Acabar el partido en San Mamés como acabó ayer, con el triunfo en el último suspiro es una auténtica gozada. 3 puntos como 3 soles que te afianzan en el 5° puesto y te permiten ir al parón con la tranquilidad que te dan los deberes hechos.
Dos de los goleadores (Foto: Luis Tenido)
24 puntos ya, tras dos triunfos consecutivos de los que dan moral. A Pacheta, entrenador del Villarreal, tras la derrota del fin de semana pasado, ya le han dado boleto. Y con el triunfo por 4 a 3 contra al Celta, que Rafa Benítez se ande con cuidado porque igual sigue el mismo camino que su compañero de profesión. Aunque si yo fuese del equipo gallego no le echaba, ya que seguramente será de los mejores equipos que ha pasado por La Catedral. Eso sí, al igual que el Athletic, tiene un problema en la defensa. Pero si lo soluciona lo lógico es que vaya hacia arriba en la clasificación.
Paso a preocuparme de mi equipo que tiene precisamente el mismo problema que los gallegos. Ayer defensivamente fue una auténtica verbena. Hace tiempo que no veía a un equipo tan sobrepasado. Nos metieron 3 goles, pero hubo otros dos anulados, y un penalti parado por Unai. Vamos… y otro montón de jugadas peligrosas de ellos. Larsen, Iago Aspas y Bamba, dejaron en evidencia bastantes veces a nuestros jugadores. Por supuesto, Iago, que llevaba 8 meses sin marcar un gol, nadie en San Mamés tuvo ninguna duda, antes del partido incluso, que iba a marcar, como por supuesto así fue. El primero del partido, un golazo en el que dejó en paños menores a Paredes, con el que hizo lo que quiso, para chutar un tiro imparable, que dio en la base del poste, antes de entrar a gol. Golazo. Lo increíble es que no haya marcado desde marzo. También hizo otro pero bien anulado por fuera de juego, y gracias a Don Unai Simón, no pudo meter el penalti, por paradón de nuestro cancerbero. Aspas que es buenísimo, perdió un poco la cabeza en un par de ocasiones. En la primera vio la amarilla y podía haber visto incluso la roja, por la reiteración de las protestas y los gestos ostensibles que tanto cabrean a los árbitros. Y ya en la segunda, no hay duda que debió ver la roja. Pero supongo que estaría tranquilo sabiendo que no le iban a echar, ya que como esta semana ha quedado claro que el Celta es un equipo perjudicado por lo árbitros, alguna faena nos iba a caer de rebote. Ésta: Aspas no fue expulsado. Un jugador, que por cierto no debería haber jugado el partido, porque el Comité debería haber entrado de oficio para castigarle con algún partido por derribar el monitor del VAR, en el partido anterior… pero … lo de siempre. Por cierto, en la segunda protesta, los jugadores del Celta lo separan del árbitro, normal, pero es que también lo separó Iñaki, lo cual ya no es tan normal. Muy deportivo por su parte, pero nada práctico para los intereses del Athletic. En fin…
Sigo, Bamba metió un gol tras despeje horroroso de Vesga al centro del área, que supuso para ellos volver a adelantarse en el marcador. ¡Que horror defensivo! Además de las muchísimas entregas de balones sencillos regalados al rival. El primer tiempo podía haber acabado así, con el 1 a 2, pero en el último minuto de los cinco que prolongó el árbitro, Nico Williams se metió hasta la cocina poniéndole un pase atrás y el gol a Guruceta. Gol psicológico e importantísimo para nosotros.
Al reanudarse el segundo tiempo, nos adelantamos, otra vez gracias a Gorka, pitxitxi del equipo con 6 tantos, adelantando a Iñaki (partido más flojo el suyo ayer), que lleva 5. Pero ahí estaba Larsen para amargarnos. Primero metió uno, pero en fuera de juego, y luego otro perfecto a pase de Iago. Preciosa jugada pero que tuvo la inestimable colaboración de Paredes, protagonista principal del desastre, y de Vivian. Por si fuera poco, el Celta se pudo adelantar con el penalti, pero ya he dicho que Iago no lo logró. Hay que decir que merecieron más pero… ya sabemos que en el fútbol no gana siempre el que lo merece, sino el que mete más goles. Y un, curiosamente desafortunado Berenguer, que en los minutos que le dio Valverde no estaba consiguiendo nada, provocó el penalti de ellos, por mano de Mingueza, y lo transformó en gol, para darnos los puntos que mejor saben, los que no son merecidos y encima en el descuento, otra vez. Este equipo tiene alma, genio, raza, no se rinde y eso vale su peso en oro. La garra te da estas cosas. Álex muy valiente por tirarlo. Chapeau por él. Le va a dar más moral, porque está jugando muy poco. Ayer salió sustituyendo a Iñaki, que ya he comentado que estuvo más flojo de lo normal, en el minuto 80. A Nico no podía sustituirlo porque estaba impresionante y permaneció en campo. Raúl también salió y le puso un balón de oro a Dani, otro de los que salió, en este caso sustituyendo a Vesga, que también paso fases del partido bastante malas, con pérdidas continuas.
Además de Simón, Nico, Guru, habrá que mencionar a Lekue, que realizó ataques bien llevados a cabo. Y fue de los que menos sufrió en defensa. Óscar, que igualó a Iraola en el número de partidos, fue alguna vez superado, pero también se le vio en ataque. De hecho, Núñez quizá le hizo un penalti , al clavarle los tacos en el muslo.
Pero como no pitaron el de Dani a Iago, después de chutar, supongo que el de Óscar tampoco. ¡Qué malos son los árbitros!
Para acabar, además de repetir la necesidad de mejorar muchísimo a nivel defensivo, espero que vayamos recuperando lesionados, y que tras el parón de selecciones sigamos sumando puntos. Y el siguiente el líder, el Girona máximo goleador… Ya podemos ajustar la defensa, si no… ¡A por el Girona! Y…
¡Aúpa Athletic!