No sé de dónde le salió la fuerza al Athletic ayer en Málaga. Las bajas eran importantísimas y los cambios en el equipo notorios. A pesar de eso, el equipo con una fe y una entrega absolutas consiguió los tres puntos que son más que puntos porque son un empujón enorme de moral, frente al varapalo de la eliminación de la Europa League el jueves. En la alineación hubo muchos cambios con respecto a lo que se puede considerar el equipo titular. Cambios algunos obligados por lesiones y otros por la necesidad de dar descanso tras la paliza del partido con prórroga y penaltis de 60 horas antes. Entraron Gurpegi, Iturraspe, Rico, Iñigo Lekue, y sobre todo Viguera. Digo sobre todo porque el riojano llevaba sólo 53 minutos en Liga, en 5 partidos…, por supuesto ninguno como titular,… vamos… eso y nada viene a ser lo mismo. Si esto fuese poco, San José tuvo que jugar en el centro de la defensa, es decir, fuera de su habitat natural este año. Las horas de descanso entre los partidos ya he dicho que solo eran 60. Un cúmulo de circunstancias que seguro que nos hacían firmar a todos un empate al empezar a disputar el encuentro. Yo desde luego sí. Mujer de poca fe. Además tenemos que añadir que el Málaga tenía alguna pequeña posibilidad de poder conseguir el séptimo puesto. De hecho salieron con el cuchillo entre los dientes. El primer tiempo fue agotador de ver, por el modo que tuvieron de correr y presionar los dos equipos. En el segundo se bajó un poco el ritmo, porque lo contrario era imposible que ocurriese, pero siguieron matándose en las disputas. Un ritmo frenético difícil de seguir y más si dos días antes has tenido que jugar una eliminatoria de 120 minutos. Eliminatoria que encima perdiste. Pero este Athletic es todo corazón y alma y consiguió una victoria de enorme mérito.
En ambos tiempos el equipo que más oportunidades tuvo fue el malacitano pero como Iraizoz también juega, desbarató todo lo que se acercó por su área con una solvencia de admirar. Segundo partidazo seguido que hace. Fue el mejor de los dos equipos de largo. Algunos me dirán que es su trabajo… Sí, claro. Pero es que lo volvió a bordar. Hizo cinco paradas de muchísimo mérito. Los tres puntos son prácticamente de él. Otro de los destacados fue Raúl García. Lo que este jugador da al equipo es una barbaridad. Trabaja sin descanso, está en todos los lados, apoya siempre a los compañeros, incordia a los contrarios, da una cantidad de juego increíble, pases al hueco, de gol, pases para desahogar si es necesario, mantiene el balón si se va ganando y encima… es goleador. Fundamental. Se notó cuando estuvo lesionado y su vuelta le ha dado un plus al equipo y hace que el hueco enorme que deja Aritz Aduriz con su lesión se note menos. Ayer metió su octavo gol en la temporada, ahí es nada. Balenziaga este año me está sorprendiendo gratamente porque a lo tonto se ha hecho con el puesto y ha pasado a ser uno de los indiscutibles. Su despliegue físico es extratosférico. No deja de subir y bajar la banda ni un minuto. También quiero mencionar a Iturraspe, al que este año no le están saliendo las cosas bien, pero que ayer sí que se dejó notar, igual que el jueves. Tiene muy pocos minutos en Liga pero lo hizo bien. Mikel Rico igual. Borja Viguera merece mención aparte. Con los minutos que llevaba diría casi que ayer debutó en Liga, en la jornada 32, casi cuando se está acabando. A pesar de ello, se dejó ver. No voy a decir que hizo un partido excelente pero sí que participó y tuvo alguna oportunidad. La primera combinando con Raúl y haciendo un recorte al defensa, pero no definiendo bien. Otra de nuevo a pase de Raúl, pero se acabó escorando demasiado. La ocasión más clara de gol de nuestros jugadores la tuvo Iñigo Lekue y el pase vino de Borja desde prácticamente el corner contrario. En el segundo tiempo alargó muchos balones, y consiguió bajar otros para sus compañeros. Poco antes de acabar el encuentro tuvo dos oportunidades. En la primera, tiró pero al cuerpo del portero y en la segunda decidió pasar, pero De Marcos no se lo esperaba. Una pena. A falta de todos los delanteros que tenemos Borja Viguera ha demostrado que puede aportar. Le puede faltar ritmo, pero es que lo contrario sería un milagro. Pero repito para lo que ha jugado, considero que lo hizo bien.
