Entre las muchas diferencias que en abstracto podemos apuntar entre la táctica y la estrategia, es que en la primera se atiende más al material del juego que al concepto del mismo. Mas en la práctica, hemos de poner en ejerció ambas perspectivas, si bien siempre suele primar una sobre la otra como sucede en los gambitos donde sobresale el componente táctico o en ciertas aperturas de dama donde se favorecen los motivos estratégicos.
Así, cuando en una misma partida y por los dos bandos los temas tácticos se combinan a las mil maravillas con ponderaciones estratégicas de profundísimo calado, el resultado es una obra maestra como la que hoy traemos para ilustrar que, a veces la táctica y su preocupación por el material están en función de conceptos estratégicos, emergiendo entonces los famosos sacrificios de calidad para obtener una mayoría de peones, actividad de piezas, líneas abiertas, iniciativa…
La partida en cuestión, fue bautizada por Kramnik como “Ajedrez del siglo XXIII” por lo que este topillo del tablero, a lo más que se atreverá a comentar de sus movimientos, será precisamente este aspecto reseñado en el título, pues como he dicho, me parece un excelente ejemplo para ello.
Anand – Topalov 2005
1. e4 c5 2. Cf3 d6 3. d4 cd4 4. Cd4 Cf6 5. Cc3 a6 6. Ae3 e6 7. f3 b5 8. g4 h6 9. Dd2 b4 10. Ca4 Cbd7 11. O-O-O Ce5 12. b3 Ad7 13. Cb2 d5 14. Af4 Cf3 Aquí tenemos ya la entrega de una pieza menor por dos peones f3 y e4. Ello obedece a varios temas como son: crear una mayoría de peones centrales libres y pasados; eliminar la estructura dispuesta en formación para el ataque a la bayoneta sobre el enroque corto negro clásico del Ataque Inglés o del Sämisch.
15. Cf3 Ce4 16. Dd4 f6 17. Ad3 Ac5 La última jugada blanca que propicia la respuesta negra fue debida a la comprometida situación de las blancas, de modo que, Anand, haciendo de tripas corazón, imitará a su rival fijándose en asuntos tales como, la mala situación del rey negro en el centro y la entrega de la Dama por dos piezas menores que sumar a la ya capturada en f3.
18. Ae4 Ad4 19. Ag6+ Rf8 20. Td4 a5 Las negras se disponen a romper en a4 para atacar al rey del enroque largo mientras defienden de paso b4.
21. Te1 Ae8 Es preciso eliminar al alfil que mantiene encerrado al Rey.
22. Ch4 e5 23. Td2 a4 La ruptura temática anunciada.
24. ba4 Rg8 Puede parecer que este movimiento es absurdo por dejar encerrada a la Torre; pero esta tiene planes en su propia columna con la ruptura en h5.
25. Ag3 d4 Las negras hacen valer en el centro sus peones libres que ganan espacio y se aproximan al terreno rival.
26. Td3 h5 La ruptura para liberar algo a la Torre de rey.
27. Ae8 De8 28. g5 Tc8 29. g6 Th6 Evidentemente, visto que el cambio gxh daba oxígeno al oponente, antes de colaborar, incrustan un peón en sexta dando relevo del alfil en g6. Pero Topalov tiene los conceptos muy claros…
30. Td4 Tg6 Y entre una torre prisionera y un peón en sexta más un Caballo no duda en entregar la calidad.
31. Cg6 Dg6 32. Td2 Tc3 33. Ted1 Rh7 34. Tb1 Df5 35. Ae1 Ta3 36. Td6 Th3
37. a5 Th2 Las blancas empiezan a mostrar su baza en el flanco de Dama, el peón libre de torre. Las negras despejan el camino a sus peones en el flanco de rey.
38. Tc1 De4 39. a6 Da8 40. Ab4 h4 41. Ac5 h3 42. Cd3 Td2 43. Tb6 h2 44. Cf2 Dd5 Como puede observarse, ambos jugadores trabajan afanosamente en el potencial de sus peones de torre avanzados.
45. Ae3 Te2 46. Tb3 f5 47. a7 Te3 Las negras atendiendo a la peligrosidad de a7 y a sus refuerzo distante del Ae3 opta por sacrificar de nuevo calidad y enfrentar a su Dama con dos torres y caballo, tomando en consideración la fuerza compensatoria de su peón en séptima, la masa de peones libres que posee y la cercanía de su rey a los mismos.
48. Te3 Db7 49. Tb3 Da7 50. Ch1 f4 51. c4 e4 52. c5 e3 53. c6 e2 54. c7 Dc7 55. Tc7 e1-D+
56. Tc1 De4+ 57. Ra1 Dd4+ y unas preciosas y geniales tablas. Por partidas como estas, en ajedrez, es injusta la puntuación 0 -1-3.