XI Festival El Carmen de Santurtzi

Con el verano, llega el sol, la playa y los festivales de ajedrez al aire libre organizados por los clubes. A continuación os paso la información remitida por la Federación de Bizkaia sobre el XI Festival del Carmen en Santurtzi:

• Lugar: Zona peatonal entre Ayuntamiento y la Casa Torre
• Fecha: Sábado 12 de Julio.
• Torneo Escuelas: Contactar con Txema para inscripción.
• Torneo Rápidas: Contactar con Txema para inscripción.

HORARIOS Y ACTIVIDADES:

• Por la mañana de 11:00 a 14:00 horas

– Ajedrez para Todos: Rápidas, Simultaneas, Antiajedrez…. y Escuela.

– Torneo de Rápidas a 5 min. (Trofeos)

– VII Certamen de Pintura y Manualidades «Dale tu toque Ajedrecístico»
(Premios por categorías)
– I Taller de Gomitas Artísticas (Pulseras, Collares, Animales,Ajedrez)
– Ajedrez Gigante para mayores y pequeños.

• Por la tarde de 17:00 a 19:00 horas

– Torneo por Equipos de Escuelas de Ajedrez

– VII Certamen de Pintura y Manualidades «Dale tu toque Ajedrecístico»
(Premios por categorías)
– I Taller de Gomitas Artísticas (Pulseras, Collares, Animales,Ajedrez)
– Ajedrez Gigante para mayores y pequeños.

• Por la tarde a las 20:00 horas

– Entrega de premios de todas las actividades y categorías.

Ataque sobre el peón colgante d6

capablanca

Capablanca – Fonaroff, 1918

Los colgantes son aquellos que sin quedarse retrasados, ni aislados respecto a sus compañeros, tienen difícil su avance y no cuentan con defensa de otro peón. El peón d6 es un habitual por cuanto colega de c suele avanzarse sea a c5 para romper en el centro sea a c6 con idea de buscar salida a la Dama o intentar una ruptura en d5. Cuando aparece el tema, rápidamente las blancas depositan toda su atención en el desdichado punto d6 por medio de varios procedimientos encaminados todos a acrecentar su debilidad. A continuación visionaremos un excelente aprovechamiento del mismo a manos del genial Capablanca.

1. e4 e5 2. Cf3 Cc6 3. d4 d6 4. Cc3 Cf6 5. Ab5 Ad7 6. O-O Ae7 7. Te1 exd4 Por inversión de jugadas tenemos la conocida posición de la Española donde se plantea la Celada de Tarrasch ya comentada en TXIKI XAKE de haber hecho las Negras el rutinario 7…0-0
8. Cxd4 Cxd4 9. Dxd4 Axb5 10. Cxb5 O-O 11. Dc3 c6 Las Blancas despejan la casilla central para la retirada del Caballo provocando un avance de peón que deja colgando d6.
12. Cd4 Cd7 13. Cf5 Af6 La casilla f5 es una de las preferidas de los Caballos en ausencia del Ac8. Desde tan privilegiada posición, los caballos pinchan sobre d6 y traman múltiples pillerias saltarinas en h6.
14. Dg3 Ce5 La dama Blanca se suma a la fiesta contra d6 pinchando a la vez en g7.
15. Af4 Dc7 Observemos la diagonal que va desde g3 hasta c7: hay muchas piezas conectadas por lo que se conoce Rayos X.
16. Tad1 Tad8 Parece que todo se defiende; si las blancas realizan el típico doblaje de Torres, las negras responden con su especular. Pero…
17. Txd6 Txd6 Este es uno de esos casos en que no conviene entrar en la combinación táctica con la pieza que menos vale, porque en este caso ¡No vale!
18. Axe5 Td1 El Alfil clava a la Td6, pero esta se revuelve. No era correcto AxAe5 dado que tras 19 DxAe5 o cae la Td6 o Mate en g7.
19. Txd1 Axe5 20. Ch6 Rh8 Primero el Jaque para ponerlo en posición.
21. Dxe5 Dxe5 22. Cxf7 La amenaza del miserable Mate del Pasillo obliga a las Negras a abandonar.