Para acabar destacar el resto de marcadores de la jornada, todos favorables: empates del Celta y Sevilla y derrota del Villarreal. De este modo estamos en quinta posición, con el Celta a un punto y el Sevilla a cinco. Y ahora el miércoles casi sin poder respirar viene a La Catedral el Atlético de Madrid que quiere el liderato en solitario (está empatado a puntos con el Barça). Muy difícil, pero ellos llevan encima casi tantos minutos como nosotros y, encima, tienen en contra el factor campo, y sobre todo, el alma y la fuerza zurigorri.
¡A por ellos y Aúpa Athletic!
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Muy orgullosa del Athletic pero agur Europa League
Ayer me decían que era una resultadista porque había comentado que prefería no jugar nada y ganar el partido que al revés. Pues bien… ayer jugamos muy bien. Fenomenal. Estoy super orgullosa, como lo estuve en la Copa cuando jugamos con el Barcelona en su campo. Muy orgullosa, pero en ambas competiciones nos hemos ido para casa. Agur Copa en su día y agur Europa League ayer. Sí, hinchada pensando que jugamos mejor que el Sevilla. Que les conseguimos ganar en su campo. Que durante la prórroga estuvieron el sevillismo, sus jugadores, el entrenador, Emery,… aterrorizados esperando llegar a los penaltis. Quizá ellos sabían de su flor. Sabían que esa suerte que están teniendo en esta competición no se podía acabar. Efectivamente. Los penaltis nos vuelven a mandar para casa. Los penaltis pero porque no conseguimos hacer los deberes antes. Y en el caso de ayer, sobre todo porque Markel no consiguió hacer lo que parecía más fácil. Lo dicho, parecía. Susaeta tuvo la eliminatoria en esa jugada. Se escapó pegada a la cepa del poste. Como Muniain la tuvo en San Mamés, en este caso al revés, regalando al delantero hispalense el balón y la remontada. En fin, odio los penaltis. Y la máxima que dice que el que mejor juega durante los noventa minutos es el que lo falla, ha vuelto a darse. El mejor con mucha diferencia Beñat, falló el suyo. Bueno, o lo paró Soria, qué por cierto,… mérito tiene el Sevilla si con este portero ha llegado hasta semifinales. Hablando de porteros, otro partidazo de Iago Herrerín (pena la lotería de los penaltis). El Athletic mereció más pero esta competición nos debe algo y esta vez nos la ha vuelto a jugar. No importa. Orgullosos nos levantaremos. Nos volveremos a caer, pero de ahí de nuevo iremos hacia arriba. Los palos han sido gordos pero hay que luchar por lo siguiente.
Lucha que empieza este mismo domingo a las 12 del mediodía contra el Malaga en su campo. No sé si Valverde me va a tener que convocar a mí, porque también las lesiones nos están castigando de manera inmisericorde. Ayer fueron Aduriz y Bóveda. Aritz nos metió en el partido con su gol pero después tuvo un pinchazo en el muslo que pinta fatal. ¿Quizá adiós temporada? A ver si hay suerte y puede jugar alguna de las seis finales que nos quedan. Aritz es fundamental y ayer lo volvió a demostrar. Seis finales en las que hay que intentar no sólo clasificarse para la UEFA otra vez, sino evitar el mayor número de previas posibles. Tanta lesión ahora, seguro que es por lo pronto que iniciamos la temporada y la cantidad de partidos y minutos que llevan los jugadores. Valverde, tu labor es recuperar anímicamente a nuestros chicos, que se laman sus heridas hoy, pero que el domingo salga el que salga, sean capaces de volvernos a hacer sentir orgullosos, por su sudor, su trabajo y su lucha. Por eso son Athletic y por eso estamos siempre con ellos.
En la victoria y en la derrota somos Athletic.
