Larousse-Ajedrez, relación recíproca de prestigio que sin embargo el experto mira con suficiencia prejuiciado de que se trata de un volumen dirigido a legos y profanos con fines de divulgación. Que nadie se dé por aludido en el comentario. Hablo de mi propia primera impresión cuando vi el ejemplar en una librería de Bilbao. Mis manos se dignaron abrirlo al objeto únicamente de confirmar mis sospechas.
Así, como de costumbre, eché un vistazo a su índice y comprobé lo bien estructurado que tiene su contenido: la historia del Ajedrez desde los tiempos antiguos hasta la era contemporánea, el Ajedrez relacionado con la sociedad, el mejor compendio técnico que haya visto reunido en pocas páginas, historia de las competiciones, y finalmente un diccionario de términos y autores. Solo por esto, me di cuenta que ante mi tenía lo que anunciaba una Enciclopedia que evidentemente pocas cosas nuevas me diría que no supiera pero que contenía lo esencial de nuestro juego.
En consecuencia, lo siguiente que hice fue ojear por encima todo el volumen para apreciar si su maquetación iba en consonancia con su buena estructura del contenido. De nuevo, la obra me sorprendió gratamente: primaba el conocimiento apalabrado sobre las ilustraciones cuya finalidad, como debe ser, es únicamente complementaria, los títulos diferenciados en negrita segmentan cada poco el grueso de los párrafos haciendo su lectura y comprensión más sencilla y agradable, visto lo cual, abrí por la mitad de sus páginas y comprobé la calidad de los datos ofrecidos.
Aunque hay muchas formas de contar la historia del ajedrez y se pueden discutir distintos aspectos, cuanto aparece en su interior, es correcto. De su lectura tanto el principiante como el experto pueden hallar pistas y sugerencias suficientes para profundizar posteriormente por su cuenta.
En la relación del Ajedrez con la sociedad introduce al lector en la influencia del juego en la pintura, la música, el cine y hasta la informática y es posible que entre la profusión de datos encuentre más de uno que le sorprenda.
El aparato técnico, el más amplio de todos, ocupa la posición central de la obra; Como he adelantado antes, es muy completo y sirve para entregar un material básico al alumnado cuyos padres deseen saber qué han hecho sus hijos en los dos primeros años de Ajedrez. Por supuesto, con este material no se debe dar clase, pero es un excelente compendio esquemático magníficamente expuesto de todos los temas elementales, tácticos, estratégicos, de nociones como Ahogado, Jaque, Mate, Aperturas… Solo por esto merece la pena adquirir el libro.
En las dos últimas partes, la Enciclopedia nos ofrece resumidas la historia de las competiciones ajedrecísticas y las biografías de los mejores jugadores, así como la reglamentación básica del juego.
Sin dudarlo, después de estar con el más de un cuarto de hora escudriñándolo, me lo llevé a casa, cosa que recomiendo a todos los monitores, bibliotecas y colegios.