Mitología del Ajedrez, de Francesc Ll. Cardona

El título no se corresponde con el contenido. Lo más apropiado hubiera sido “Miscelánea Ajedrecística” porque en su interior hay un poco de todo: Origen del Ajedrez, Personajes históricos que amaron el juego, anécdotas y curiosidades, el Ajedrez en las Artes y las Ciencias…todo muy bien redactado, con un lenguaje accesible, es posible que muy segmentado y un tanto deshilachado en su confección de conjunto para mi gusto, pero sin ningún error como corresponde al rango de Catedrático del autor. Son muchos los datos y referencias que el monitor puede entresacar de entre sus páginas para aderezar de cuando en cuando sus clases, como por ejemplo, la primera partida disputada en el espacio o un encuentro de Napoleón contra uno de sus mariscales. De su abundante información contrastada, más de una vez este TXIKI XAKE dará buena cuenta.

2 comentarios en «Mitología del Ajedrez, de Francesc Ll. Cardona»

  1. En serio? Este libro tiene más errores que páginas, y no exagero. El autor será catedrático, pero de ajedrez no tiene ni repajolera idea.

    1. Amigo JF, publico tu mensaje con reparo porque no es de mi agrado poner a caldo a alguien que no puede defenderse; pero tratándose de un autor y una obra, es correcto permitir la crítica. Es entonces que asumo la defensa de texto y autor.
      No dudo que la obra tenga errores; cualquier autor que lo sea sabe que las primeras ediciones estos arroes tipográficos, ortográficos y demás travesuras de los duendes de imprenta son habituales. Supongo que no serán estos los errores a los que te refieres al echar por tierra el encomiable trabajo de este autor, porque de ser así, quien está en un crasso error sería el crítico y no el criticado, pues sucedería aquello de que mientras el poeta con su dedo apunta a la luna, el tonto se queda mirando al dedo.
      Por consiguiente, dado que hablas de múltiples errores de mitología, literatura, historia y ajedrez, espero con impaciencia nos ilustres con tu erudición y los indiques adecuadamente o en su defecto hagas un acto de contricción.

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