¡Aurrera mutilak y a por el Málaga!
San Mamés no, San Gorka da tres puntos al Athletic
Los puntos son lo importante en la Liga. Y si son de tres en tres mejor aunque se juegue fatal. Ese ha sido el caso contra el Rayo Vallecano que en el segundo tiempo, salvo en diez minutos, nos dio un baño. El mejor del partido fue nuestro portero, con cinco o seis paradas de mérito. Muy bien Iraizoz, que ha estado de reflejos perfecto, sacando algunas manos abajo complicadísimas y de mucho mérito. Las necesarias rotaciones, el descanso de Beñat, San José y Aduriz, se notaron porque estamos hablando de tres de los puntales sobre los que descansa el juego rojiblanco. Por ello, en el primer tiempo el Rayo tuvo un mayor tanto por ciento de posesión que los nuestros. De hecho, la mejor noticia de esos minutos fue que los vallecanos no consiguieron marcar, por lo que nos fuimos al descanso a cero.
El segundo tiempo no empezó mucho mejor, ante lo cual Valverde reaccionó rápido sacando a la vez a Aduriz por Susaeta, y a Beñat, sorpresivamente por Rico (yo hubiese quitado a Iturraspe que no aportó nada hasta ese momento). Sólo la presencia de estos jugadores ya se notó y el equipo mejoró ligeramente. Lo suficiente para que Williams (que me desesperó todo el primer tiempo porque se lo pasó casi entero en fuera de juego), a pase de Raúl García (que se mató a trabajar), se inventó un golazo desde el borde del área. Curiosamente gol, que metió en la jugada siguiente a pegarse una carrera infructuosa, tras la que se echó la mano a la parte posterior del muslo. ¿Notó pinchazo antes de la jugada del gol? Quizá. Sea como fuere. Golazo y el Athletic por delante en el marcador sin merecerlo. Y salió San José por el mismo Iñaki. Un Mikel que se tuvo que multiplicar para tapar bocas de agua. Buen trabajo en defensa y contención. Por cierto, Iturraspe mejoró con respecto a la primera parte (no era difícil), participando con criterio en alguna jugada de ataque, quizá le ayudó tener de pareja a Beñat que es el que organiza, y no a Rico que es el que pone más músculo (aunque Rico en la primera parte realizó los dos únicos pases peligrosos y con criterio que recuerdo).
A partir de ahí, monólogo total y absoluto de los de Paco Jémez. Con una banda izquierda nuestra que era un coladero porque Muniain iba detrás del lateral, siempre tres metros por detrás, con lo que a Iñigo Lekue le llegaban en superioridad. Iñigo también dejaba demasiado espacio al atacante de modo que la autopista estaba abierta. Si a eso le unimos dos despejes también de lekue de cabeza directamente a los contrarios… pues un sinvivir. El primer despeje a la esquina del área, malo, pero el segundo al centro del área pequeña y directamente al delantero, un auténtico horror. Madre mía. No tuvimos suficiente con lo de Muniain el jueves… que añadimos más errores incalificables a la colección. Suerte que un Iraizoz inspiradísimo volvió a solucionar el regalo. También los delanteros del Rayo se lo tendrían que hacer mirar. Gracias chicos porque nos salvasteis de otra posible oportunidad desperdiciada, gracias a vuestra candidez cara al gol. Tuvieron más oportunidades pero todas infructuosas, lo único que consiguieron fue salir ovacionados de La Catedral, tanto por sus aficionados (muy abundantes, animosos y de los que da gusto recibir), como por los nuestros. Yo desde luego les aplaudí mucho, porque se lo merecieron.
Por otro lado, el Sevilla ha perdió, así que estamos en la sexta plaza alejando a los rivales del jueves a tres puntos. Bien. Así que bienvenidos sean estos puntos aún sin metecerlos, pero ya era hora de que fuese así.
Y ahora el jueves a Sevilla, en donde tendremos que jugar mucho mejor que hoy para poder hacer la machada necesaria para llegar a semifinales de la Europa League. O no. O jugar mal y que se dé de nuevo el milagro como ayer. ¡Qué más nos da el juego si se consigue el objetivo que es estar en la próxima eliminatoria de UEFA! Vamos… que me da igual como lo consigan, pero, por favor…
¡A por ellos, a por el premio de la semifinal y aúpa Athletic! Aurrera Lehoiak!!!!
