Primer partido que gana el Sevilla fuera de casa. Si es que…
Poned lo que queráis en los puntos suspensivos porque casi no tengo ganas ni de escribir.
Y ahí, se acabó el partido. Cuando mejor se estaba jugando se dio alas a los sevillanos, y casi desaparecimos. El dominio pasó a ellos, por mucho que diga Valverde que no fue para tanto. Que el equipo mereció más. Quizá en el primer tiempo, pero a partir del error de Iker… agur. El equipo se puso nerviosísimo y se fallaron muchos más pases, que antes. En la grada comentábamos que si no se podía ganar, que era evidente, no podías dejar que te metiesen el segundo. Pero… lo que se veía venir, ocurrió. Nos pillaron en una contra y 1 a 2 para ellos. Incluso nos podían haber metido alguna otra. Iago también dijo a la radio que el Athletic mereció más. Suelo coincidir con ellos… pero en este caso no. El Sevilla ayer fue justo vencedor.
Y para no acabar con tal mal sabor de boca, voy a destacar a Iago, que en el primer tiempo volvió a mantener al equipo en el partido con dos paradas muy muy buenas. Y vaya jugada de Iñigo Lekue, otra vez. Pide más minutos a gritos.
Y ahora a jugar en Liga contra el Rayo, que casi es un estorbo. Estorbo que los jugadores no se pueden tomar como tal, porque la Liga no se puede descuidar. Además, ya se ha fallado todo lo que se tenía que fallar en estos últimos partidos. El domingo no toca.
¡A por el Rayo y aúpa Athletic! Y por supuesto,… ¡Ánimo Muni!