¡San Mamés decidira la previa!

Tras unas merecidas vacaciones que me he tomado vuelvo al blog justo para comentar la previa de la Champions, una de las cosas más importante que nos ha ocurrido en mucho tiempo. El éxito de la Liga pasada con la consecución del cuarto puesto, impensable para cualquiera al comenzar la misma, hay que refrendarlo ahora. Y el Athletic ha dado el primer paso. Un paso importante porque el empate a uno logrado en Italia siempre es bueno, ya que les obliga a ellos a marcar. Era lo que a priori quería Valverde, marcar un gol, y lo que queríamos todos.

Iker, determinante (Foto: Athletic Club)
Iker, determinante (Foto: Athletic Club)

El partido tuvo de todo. Vaivenes lógicos de un inicio de temporada, a pesar de lo que está en juego, o precisamente por ello. En los primeros seis minutos el Nápoles nos metió miedo hasta en tres ocasiones, pero su falta de puntería permitió al Athletic situarse en el campo, sin goles en contra y quizá tranquilizarse. Se sacudió el nervio inicial y comenzó a mandar. Parecía que veían que el Nápoles podía ser dominado. A ello se unió la preciosa internada de De Marcos que dejando un balón perfecto a Muniain, permitió gracias a la tranquilidad de Iker que el Athletic se adelantase en el marcador, consiguiendo lo deseado por todos. Iker hasta ese momento estaba perdiendo la mayoría de balones que tocaba pero… en el momento fundamental, fue capaz de colocar el balón fuera del alcance del guardameta. Perfecto. 0-1.

Una pena que el Athletic no supiese matar el partido porque en el inicio del segundo tiempo también estuvo mandón no dejando al Napolés ni respirar. La aparición de Mertens, revolucionó a los napolitanos y una de las bestias negras del Athletic, «El Pipita», se inventó una jugada que supuso el empate. Higuain, siempre Higuain. A partir de ahí y de nuevo apoyados en un Mertens inspiradísimo el Athletic se vio superado, sobretodo por banda izquierda, donde a De Marcos se le notaba que defender quizá no sea su mejor virtud (de momento). Gracias a Iraizoz (sobre todo a una mano increíble que saca, de nuevo ante Higuain) nos mantuvimos en el partido y los chicos se traen para casa un resultado buenísimo que todos hubiésemos firmado antes de jugar.

Ahora a por el Málaga y a preparar para la vuelta La Catedral, que el Nápoles no lo va a poner nada nada fácil. Pero… el premio es demasiado goloso para desperdiciarlo… ¡¡¡¡A POR LA CHAMPIONS!!!!