El último boletín del Gobierno vasco que “nunca existió”

Imprimido en Turtzios el 28 de julio de 1937, en euskera y castellano, y hasta hace poco inédito, se hizo para trasladar el ánimo de que la guerra no estaba perdida

Un reportaje de Iban Gorriti

Borja Aginagalde, responsable del Patrimonio Documental del Archivo Histórico de Euskadi. Foto: Juan Lazkano
Borja Aginagalde, responsable del Patrimonio Documental del Archivo Histórico de Euskadi. Foto: Juan Lazkano

Que algo no se conozca no significa que no exista. Es el caso del Diario Oficial del País Vasco que nos ocupa en Historias de los vascos. La mayoría de investigadores y los propios empleados del Archivo Nacional Vasco, con sede permanente en Bilbao, concebían que el último boletín del Gobierno Provisional de Euzkadi se estampó en junio con la llegada de los franquistas a Bilbao el 19 de junio de 1937. Era el número 252 y databa del 17 de junio de aquel calendario. Sin embargo, no fue así, hubo uno posterior y que hasta esta publicación de hoy que recoge DEIA se encontraba inédito.

El último documento oficial y original del Departamento de Justicia y Cultura de la Diputación de Bizkaya tiene dos caras y se imprimió a dos columnas, en castellano y euskara, el 28 de julio de 1937 en Truzios, hoy Turtzioz. Fue la entrega 253.

A juicio del responsable de Patrimonio Documental del Archivo Histórico de Euskadi, Borja Aginagalde, esta gaceta fue manufacturada “con la voluntad férrea de que no se había perdido la guerra, de que se va a seguir gobernando, de que van a hacer el número siguiente… ¡Salta a la vista!”, enfatiza con júbilo. Y va más allá caminando por la misma senda: “Se percibe una convicción patriótica, fueran del partido que fueran. Más aún, porque siendo el último y bajo las bombas de aquellas jornadas… aún en su contenido se acordaron de su gente; hablan de indemnizaciones, por ejemplo”.

La existencia de esta edición era negada hasta que un historiador, Lorenzo Sebastián García, lo citó en una de sus divulgaciones. Surgió la duda y el consiguiente misterio. “Entonces, nos pusimos a buscarlo y apareció, pero no con el resto de boletines, sino que en una carpeta de nóminas de cobro. Entre ellas, allí estaba, porque precisamente una disposición del mismo, un aviso a quienes evacuaron de Bilbao para pagarles la nómina. Te pones a mirarlo y te resulta algo milagroso que en el contexto que estaba el Gobierno vasco pudiera haberse publicado”, acentúa Aginagalde.

un largo recorrido Quimérico es también pensar los viajes que ese legajo ha hecho en los posteriores 80 años que se cumplieron en julio. Desde el archivo capitalino de la calle María López de Haro matizan que los documentos migraron siempre con el Gobierno de Euzkadi, “con el lehendakari Aguirre” -pormenoriza-, y que estuvieron en el exilio en París, y que acabarían llegando al centro Irargi de Bergara hasta volver a mudarse al actual centro bilbaino. “Es un documento emocionante por cómo se llegó a hacer. Cómo durante un periodo tan convulso haya personas pensando en hacerlo… Es un interés por las personas que ahora está de moda, pero no es de ahora solo”, insiste Aginagalde.

El garante de Patrimonio sostiene que la existencia actual del Archivo también es algo milagroso. “Yo siempre he dicho que tenemos poco, pero lo que tenemos es un milagro. Manuel Irujo hizo mucho por ello. Tuvieron mucho coraje para conservar todo lo que se pudiera. Somos unos privilegiados. ¡Diseñaron e hicieron ese boletín estando rodeado por los franquistas!”.

El contenido es “normal”, califica. De esta manera, el sumario informa de un decreto que ordena la movilización de todas las clases e individuos de tropa y mozos pertenecientes al alistamiento de 1921, y de un segundo capítulo de Administración central, de la Secretaría General de Obras Públicas, sobre una relación de todos los vehículos que tenían los Departamentos del Ejecutivo, Corporaciones o entidades civiles. Igualmente, un aviso a los empleados y obreros referente a la indemnización acordada por el Gobierno de Euzkadi.

diferentes apartados El primer apartado atañe al Departamento de Defensa, que se pone en pie de guerra. “Las vicisitudes de la campaña han puesto de manifiesto la necesidad de acrecentar los efectivos militares”, decreta. Para satisfacer esa necesidad articula cinco puntos bajo el cargo del presidente y consejero de Defensa en funciones, Jesús María de Leizaola.

En el capítulo de Administración Central, el Secretario General de Obras Pública, Ricardo Urondo, pide “urgentemente” que aquellos vehículos ‘oficiales’ sean notificados para hacer una relación detallada. Como curiosidad, estas personas deben dirigir su información a un chalet de la calle Pablo Iglesias de Torrelavega, con el objeto de hacérselo saber al Ejército del Norte “antes del 1 de agosto”, queda redactado el día 27 de julio y publicado al día siguiente.

Y clausura el boletín un aviso a empleados y obreros que habiendo trabajado para el Departamento de Obras Públicas de Euzkadi, figurando en sus nóminas, y que quedaron cesantes a raíz de la evacuación de Bilbao, para el cobro de una “indemnización acordada por el Gobierno del País Vasco y en el plazo que media hasta el 5 de agosto, advirtiéndose que a quienes así no lo hagan, les parará el perjuicio a que hubiere lugar”.

“Tenían claro -zanja Aginagalde- que iban a seguir gobernando. Es un documento más importante por lo que no dice que por lo que dice. Quiero dejar clara esa voluntad de Gobierno, no por encima del bien ni del mal, que de eso no se trata, sino de que es el año Dos, como cita el boletín, y que piensan esto va a seguir. ¡Me parece que quienes hicieron posible su publicación fue una gente espectacular!”.

El boletín se presentará el próximo martes en el salón de actos del Archivo Histórico de Euskadi, en Bilbao, en la conferencia Prensa y Guerra, a partir de las 19.00 horas.