Peor resultado contra el Sevilla, difícil.
Primer partido que gana el Sevilla fuera de casa. Si es que… Evidentementemente me parece un muy buen equipo, e incluso me sorprende que hasta ayer no ganasen ninguno. Increíble pero… De todas formas, tampoco habla muy bien de nosotros. No tengo queja alguna del primer tiempo, Estaba equilibrado. Ha habido momentos del Sevilla y otros del Athletic. Normal porque es el campeón de Europa League de los dos pasados años… así que por algo será. Pero curiosamente, cuando mejor estaba jugando el equipo llegó una jugada impropia de jugadores de Primera División. Y sí, sé que Muniain salió muy tocado de San Mamés, pero… es lo normal, que le duela, porque madre mía… francamente hacer eso en el área es… no sé ni cómo calificarlo. ¿Un gol de tebeo? Seguramente. Y el cabreo que me agarré, importante. Sí, es un error. Sí, a todo el mundo le pasa. Pero… no me vale. Ni me consuela ni lo entiendo. No se puede hacer eso en el área. No se puede. Y no me canso de decirlo. No se puede. Ya… ya sé que estáis pensando que sí se puede porque, de hecho, lo ha hecho. Pero…
Poned lo que queráis en los puntos suspensivos porque casi no tengo ganas ni de escribir.
Y ahí, se acabó el partido. Cuando mejor se estaba jugando se dio alas a los sevillanos, y casi desaparecimos. El dominio pasó a ellos, por mucho que diga Valverde que no fue para tanto. Que el equipo mereció más. Quizá en el primer tiempo, pero a partir del error de Iker… agur. El equipo se puso nerviosísimo y se fallaron muchos más pases, que antes. En la grada comentábamos que si no se podía ganar, que era evidente, no podías dejar que te metiesen el segundo. Pero… lo que se veía venir, ocurrió. Nos pillaron en una contra y 1 a 2 para ellos. Incluso nos podían haber metido alguna otra. Iago también dijo a la radio que el Athletic mereció más. Suelo coincidir con ellos… pero en este caso no. El Sevilla ayer fue justo vencedor.
Y para no acabar con tal mal sabor de boca, voy a destacar a Iago, que en el primer tiempo volvió a mantener al equipo en el partido con dos paradas muy muy buenas. Y vaya jugada de Iñigo Lekue, otra vez. Pide más minutos a gritos.
Y ahora a jugar en Liga contra el Rayo, que casi es un estorbo. Estorbo que los jugadores no se pueden tomar como tal, porque la Liga no se puede descuidar. Además, ya se ha fallado todo lo que se tenía que fallar en estos últimos partidos. El domingo no toca.
¡A por el Rayo y aúpa Athletic! Y por supuesto,… ¡Ánimo Muni!
¿Cómo acogerá La Catedral a LLorente?
Si alguien espera de este comentario que ponga a parir a Fernando puede dejar de leer ahora mismo. Esta primera frase es por lo de que «El que avisa no es traidor». Lo que voy a decir no es el sentir general, pero es lo que pienso y como esto es un blog donde se dicen las opiniones aquí está la mía. Me hubiese encantado que Llorente siguiese en el Athletic, pero no fue así, y por ello no le voy a crucificar. Se han dicho y se dicen auténticas barbaridades de él y a mí siempre me produce el mismo sentimiento de tristeza. Estoy convencida que él sigue siendo del Athletic. Lo contrario me parece impensable porque habiendo vivido todos los años que ha vivido en y por este Club, es imposible que no lo sea. Además, en su caso los años pasados aquí son quizá los años que más te marcan, los de la infancia, juventud e inicio de la madurez. Ha vivido muchísimas cosas y la mayoría buenas salvo su salida, la cual recuerdo como un folletín, telenovela que no me gustó nada y que me fastidió todavía más por el horroroso final que tuvo. Los que le critican, la mayoría dicen que tomó el pelo al Club y que no quería renovar. Yo estoy convencida de que sí quería renovar, pero que por un cúmulo de circunstancias que ellos sabrán, al final se torció todo, y no se consiguió. Para mí no hubo un solo culpable. Y si lo hubo desde luego no fue LLorente. Lo que quiero decir es que las culpas fueron compartidas. Seguro que Fernando estuvo desafortunado. Seguro, Pero lo que a mí nadie me quita de la cabeza es que el Club, el presidente (Josu Urrutia), la Junta Directiva, tampoco estuvieron precisamente brillantes. Hubo cosas que hicieron rematadamente mal.
