Se me acaban los adjetivos positivos cuando hablo del Athletic femenino.
En el segundo tiempo, inicialmente el Atlético intentó dar un paso al frente, lógico si quería conseguir algo. Pero un Athletic muy serio (sólo lleva cuatro goles en contra) se lo impidió. Además Yulema volvó a aumentar el marcador tras desmarque y pases perfectos.
No sabemos cuál puede ser el límite de las rojiblancas este año. Su momento de forma es excepcional, a pesar de los pesares, que viene en forma de lesiones. Más que lesiones parece una plaga. Lesiones además graves, con varias roturas de cruzados de por medio (la última la de Nekane máxima goleadora del equipo) y meniscos tocados. Aparte de las lesiones musculares. Un ejemplo el partido del domingo. Erika salió del campo cojeando y agarrándose el muslo y en su lugar salió Joana Flaviano, que tras seis o siete minutos en el campo se tiró al suelo casi llorando porque sabía que se había vuelto a romper. Parece que es muscular también. A ver si vuelven pronto. Pero lo dicho, las que están subiendo del segundo equipo lo están haciendo bien y que sigan así, porque a este paso va a tener que jugar el utillero.
Con estos nuevos tres puntos (era su décima victoria consecutiva) siguen encabezando la clasificación, con ahora el Barcelona detrás a 4 puntos de distancia, mientras que las colchoneras se han ido a 6.
¡Aúpa neskak y a por el siguiente partido!