El hábito y la costumbre ahorran mucha energía al cerebro en su toma de decisiones al no someterle al estrés continuo de qué debe hacer en cada momento; empero la misma puede ser sumamente perjudicial cuando deviene en rutina. Y no son pocas las ocasiones en que frente al tablero los jugadores movemos rutinariamente las piezas confiados en estar haciendo lo correcto, como si al ajedrez no se pudiera perder jugando bien…
El Plan, es otra forma de ahorrar energía al cerebro, por evitarle la incertidumbre de entender el sentido de cuanto está realizando. Los planes de ajedrez pueden nacer con la apertura: flanco por donde se va a atacar; piezas que conviene cambiar; recursos tácticos que entrarán en juego; estructura de peones que va a quedar para un hipotético final, etc.
En Ajedrez, cuando se enfrentan Plan contra rutina, siempre gana el primero, entre otros motivos, porque los planes suelen contar con el juego rutinario del contrario en su planteamiento óptimo.
Hoy traigo aquí la denominada “Inmortal china” donde las blancas, conocedoras de los movimientos de la Pirc con la que el negro abre su juego, idea un sencillo plan de ataque consistente únicamente en avanzar sus peones a la bayoneta para abrir la columna contra el enroque rival y dar mate. Las negras por su parte, juegan lo de siempre, desarrollan sus piezas de forma ortodoxa, se enrocan y pierden.
Li Wen Che – Donner, Jan Hein
Olimpiada, Buenos Aires 1978
1.e4 d6 2.d4 Cf6 3.Cc3 g6 4.Ae2 Ag7 Con su cuarto movimiento, las blancas dan muestras de sus intenciones. Aparentemente es una jugada inocua; pero la salida Ae2, no es casual, protegiendo g4 y h5 para evitar “Maniobras Tapón” del oponente.
5.g4 h6 6.h3 c5 La sexta jugada blanca es para despistar. Las negras realizan el plan ortodoxo de la Pirc reaccionando en c5.
7.d5 0–0 8.h4 e6 Una vez enrocado el rival, ya se puede enseñar el juego completo. Las negras reaccionan en el centro.
9.g5 hxg5 10.hxg5 Ce8 Jugar aperturas o defensas con fiancheto supone estar al tanto de sus inconvenientes, contándose entre ellos haber debilitado la formación de peones, pues al adelantar las lineas, hemos facilitado un tiempo la ruptura al contrario. Y aquí tenemos que las blancas ya cuentan con su chimenea abierta.
11.Dd3 exd5 La dama se dispone a circular por el pasillo horizontal hacia la chimenea. Las negras impiden de momento Dh3
12.Cxd5 Cc6 13.Dg3 Ae6 La dama blanca tiene claro que su fin es situarse en la columna h.
14.Dh4 f5 Las negras deben abrirse de par en par para evitar el mate.
15.Dh7+ Rf7 Parece que las negras se salvan. Pero están perdidas.
16.Dxg6+ Rxg6 17.Ah5+ Rh7 18.Af7+ Ah6 19.g6+ Rg7 20.Axh6+ De hecho, estaban perdidas desde que un plan jugaba contra la rutina.