Espero que Teresa May sea fiel a su palabra y no dimita. Porque de esto va la política, de tomar decisiones difíciles y asumir las consecuencias. Si no, no te dediques a la política: seguro que hay una tertulia para ti, en la que puedes decir lo que harías sin llevar una pesada mochila y muchas noches sin dormir detrás. Por no hablar del desgaste familiar. Pero May, a la que le ha tocado ejecutar el Brexit, el mayor error político de la historia moderna, está haciendo lo que le toca. No como los ministros que la abandonan por dignidad, dicen. Lo digno es asumir la realidad. El resto, cobardía y tertulia.
Iglesias sigue imponiéndose
Mi amigo Igor Filibi me advirtió de que la gente tiende a ser coherente, y que quien parece un poco idiota en el trabajo seguro que también lo es en el resto de ámbitos de la vida. Siguiendo su sabio consejo (que estos años he tenido la oportunidad de validar varias veces), si Pablo Iglesias se comporta como un dictador en su propio partido lo lógico es pensar que será coherente y se comportará como un dictador en el resto de áreas de su vida. Una que lo conoce bien, Carlina Bescansa, ha puesto el mejor ejemplo: en todos los procesos lanza y acaba imponiendo su opción.
El feminismo circular de Dolera
A Leticia Dolera le ha vuelto su propio feminismo con la misma fuerza con la que ella lo lanza al mundo. Si muchos veíamos que su necesaria labor tal vez necesitaba un punto de mesura, ahora puede que también lo vea ella, cuando ha tenido que justificarse por prescindir de una actriz para un proyecto porque esta se ha quedado embarazada y no le encaja en algunas escenas eróticas. La entiendo perfectamente. Igual que era comprensible esa decisión cuando la tomaban hombres o mujeres a las que acusan de alienadas. Llamar la atención y denunciar es necesario. Ponderar, también.
Solo sabe él
Caen Contee es uno de los máximos responsables de la empresa que ha puesto patinetes en varias ciudades que pueden dejarse en cualquier sitio sin esperar a una regulación o normativa. Adivinen: funciona con una App, como todas las ideas candidatas a la más jeta del siglo. Pero si el modelo de negocio es discutible, las respuestas de Contee en El Confidencial son bastante reprochables. El tipo hace un ejercicio de “cuñadismo” perfecto. Saca un 10 en todas las categorías porque borda el “es que no sabéis”. Y por eso no nos adaptamos. Solo sabe él, que se lo lleva crudo.
La resistencia
Con tanto revolucionario de sofá y tanta revolución de iPhone, uno ya no se toma en serio ninguna llamada a la batalla. Estamos como para que nos invadan los vikingos. Pero todavía quedan algunos a los que tomarse en serio. Dice Fernando Pardo, de Los Coronas, que los que van a las salas de conciertos y escuchan rock’n’roll son la resistencia. Y quienes se empeñan en aprender lenguas como el aragonés o el asturiano, también lo son. Una resistencia de verdad, que supera la dificultad de encontrar un centro y las preguntas estúpidas que cuestionan el mantenimiento de un idioma.