Ayer por la mañana en Badajoz el Athletic femenino consiguió tres puntos muy trabajados. Las lesiones, las rotaciones obligadas por el importante partido que tienen que jugar el miércoles en Champions League y quizá también el campo de hierba artificial consiguieron que el Athletic tuviese problemas para hacerse con los tres puntos disputados contra el Santa Teresa. Las pacenses consiguieron adelantarse muy pronto en el marcador gracias a un despeje defectuoso de Ainhoa Vicente, que convirtió en oro Mireya, asistiendo a Chica para que ésta marcara.
A partir de ahí en Santa Teresa se convirtió en un frontón, mientras que nuestras jugadoras a pesar de tener el control del balón y del juego no conseguían crear jugadas de peligro, seguramente porque abusaron un poco del juego en largo. En el segundo tiempo la tónica fue similar pero los cambios introducidos por Joseba Aguirre surtieron el efecto deseado. Con Erika y Yulema en el campo, las rojiblancas crearon más peligro llegando el gol del empate por medio de un cabezazo de Lucía García a pase de Iraia, a falta de 20 minutos para acabar el partido. El Athletic siguió a lo suyo hasta que otra preciosa jugada entre Erika y Nekane acabó con el balón en la red tras un potentísimo disparo de la segunda. No podía ser de otra forma ya que la portera contraria, la francesa Emmeline Mainguy, demostró que para batirla hacía falta algo más que un buen disparo. Y Nekane lo hizo, primero con su desmarque y después con su tiro.
Culminando así una excepcional semana para las chicas, qué ahora lo tienen que dar todo este miércoles en Dinamarca, para conseguir pasar a los octavos de final de la Champions League, derrotando al Fortuna Hjorring. Difícil será, pero sabemos que no se van a dejar ni una gota de esfuerzo por conseguirlo.
¡Aurrera neskak y a por las danesas!