En La Catedral del fútbol esta vez los santos se pusieron del lado verdiblanco permitiéndole sacar un punto en un encuentro en el que debió ser goleado por un Athletic que en el primer tiempo en modo vendaval le debió meter 4 goles, pero… No fue así. Y los aficionados nos fuimos a casa con cara de tontos, supongo que como los jugadores.
Sancet se lamenta (Foto: Oskar González)
Fue un primer tiempo coral, de enorme calidad, precisión, en todo, excepto en la definición. Una maravilla de jugadas, pero tuvimos la friolera de un travesaño y dos palos, y otras cuantas paradas de Rui Silva. Bueno paradas o más bien balonazos que le dieron nuestros jugadores. Djaló que salió de titular por la lesión de Guruzeta, jugó seguramente su mejor partido hasta ahora. Se suponía que salió en punta pero los 3 delanteros se estuvieron todo el primer tiempo intercambiando las posiciones, de modo que el Betis no sabía por dónde le daba el aire. Movilidad que tuvo premio en modo de jugadas que deberían haber acabado en gol, pero repito, que no fue el caso. Álvaro hizo tres jugadas con 3 centros que deberían haber sido asistencias. Sancet tuvo dos clarísimas, una fue al palo y la otra al cielo. Iñaki dos, una al travesaño y otra al muñeco. Nico una, al cielo pero era fuera de juego. Paredes, de cabeza en un córner al otro palo. De verdad de no creer.
En el descanso Pellegrini dijo a sus jugadores que debían hacer lo contrario de lo que habían hecho en el primer tiempo. Hizo 3 cambios y bien que se notó. En su segunda oportunidad, gol de Fornals. Como para comer cerillas. Pero el Athletic siguió a lo suyo y otro pase maravilloso de Iñaki, lo volvió a malograr Sancet, que soñará con sus oportunidades. Valverde también hizo cambios y uno determinante fue el de Álex Berenguer que al de poco consiguió el empate de cabeza a pase del incombustible De Marcos, tras salida en falso de Rui Silva. Pena que las siguientes oportunidades, que las seguimos teniendo no subieron al marcador. Una doble oportunidad de Herrera, otro de los recambios. Una jugada en la que Iñaki no vio a Martón (que tuvo sus minutos) totalmente solo en el centro del área, y prefirió chutar, despejando Rui Silva. ¡Qué rabia! Partidazo el de Iñaki, pero a veces las decisiones que toma no son las mejores. Supongo que influirá el cansancio porque lo está jugando todo y se mata por el equipo. En otra jugada, que acabó en contraataque del Betis que salvó Agirrezabala, Nico quedó retratado en el inicio porque tuvo miedo y no metió la pierna para rematar, una posible jugada de gol. Me enfadé bastante, la verdad. No sé si a vosotros os pareció lo mismo que a mí. Julen también tuvo otra participación notable en una cesión que le hizo Yuri, y se convirtió en un pase al delantero. Muy bien Julen y menos mal, porque esas dos contras del Betis fueron peligrosísimas.
Así que si contra el Salvia no merecíamos nada, y ganamos, contra el Betis fue casi al revés. Repito, una faena, pero como comentó Ernesto al terminar, si jugamos así vamos a perder pocos partidos. Nos quedaremos con todo lo positivo. El esfuerzo que hicieron los nuestros fue enorme y el público lo agradece con su apoyo incansable. No fue suficiente pero la siguiente lo será. Estamos perdiendo muchos puntos a lo tonto. Puntos que luego echas de menos, pero… no siempre puede salir todo de cara. Partido también notable de Íñigo Ruiz de Galarreta y de Beñat Prados, que aprovechó la lesión de Mikel Jauregizar, que en los últimos partidos le había adelantado por la derecha. Le vendrá bien quizá para recuperar confianza (si es que la había perdido,que no creo).
Y esperemos que empiece la racha positiva este mismo jueves que volvemos a competir en Europa, en este caso en Bulgaria contra el Ludogorets. ¡A por ellos! Y …
¡Aúpa Athletic!