Este Domingo ¡¡¡Todos a Kabiezes!!!

Muy amablemente, Cabanellas, Presidente del Isas Zaldunak Santurtzi Xake Taldea, nos invita a participar en las actividades que con ocasión de las fiestas de kabiezes su entidad va a organizar este próximo Domingo 29 de junio, de 11:00 a 14:00 horas frente a las txosnas, donde se disputarán 20 simultáneas, un torneo de Antiajedrez y se dispondrán varias mesas para disputar partidas por los aficionados que se acerquen.
El acto cuenta con la colaboración de Kabiezes Jai Batzordea, FVDA, como no podía ser de otra forma en una actividad realizada por voluntarios ajedrecistas, sin más ánimo que la de difundir y fomentar la afición por nuestro juego.

Cómo jugar con los hijos al Ajedrez

En todos los años de docencia, son muchos los padres que se han dirigido a mi con una misma preocupación, a saber: ¿Cómo debo jugar al ajedrez con mi hijo? Cuestión también planteada aquí en el TXIKI XAKE y que ahora, paso humildemente a contestar:
La preocupación paterna que formula la cuestión nace de la disyuntiva desquiciante de averiguar saber qué es mejor para la formación ajedrecística del hijo, encrucijada que se le presenta en forma:
a) Jugar bien contra él, empleando en las partidas nuestra fuerza de juego para que el retoño aprenda por contagio de un juego superior, cosa que puede causarle desánimo por verse siempre derrotado…
b) Dejarse ganar de cuando en cuando para animarle en su progreso aunque ello le pueda satisfacer tan en exceso que pierda el interés por un juego en el que ya gana a su padre.
Bueno, vayamos por partes…
Lo primero que hemos de tener bien presente, es que los niños como mejor aprenden es jugando y con quienes más les gusta jugar en edades tempranas es con sus propios padres. No es malo entonces que los padres jueguen al ajedrez con sus hijos. La cuestión es cómo deben jugar con ellos de modo que no se desanimen dada la diferencia de fuerza, a la vez que se diviertan y aprendan.
Si observamos a la Mamá osa con sus oseznos, dar volteretas con ellos para forjarlos en la lucha, evidenciamos que a nada que se echase encima de ellos los aplastaría, cosa que bien saben la osa y los mismos oseznos a quienes no se les ocurre meterse en circunstancia tan desfavorable con otro ejemplar extraño que no sea su mamá.
Los niños, como no me harto de repetir, pueden ser pequeños, pero no son tontos, al menos antes de sobrepasar tercero de primaria; en consecuencia, bien saben ellos que cuando juegan con sus padres, la circunstancia les es muy favorable en principio, en todos los órdenes del juego, lo que no es óbice para que en su transcurso se combinen derrotas y victorias, sin cuya alternancia no tendría sentido el juego, pues no hay juego divertido sin incertidumbre del resultado o al menos dificultad en obtenerlo.
Curiosamente, los padres no tienen problemas en saber lo que deben hacer a la hora de echar una carrera con sus pequeños: les dan ventaja de salida, ralentizan su marcha, a veces se dejan alcanzar y empatar, hacen como que se caen antes de llegar a la meta…y todo ello provoca gran satisfacción en el renacuajo campeón que sabe que esa victoria sólo la puede obtener contra su padre.
Tampoco los padres suelen plantearse cómo deben jugar al fútbol con sus hijos, cuando a nada que le impriman fuerza al balón, pueden empotrar al pequeño en la portería de un disparo…aquí se dosifica la capacidad propia, se pone cuidado en el contacto, se les ofrece jugar dos contra uno, etc.
El respeto casi reverencial que los ajedrecistas tenemos por el Ajedrez, en ocasiones nos hace perder de vista lo más evidente: El ajedrez, es un juego. Y como tal debe ser jugado entre padres e hijos; porque aunque no lo parezca, el ajedrez como juego tiene más que ver con el divertimento del fútbol que con la inteligencia de las matemáticas.
Son muchas las estratagemas que podemos emplear para jugar al ajedrez con los hijos de modo que sea divertido para todos a la par que instructivo:
1º- Se pueden plantear juegos de superación donde el padre coloca pruebas donde el hijo debe ir superándolas semana a semana por medio de ejercicios de mate, táctica, etc. Conforme los vaya superando va recibiendo premios honoríficos o premios como poderse apuntar con el padre a un Abierto de ajedrez, acudir a una simultánea, ir a un club, comprar un reloj, planillas, etc.
2º- En juegos de enfrentamiento, además de partidas de ajedrez clásicas, puede jugarse con el ajedrez sin jugar al ajedrez como por ejemplo al ¡Come! ¡Come! o ajedrez con dado. En esta modalidad, las derrotas paternas no influyen en el desánimo por el juego de ajedrez dado que no se juega al ajedrez.
3º- Y ya entrando de lleno en lo nuclear de la cuestión, las partidas a disputarse con los hijos pueden ejecutarse del siguiente modo:
-Ofreciendo gran ventaja en las primeras partidas, por ejemplo el padre jugando sin dama ni torres. Hasta que el niño no le gane, no se rebaja la ventaja; luego sólo sin dama, más adelante sólo sin torre, etc.
-Rebajando el nivel propio paterno ofreciendo al hijo posibilidades abundantes de captura de piezas, pues en cada captura de pieza, hay una pequeña victoria para el hijo.
-Dejándose de cuando en cuando un mate gesticulando para que advierta que hay algo en la posición…
-otorgando a sus capturas y sus victorias puntuación triple a la del padre. Con ello, los padres vencerán muchas partidas, pero los hijos tendrán aliciente de lucha.

