, 1 hoja de laurel, 2 toques de tomillo, 1/2 cucharilla de cúrcuma/azafrán, 1 toque de orégano, 400 gr de sepia, 400 gr de mejillones.

ELABORACION

Cocemos los mejillones
Limpiamos los mejillones y los ponemos en una cazuela cubiertos de agua.
Cuando rompa a hervir retiramos la cazuela y esperamos a que se atemperen para retirar la cáscara y reservarlos.
Dejamos 1 docena con cáscara para adornar los platos.
Guardamos el agua de los mejillones.

Guisamos la sepia
Limpiamos y troceamos la sepia.
Ponemos la sartén al fuego y cuando esté caliente incorporamos un chorrete de aceite y freímos la sepia.
Cuando esté doradita retiramos y reservamos.

Preparamos el arroz
En la cazuela calentamos el aceite y añadimos cortada muy fina la cebolla, el pimiento, el apio y el ajo, removiendo constantemente para que no se nos pegue.
Bajamos el fuego y durante cinco minutos vamos incorporando, la cayena, el tomillo y la cúrcuma o el azafrán.
Seguido añadimos el tomate que lo habremos picado, el caldo (en nuestro caso el agua de los mejillones con fumet de pescado)
y el laurel.
Subimos la temperatura y cuando empiece a hervir echamos el arroz .
Tapamos la cazuela y lo dejamos hervir durante 10 minutos.
Pasado este tiempo incorporamos la sepia y los mejillones, tapamos y dejamos que termine de cocer el arroz otros 10 minutos más.
Unos minutos antes de terminar será el momento de abrir la cazuela, probar y si es preciso rectificar. En casa no hemos necesitado echar sal a la receta y respecto al plato es picante, pero cada uno jugará un poco dependiendo de su gusto con la cantidad de las especias.
Sacamos servimos y desde luego a nosotras nos ha parecido que estaba exquisito.
Salud!

Caracolas de hojaldre de morcilla y pera

Sugiero un bocado exquisito con unos ingredientes muy interesantes de hecho uno de ellos el mismo Platón se ocupó de indicarnos no sólo que era de origen griego, sino que además nos señaló que Aftónitas era el padre de la criatura.
Conocido ya que la morcilla se la debemos a este hombre, que fue quien inició el relleno de la tripa en un principio con centeno y destinado a manjar de las mesas humildes, ha conseguido este embutido recorrer el Atlas y acoger en su tripa una gran variedad de ingredientes de las diversas especies vegetales de cada país.
Elegimos para nuestras caracolas el tipo de morcilla que más nos guste y lo mezclamos con las peras, maravilloso maridaje y señalar que no seré yo quien reflexione sobre el papel de las peras en el Paraíso, injustamente acusadas la manzana de todo mal pienso que si la historia fuese más justa podríamos estar hablando del Señor Adán y su especial percepción de la pera.
Todo ello y un hojaldre, enrollamos, cortamos y al horno y en 15 minutos tenemos unos crujientes deliciosos.
Estas caracolas son muy versátiles, puede rellenarlas de los ingredientes que más te guste, en salado gambas y txaka, chorizo con cebolla ponchada, jamón y queso y en dulce …. chocolate blanco, negro, crema pastelera, … lo que quieras.
Ideal para picoteos, puedes prepararlo con anterioridad y al congelador, sacar una hora antes de servir, cortar, al horno y aparecer con estas caracolas bien crujientes.
Nos ponemos el delantal, extendemos nuestra masa de hojaldre y empezamos a rellenar.

ELABORACION

Pochamos la cebolla
Cortamos la cebolleta y la ponemos en la sartén a fuego alto.
Cuando empieza a dorarse, bajamos el fuego y dejamos que se poche durante 12 o 15 minutos.
Retiramos sobre un colador para que desengrase bien y posteriormente dejamos sobre un papel de cocina. Reservar.

Preparamos la morcilla
Precalentamos el horno a 200º y cubrimos la morcilla con papel de aluminio y al horno durante 15 minutos.
Sacamos, retiramos en un plato, esperamos que se atempere y retiramos la piel.
Reservamos.

Preparamos la pera
Limpiamos la pera y la ponemos en una cazuela con agua, prácticamente cubriendo.
Cuando rompa a hervir, dejamos 2 minutos y retiramos.
Esperamos que atempere, pelamos y cortamos en trocitos.

Pasamos por la batidora, picadora o thermomix la cebolla, cuando consigamos una cremita, incorporamos la pera, batimos y seguido echamos la morcilla y dejamos todo integrado.
Extendemos la masa de hojaldre y distribuimos sobre ella el relleno, dejando uno de los bordes libre, sobre 2cm.
El borde lo pintamos de agua y comenzamos a enrollar el hojaldre como si fuera un brazo de gitano, acabando en el borde que hemos dejado.
Cortamos las rodajas (sobre 12 y 14) y las colocamos en una bandeja de horno forrada con papel de hornear. Pintamos con huevo batido y horneamos 20 minutos a 200º hasta que estén dorados.

Sacamos y en 5 minutos disfrutaremos de un bocado que nos va a encantar.