Cursaba 4º de EGB en Las Carreras. Un Viernes, el Director nos llevó en horario lectivo a Gallarta a disputar un encuentro del Campeonato por Equipos Escolar. Fue la primera vez que pisé un club de Ajedrez. Y fue allí, donde también conocí por primera vez al genio y figura que es Eduardo Quintana a quien me une un sentimiento mutuo de afecto y reconocimiento sin que nos hayamos hecho favor alguno.
Por supuesto, de tan niño, sólo era consciente de que aquel señor tan simpático, a la sazón Presidente de Club y Concejal de deportes, que nos enseñaba celadas ¡casi sin querer! cuyos comentarios hacían del ajedrez algo más divertido de lo que ya era, estaba inculcando por ósmosis en mi, un modelo de conducta, cuál es, el de transmitir la ilusión de jugar al ajedrez con gracia y dedicación que todavía perdura.
Y es que, si no fuera por personajes como Eduardo Quintana, sin miedo a que sus futuros rivales aprendan de ellos, ¿por qué alguien tan competitivo como era yo algún día se me iría a ocurrir enseñar a otros con el evidente riesgo que en una disciplina ello supone para quien aún se halla en ejercicio de sus facultades?
En mi humilde reconocimiento a su labor y lo que su ejemplo ha sido para mi trayectoria como entrenador, he escogido su caso como el primero para abrir esta sección de entrevistas a personas que lo han dado todo por difundir nuestro juego-deporte-ciencia-arte y religión.
-Nicola: Bueno Quintana, por ti no pasan los años, siempre te veo igual, en el mismo lugar o sea en Gallarta y haciendo lo mismo trabajando por y para el ajedrez. ¿Se puede saber desde cuándo juegas?
-Quintana: ¡Huyyy! Desde que aprendí a hablar. Casi no me recuerdo sin saber jugar al ajedrez. Ahora tengo 71 años ¡Échale cuentas!
-Nicola: Veo que sigues jugando a rápidas, por equipos, organizando, arbitrando, el otro día te pille dando clases a críos…¿Qué no has sido en el maravilloso mundo de las 64 casillas?
-Quintana: ¡Campeón! Jajajaja
-Nicola: ¿De dónde sacas la energía? Porque supongo que a lo largo de todos estos años te llevarías además de alegrías, muchas decepciones con gente, con circunstancias, cosas que suelen quemar bastante.
-Quintana: ¡Ni que lo digas! Pero prefiero recordar lo bueno que lo ha habido y olvidar lo malo. El ajedrez me encanta y me lo paso bien. De ahí saco mis fuerzas; de la afición.
-Nicola: Bueno, para terminar, dices que personalmente no has sido campeón, pero en tu haber tienes varios logros como haber dirigido un club varias décadas, haber hecho torneos, crear escuela de chavales…en todos estos años has cosechado varios éxitos deportivos para Gallarta. Si tuvieras que citar uno sólo, ¿por cuál te decidirías?
-Quintana: Pues, quizá, por quedar Campeón de Euskadi Infantil por Equipos con la Ikastola Etorkisuna.
-Nicola: Me alegro de volver a verte tan bien y haber si repetimos la entrevista dentro de 50 años.