Se me está haciendo bastante largo esto de la espera para la final, y lo que nos queda…
Únicos en el mundo (Foto: Athletic Club)
He pasado de la euforia por la clasificación inicial, a la alegría por conseguir una entrada, y en este momento al hartazgo por alguna que otra cuestión.
Ya sé que me ha tocado la entrada y no debería protestar porque infinidad de athleticzales darían lo que fuese por estar en mi lugar, pero dejadme que patalee un rato contra la Federación Española de Fútbol, la que encantada de haberse conocido y de pillar unos primos que no tienen más remedio que pasar por el aro, va a hacer caja de manera exagerada. Para empezar, han enviado la final, por lo que todo el mundo dice, a un campo que, al utilizarse entre poco y nada, no debe estar en muy buenas condiciones y cuya visibilidad debe dejar bastante que desear. De hecho, se venden entradas de baja visibilidad, de entre 40 y 85 euros, que es parecido a ver un partido detrás de una tapia. Fenomenal. Es un campo con pista de atletismo alrededor, por lo que el juego está bastante lejos de los aficionados. Amén, de que está en la otra punta de España, con respecto a nosotros. Encima no tiene un gran aforo. Vamos… como veis son todo ventajas. Eso sí, habrá que confirmar con las investigaciones policiales actuales abiertas, quiénes son los que se han beneficiado con semejante despropósito. Porque seguro que alguno lo ha hecho. ¿No sería más lógico celebrarlo en un campo de más localidades y más cercano a todo el mundo?, es decir, en el Bernabeu, por poner un ejemplo.
Luego está el sistema de venta de entradas, todo on line, y que no exista la entrada física, en papel, de toda la vida. El inconveniente de sacarla así, y de que te la activen solo 4 horas antes del partido, que te tengas que bajar la app de la Federación y que por sacar las entradas, que ya son lo suficientemente caras, tengas que pagar 5 o 4 euros por gastos de gestión. Con la bobada se sacan un pico. Seguro que alguien sale beneficiado de esto, y por supuesto no somos los aficionados. ¿Aguantará la batería del móvil todo el día para poder pasar por el torno la entrada? Encima en el campo no dejan entrar cargadores de batería, y tampoco mochilas más grandes de 25 por 25, cuando mucha gente tras el partido se volverá a su casa… Todo muy sencillo. Dentro de un rato voy a sacar la entrada, y me he tenido que leer una tesis doctoral para saber cómo hacerlo. Y cuando eliges una zona, la misma aplicación decide en qué fila, sin saber si hay otras más bajas, más altas, o más centradas. Vamos, que luego voy a hacer un acto de fe, en vez de elegir un sitio. Así que rezaremos para que el acto de fe sea para bien, porque teniendo en cuenta la clavada que nos van a dar, mejor que luego se vea algo. Edito para informar que acabo de sacarlas y por si le pasa a alguien, que ya sé que sí, que sepáis que al meter mis datos como cabeza del grupo me decía todo el rato, que mi código o pin eran incorrectos. Desesperante. Vuelta a confirmar, vuelta a meter mis datos, y vuelta la burra al trigo, que los datos eran incorrectos (sabía perfectamente que estaban bien). Y así bastante rato, hasta que se me ha ocurrido pasar de lo de datos incorrectos y he seguido la compra,… con los supuestos datos incorrectos,… pues bien… me ha dejado. Lo he comentado en un foro y me han dicho que ayer pasó lo mismo y la gente llamó al Club, y les dijeron que era un error (de la app) y que se intentaría subsanar (jejeje). No se ha subsanado. Con los nervios que supone, por lo menos a mí, que odio pegarme con internet. Y en el intervalo, mientras elegía y no me dejaba, una vez la maquinita ha decidido colocarme a la derecha del campo, pero en la siguiente, ha decidido que mejor a la izquierda. Odio que decidan por mí, sobre todo teniendo en cuenta que no me sale precisamente gratis. Por la fila que es y donde está, ahora mismo me voy a comprar unos catalejos, o mejor un telescopio. ¿Me dejarán entrar en el campo con él?