Dicho todo esto, no es bueno dejarse ganar a la primera de cambio; pero tampoco es bueno ganar siempre; ni jugar lo mejor posible.
Lo primero que debe buscar un padre cuando juega al ajedrez con su hijo, es que éste se divierta. Y nadie se divierte en un juego en el que pierde siempre y menos en uno donde hay tanta diferencia entre los oponentes. El hijo, espera del padre la misma circunstancia favorable que la mamá osa ofrece a sus oseznos, y bien sabe que nadie más se la va a ofrecer. Jugando así con los hijos es como se crea afición.
Espero que estas líneas hayan respondido en alguna medida a la cuestión.

El Ajedrez Gigante

Mi amigo Jose Antonio Pordomingo me hizo esta foto con un Ajedrez en el que no tengo excusa de no ver bien las piezas...
Mi amigo Jose Antonio Pordomingo me hizo esta foto con un Ajedrez en el que no tengo excusa de no ver bien las piezas…

De cuando en cuando, conviene tener programada la irrupción en clase, de algún elemento didáctico que ponga en ¡Jaque! a la monotonía. A tal fin, contamos con innumerables recursos entre los que indudablemente se encuentra para edades prebenjamines, es decir Renacuajos, el Ajedrez Gigante.
El Ajedrez Gigante, por su tamaño inusual, provoca ya una irresistible atracción en los más pequeños y aún en cuantos creen haber dejado de serlo. Un provechoso uso del mismo puede consistir en emplearlo únicamente en ocasiones especiales como fiestas del colegio, última clase antes de Navidad, etc, en enfrentamientos por equipos entre cursos y aulas donde el alumnado de uno y otro bando deben consultar entre si, antes de ejecutar el movimiento en el tablero.
Evidentemente, la efectividad de este tipo de materiales de apoyo reside en su novedad y empleo esporádico por parte del docente, pues a nada que se use dos o tres veces seguidas, pierde toda su gracia.