Nada. Increíble que no ganásemos ayer.
De pensar que nos han echado mal de ojo, o que nos han hecho vudú o las dos cosas juntas. No le encuentro otra explicación. El Athletic mereció ganar de largo. Tuvo oportunidades de todas las formas y maneras, y con un montón de jugadores distintos y nada.
El primer tiempo fue un escándalo, porque tuvieron 6 claras, y entre ellas nada menos que dos palos. El equipo estuvo de notable y no digo sobresaliente porque no hubo goles. El Sevilla estaba acogotado y la presión alta les hizo cometer un montón de errores que se convirtieron en esas ocasiones clarísimas que estoy comentando, pero que ninguna de ellas tuvo final feliz. Iñaki, Nico, Raúl, Dani, Unai (estos dos últimos, protagonistas de los tiros al palo comentados) y Muniain, al que le hicieron un penalti de libro. Pero es que con los árbitros tampoco estamos teniendo suerte. El fenómeno de ayer, Hernández Hernández, en el primer tiempo también, pasó por encima todas las entradas de tarjeta de los jugadores hispalenses, eso sí, siendo «muy , muy rígido y severo» y amenazando a 3 de ellos, de que a la siguiente les sacaba tarjeta. ¡Qué bien! Para ya en el segundo tiempo, a los nuestros no avisarles y sacar una tarjeta a Íñigo Lekue de auténtico tebeo. Así que, lo voy a decir, el árbitro un sinvergüenza. Y los del VAR también, por no avisarle del penalti. Marcelino sobre esta jugada dijo que no lo había visto pero que ”este árbitro no le gusta». A mí tampoco. Y esa frase igual es un poco peligrosa porque el trencilla seguro que se entera y la próxima igual te la arma más gorda todavía. Como podéis comprobar mi confianza en los árbitros es absoluta. Perdonad la ironía, pero es que también de ellos estoy harta. Por cierto, no he comentado, que en el primer tiempo, la segunda aproximación de ellos se convirtió en el único gol del partido. Delaney, que llevaba sin marcar desde enero, ¡genial!, metió un golazo casi por la escuadra. Siempre igual, alguien que no marca llega a San Mamés a solucionar sus problemas. En fin …
Volviendo a la incapacidad del equipo de hacer gol han dado unos datos que meten un poco de miedo. En los últimos tres partidos que el Athletic no ha conseguido marcar ha tenido 56 ocasiones. MADRE MÍA. O este otro dato que nos da Adurizpedia en Twitter: «El Athletic ha marcado sólo dos goles en los últimos 99 remates, y uno de ellos nos lo regaló Remiro». De no creer.
El segundo tiempo, no fue de tanto asedio como el primero pero sí hubo otra ocasión escandalosa, esta vez de Iker. Más otras,… El Sevilla se dedicó a perder el tiempo, y el árbitro, a sacarnos tarjetas a nosotros, ¡ah! y por fin en el minuto 72, la primera a ellos. Bien por el colegiado. Los cambios se hicieron antes que en otros partidos, Zárraga y Sancet aportaron pero Berenguer (vuelve,… te necesitamos) y Petxarroman no.
Y así, cada vez más lejos de arriba y con el pesimismo que nos atrapa. La semana que viene nos «amenaza» otro de los de arriba, esta vez el Betis. Aunque visto lo visto la mayor amenaza del Athletic es nuestra propia falta de gol. Que acaben con la racha, que metan un gol y se liberen un poco, por favor. Y ¡a por el Betis! Y…
¡Aúpa Athletic!