Celada del invitado

En mi superventas  APRENDE A HACER TRAMPAS AL AJEDREZ publicado por Chessy,, denomino “Celada del Invitado” a aquellas trampas consistentes en invitar al oponente bien a realizar una “Falsa clavada”, bien a aprovecharse de ella. El caso más famoso y efectivo de Celada del invitado lo presenta el Mate Legal; empero, una miniatura que ilustra como ninguna otra la pillería de esta estrategia lo representa la siguiente filigrana de la que deben tomar buena nota los jugadores de sicilianas.

Suetin, A. – Travnicek, P. Olomouc, 1975
1 e4 c5, 2 Cf3 d6; 3 c3 Cc6; 4 d4 Ag4 Aquí tenemos al alfil invitado para ejecutar su Falsa clavada.
5 d5 Ce5 Y aquí tenemos a un segundo invitado para aprovecharse de la Falsa clavada.
6 CxC AxD; 7 Ab5+ Y negras abandonan.

Celada del Tiovivo

He decidido bautizar como “Celada del Tiovivo” a toda aquella celada en la que un Caballo en la Columna c o f atacado por un Alfil, obtiene una ganancia gracias a un recorrido circular por su similitud a las vueltas que dan los caballitos de feria en un carrusel. Veamos un caso claro de esta trampa:

1 e4 e6; 2 d4 d5 3 e5 c5 Aquí tenemos planteada la variante del Avance de la Defensa Francesa.
4 c3 Cc6 Las blancas defienden su vanguardia de e5, mientras las negras atacan su retaguardia o base de peón.
5 Ab5 Ad7 Las blancas clavan al Caballo negro que incordia sobre d4. Y las negras tienden una sutil trampa.
6 Cf3 Cxd5 Las blancas, mueven de modo rutinario, cayendo así en la celada del Tiovivo. Las negras se permiten el lujo de tomar en e5 porque en caso de 7 CxC o dxC, viene AxA; y de decantarse por 7AxA+, entonces el caballo vuelve a saltar, esta vez hacia atrás con CxA dando una vueltecita con peón de más.

Veamos otro caso

1 d4 d6 2 c4 e5 Aquí tenemos planteado un esquema que conduce a la India Antigua. Su idea es eliminar Damas creando una posición semicerrada con una columna abierta que hará de desfiladero por donde cambiar las piezas mayores y obtener buenas perspectivas de tablas tras la simplificación.
3 d5 Cf6 Las blancas avanzan su peón con ánimo de evitar las simplificaciones y ganar espacio.
4 Ag5 Ae7 El primer bando realiza la clavada de rigor y las negras tienden la celada.
5 Cc3 Cxd5 Las blancas jugaron con idea de subir e4 cayendo así en el Tiovivo.

Esta celada que aparece con frecuencia en variantes de apertura donde hay un peón avanzado en quinta y con mayor frecuencia en el Medio Juego, no debe ser confundido con la Puerta Giratoria o Molinillo cuyo intríngulis tiene que ver con la ganancia por Jaque a la descubierta.

Mate de los Guardamarinas

guardamarinas3

El Mate de los Guardamarinas recibe su nombre de una opereta “El guardamarina” en cuyo trascurso se representa una partida viviente que termina con este vistoso mate.

 
El principio en el que se fundamenta, es el mismo que el empleado en el Mate Legal, a saber: el Principio Glotón del rival alimentado por una Falsa Clavada, solo que en esta ocasión, en vez de ser un alfil con dos caballos los que dan el mate, es un caballo con dos alfiles los que intervienen en el proceso.

 
1 e4 e5; 2 Cf3 Cf6; 3 Cxe4 Cc6; Aquí lo mejor suele ser contestar 3…d6 y luego recuperar el peón en e4. En consecuencia, avisadas están las blancas sobre las intenciones pillinas del rival, si este continua por este derrotero.

 
4 CxC dxC; 5 d3 Ac5; 6 Ag5. Hemos aquí la clavada que se nos va de la mano. 6…Cxe4; Y aquí tenemos su castigo.

 
7 AxD Axf2+; Era mejor no haber tomado la dama; pero quién se resiste la primera vez….

 
8 Re2 Ag4++

El cazador cazado. Celada

La Celada “El Cazador cazado” aparece en el Gambito Dama. Es fácil caer en ella de no estar sobre aviso.
1 d4-d5; 2 c4-e6; Aunque defendido por la Dama, las negras con buen criterio prefieren que un peón proteja a otro peón, además de permitir el desarrollo del Alfil de Rey.
3 Cc3; Las blancas echan más leña al fuego presionando con dos piezas sobre d5. Y aunque la Ley de la Táctica le dice a las negras que no hay motivo de preocupación dado que dos piezas como c4 y Cc3 no son suficientes para salir airosas contra dos piezas que defienden d5 como son e6 y Dd8, tampoco está de más sumar apoyos mientras desarrollamos pieza.
3…-Cf6; Ahora atacan dos y defienden tres.
Las blancas, igualmente con buen criterio, insisten sobre el tema, esta vez de modo indirecto mediante la clavada del Caballo con un clásico 4 Ag5;
Las negras saben, que todavía su peón de d5 está a salvo. Las blancas también conocen la Ley de la táctica antedicha, pero piensan “ si las negras se descuidan, primero tomo el Caballo de f6 y si toma con Dama entonces me llevo un peón gratis y si se da cuenta y come con peón de g7, entonces le he destruido el enroque, le he doblado peones en f6 y f7 y además se los dejo aislados tras cambiar en el centro con cxd5”. ¡No está mal pensado!
Pero pensar mucho mientras le toca jugar al contrario, tiene sus inconvenientes, entre otros, calcular con un movimiento de menos.
Las negras conocedoras de los ojos golosillos que se le ponen al adeversario en esta posición, desliza la pillina y aparentemente “mala” 4…-Cbd7; recordemos:
1 d4-d5; 2 c4-e6; 3 Cc3-Cf6; 4 Ag5-Cbd7; los hay que incluso hacen una mueca como de haberse equivocado…
Las blancas ahora se llevan una gran ilusión, que le convertirá en un iluso. “¡Que bien! ¡Se dejan el peón! ¡Menudo pichón!” Etc. Ciertamente, atendiendo únicamente a la Ley de la Táctica, la salida Cbd7 al cruzarse entre la Dama y el peón d5, le resta a éste una defensa: las blancas atacan con dos a d5, con c4 y Cc3, mientras ahora las negras sólo lo defienden aparentemente con uno e6.
Y allá van las blancas en su espíritu de Glotónidas y juegan de seguido:
5 cxd5-exd5; y 6 Cxd5?? ¡Error garrafal!
Es verdad que el Ag5 está clavando al Cf6, pero hay una gran diferencia entre la clavada Absoluta a un Rey y otra relativa a la Dama. Veamos qué sucede:
Las negras para sorpresa del blanco, realizan 6…-CxC.
Huelga comentar la celeridad con que las blancas capturan la Dama negra 7 AxD; con la misma rapidez que las negras les arrean un 7…-Ab4+ que les hunde en la más absoluta de las miserias y hasta puede que les entre un calor y un sonrojo como nunca antes habían sentido ante el tablero.
Tras la forzada 8 Dd2-AxD+; 9 RxA-RxA; las negras tienen pieza de más. De ahí el nombre con el cual he bautizado la Celada.