Por otro lado, siempre parto de que los jugadores son profesionales. Que su vida deportiva es corta o a veces muy corta. Tienen que aprovechar las oportunidades, o supuestas oportunidades, y por ello, si se van de aquí me da pena, mucha pena, muchísima, o me es indiferente, pero es su decisión, es su carrera, es su futuro,… es su vida. Cuando se habla de sueldos se hace con una ligereza que me sorprende. Dicen o decimos: «No ha renovado porque quería un millón más, por que le daban no sé cuanto dinero, en no sé dónde… y fíjate… hay que ser malvado para irse… Yo me hubiese quedado… yo no pediría tanto… yo… yo… » Para nosotros es facilísimo hablar, total. Ninguno de nosotros jugamos, ni es nuestro dinero ni es nuestro porvenir o el de nuestra familia. Por ello, los jugadores son muy libres de hacer lo que quieran. ¿Que me da pena? Pues claro que me da pena, pero lo entiendo, aunque no lo comparta.
Fernando viene hoy por primera vez a San Mamés y la pregunta del millón es cómo se le va a recibir. Y a la hora de saber qué voy a hacer o no, voy a tener en cuenta no el modo en el que se fue, sino todo lo que nos dio. Esos años de crecimiento y esos goles, esas bajadas de balón, esas asistencias,… esa participación en el juego que tuvo y, no sólo en el año de las finales con Bielsa, también con Caparrós. De hecho, el otro día vi un resumen de la semifinal Athletic – Sevilla de Copa, que nos llevó a la final tras 25 años sin olerlas, casi ni de lejos. Un Llorente en pleno rendimiento goleador y pasador. Un Fernando que salío del campo aplastado entre los aficionados que lo invadieron, para abrazarle a él y a todos sus compañeros por la hazaña conseguida. Y es el mismo Llorente. Es el mismo que con Clemente y contra el Zaragoza, hizo un slalom en 10 cms de cesped de San Mamés sorteando a un rival para regalarle un gol a Yeste, que quizá nos libró del descenso. Yo me voy a acordar de todo ello, porque Llorente no es sólo el de su salida, Fermnando es también el de todo lo demás. Y si es que hay posibilidad le aplaudiré. Me encantaría no quedarme sola. Me encantaría…
Así mismo me gustaría no oír la canción que tanto se repite de «Y Llorente ¿qué?, y Llorente ¿qué?». Soy más de animar a los míos olvidándome del resto. Es más, me parece incluso mal para nuestros jugadores que se cante eso porque Fernando fue su compañero y seguro que también le quieren y les dolerá que se le critique. ¿No es mejor en vez de cantar eso, cantar «Aritz Aduriz, …. Aritz Aduriz»? Así, sí animamos a los nuestros. No de la otra manera. En mi descargo diré, que tampoco me gustan nada las canciones de «Ni Barça ni Madrid, Athletic» o «Sólo hay un Athletic, y es el de Bilbao». ¿Por qué me tengo que acordar de los otros? Mucho mejor animar a los míos sin menospreciar al resto. La segunda cancioncilla que he comentado supongo que tampoco le gustará mucho a Raúl García. Seré un poco exagerada, bueno, quizá, pero prefiero «Athletic, Athletic».
Por último, que el criticar a Llorente no nos distraiga del fin último, que debe ser animar a nuestro equipo hasta el final, para que obtenga el mejor resultado posible contra el Sevilla, un equipo que no nos lo va a poner nada fácil, al contrario, será difícil y contra el que tendremos que jugar el mejor fútbol para poder superarlo.
¡A por el Sevilla y aúpa Athletic!