Voy a seguir un poco en plan perro pulgoso, para añadir mi sorpresa con todo el tema de la gabarra. Además de que me da mal fario hablar de ella antes de jugar, ya que va a ser un partido difícil , en el que pueden pasar mil cosas y no todos tienen porque ser buenas para nosotros… Encima, si es que ganamos, ¡ojalá!, si por fin sale la gabarra, se va a cobrar un dineral a los que quieran celebrarlo desde la ría. Los precios que han trascendido, según el tamaño de las embarcaciones van entre los 500 y los 3000 euros y si se lleva publicidad, 5000. Más, entre 100 y 200 euros por persona. ¡Madre mía! Cuando lo escuché lo primero que pensé fue que el Puerto quería hacer caja con el Athletic, lo que me pareció mal. Pero la Autoridad Portuaria se ha desmarcado y ha dicho que no tiene nada que ver ni con los precios ni con la idea de cobrar, que es todo cosa del Club organizador. Todo lo sacó de la noticia dada por EITB, cuyo enlace os adjunto por si queréis leerlo. Me asaltan dudas: ¿La ría se puede alquilar? Una entidad como el Athletic puede cobrar por su uso? ¿La autoridad Portuaria no tiene nada que decir? Alucinada estoy. Creo que la noticia se comenta por sí sola, y seguro que entendéis que me haya puesto un poco en plan perro pulgoso.
Pero no todo va a ser malo, también hay un montón de cosas alrededor de la Final que son bonitas. Como ver cada vez más engalanada Bilbao, con ventanas, balcones, tiendas, y demás… rojiblancas. Como poder disfrutar la bilbainada de la decoración de la estación de metro de la Plaza Moyúa.
Porque es una bilbainada, pero ha quedado preciosa. Ver más camiseta rojiblancas de lo normal por la calle y, sobre todo, a un montón de niños pequeños que la llevan orgullosos. Una gozada. Escuchar a la Bilbao Orkestra Sinfonikoa (BOS) cantando el himno del Athletic, en una nueva versión. (Que aquí os dejo también si clickáis). Ver a una coreana, de Corea del Sur, jejeje, que ha fundado una peña allí, animando al equipo ante la final… (El enlace aquí) Muchas locuras, bonitas locuras, que hacen a este equipo distinto, ganemos o no. Aunque los profanos nos miren como si estuviésemos locos, es una gozada pertenecer a esta locura colectiva. Bendita locura.
Estación de metro, Moyúa
Y antes de llegar a la final, nos queda el partido de este fin de semana, contra el Real Madrid en el Bernabeu. Pereza no, lo siguiente. Y menos mal que no nos tenemos que enfrentar al lacrimógeno Vinicius Junior, que el otro día interpretó una escenita, para delicia de los medios madridistas, que mereció, qué menos que un par de Oscars. Ya lo he dicho más veces, pero lo repito ahora: que no, que el problema de Vinicius no es que sea negro, o de color, si es mejor decirlo así. El problema es que es un provocador, que ayer mismo, en el España – Brasil, actuó como él sabe, pegando por la espalda a Laporte un golpe con el brazo, sin mediar palabra. Aquí se le ve en un vídeo en un tweet de Marc Martínez. Pero por la espalda, como los cobardes. Tiene un problema pero no con la piel, sino en su cabeza, y es que no es el más listo de la clase, pero que como encima tiene un altavoz «asqueroso’ en esos medios de comunicación afines al coloso blanco… pues ¡qué más quiere! Eso sí, a ver cuánto tarda el madridismo en ponerle a parir, o porque deja de jugar con ellos, o porque se quitan la venda de los ojos. A los demás no nos engaña. Y como prueba, todo el resto de jugadores del Real Madrid, que tienen su mismo color de piel, que son un montón, y no sufren la «persecución» que dicen que sufre «Vini». Lamentable. Lo dicho. Menos mal que nos ahorramos el mal trago de verle en el campo porque le sacaron el partido anterior la tarjeta que se lo impide. Un osado árbitro, supongo que hasta el moño del nene, a la enésima protesta no tuvo más remedio que hacerlo. En fin… Y nosotros jugaremos contra ellos el domingo, no sé si con la unidad B, o la H, o la A. Miedo me da, porque suele haber consecuencias posteriores tras jugar contra este equipo. Espero que está vez no. Salgan los jugadores que salgan al campo, ¡a por el Real Madrid! Y…
¡Aúpa Athletic!