¡Seis puntos seguidos en Liga!

Esto era lo que llevábamos pidiendo un tiempo. Puntuar unos partidos seguidos para salir del agujero en el que es demasiado fácil caer. Y sobre todo alcanzar un colchón de puntos para poder ir seguido al Bernabeu, puntos los próximos que si no es por lo civil, se los lleva siempre el equipo blanco, por lo criminal, que cuando no hay una expulsión en contra hay dos, y sino un penalti o sino un gol fantasma, o sino ya se inventará el árbitro algo… Conclusión: este colchón de puntos sabe a gloria.

¡Qué liberación con el gol!

El jueves pasado se perdió contra el Olympique de Lyon y ya casi casi, salvo milagro estamos fuera de la Europa League. A pesar de eso el partido durante 75 minutos no fue para perderlo, el juego fue bueno salvo por lo de siempre en los últimos partidos. A saber: la portería es un agujero negro (en el que todo lo que llega entra) y la media falla más que una escopeta de feria (tanto de cara a puerta como en el último pase). El primer tiempo debería haber acabado 4-0 ó 4-1. Luego Muniain se sumó a la fiesta cometiendo una anchoa de infantil, que ya nos desarmó definitivamente. A Iraizoz en éste último gol le fusilaron a poca distancia, pero tampoco hubiese estado mal que no se tirase al lado contrario antes de tiempo y que hubiese cubierto su palo… A partir de ahí el Athletic y su reacción de empatar el partido a dos se fue al carajo. Pero no al carajo de rabia, fuerza y lucha, sino al carajo, no sé… de water.

Paso al partido del domingo y de él tengo que destacar, curiosamente lo que criticó del jueves. Gorka estuvo muy bien, muy, muy bien. Fue determinante y por fin, consiguió hacer dos paradas de auténtico mérito y encima seguidas. Además en un par de balones salió de debajo del larguero para blocar balones por alto. Aunque si hubiese salido más quizá el penalti no hubiese sido necesario. Iraola hace la mano dentro del área pequeña. Considero que el balón debería ser de Gorka, aunque no para blocar, sí para arrancarle a Iraola el brazo (en plan cariñoso…) con una salida de puños. Pero teniendo en cuenta que Iraizoz no sale nunca, no me voy a quejar que en este partido lo ha hecho 2 ó 3 veces. Poco a poco.

También a destacar los dos goles. Los que fallaban todo lo que les llegaba… las enchufaron. Ya era hora. De hecho a De Marcos en la rabia de su celebración se ve que él pensaba lo mismo que todos. Y con Susaeta, parecido. Sus manos a manos son… buf… Y éste, aunque llorando entró. Menos mal.

Sigo. Igual que llevo semanas pidiendo la titularidad de Raúl Fernández Cavada (sigo pidiéndola a pesar de haber destacado el partido de Gorka), esta semana añado otra petición: el banquillo o la grada para Muniain. En otros comentarios le he tirado de las orejas, pero lo de este año me parece mucho y muy seguido. El jueves me quedó la sensación que estaba buscando la expulsión a gritos. A partir de su error en el tercer gol perdió los papeles de una manera increíble, y mucho antes lo tenía que haber sustituido. El domingo al árbitro debutante le temblaron las canillas pensando que tenía que expulsar a alguien del equipo de casa en el primer tiempo y tan pronto… (La expulsión la prefirió dejar para el segundo tiempo y con una mano absurda). Sigo con Muniain. Está claro que nadie le canta las cuarenta en Lezama o si lo hacen, desde luego, no tiene mucho efecto. Así que considerando que no puede seguir así, yo le mandaba al banquillo o, repito, a la grada, unos partiditos para que se lo piense mejor y deje de comportarse como lo hace, que no hace falta ni que lo califique porque se califica él sólo. Y si a todo le añado el poco rendimiento que está teniendo (igual por eso está desquiciado), es que no necesito ni la disculpa del comportamiento para hacerle descansar.  Y así, a ver si se tranquiliza. Por si alguien tiene dudas, considero a Muniain un grandísimo jugador de una calidad envidiable pero… no se puede permitir que se comporte así.

Para acabar, decir, que el Athletic va hacia arriba, y pena que esta semana nos toque contra el Real Madrid (adonde como ya he dicho otras veces no llevaba a los titulares… pero ese es otro tema)

Un poco de tranquilidad con el Athletic…

Ya sé que hemos perdido contra el Lyon y contra el Getafe. Ya sé que el partido del domingo fue muy malo. Ya sé que parece que nos ha mirado un tuerto. Ya lo sé. Pero por favor, pido al entorno un poco de tranquilidad. Lo digo porque entrando en internet, leyendo la prensa, escuchando tertulias parece que estamos ante el fin del mundo. Pedí esto mismo, tranquilidad, hace unas semanas pero me reafirmo, añadiéndole la petición de paciencia y unión.

Así se conseguirá

 Estoy segura que esta situación tanto los jugadores como su máximo responsable Bielsa, la van a sacar adelante. Pedir la dimisión del entrenador ahora me parece kafkiano, exagerado, desmedido,… Por supuesto que si alguien pide soluciones al problema para muchos la respuesta va a ser cortar por lo sano (y nunca mejor dicho), cortarle la cabeza al entrenador.

No estoy para nada de acuerdo. Hay que ver adónde nos llevó Bielsa el año pasado cuando nadie daba un duro. Si fue capaz de hacerlo el año pasado, no digo que éste nos vaya a llevar al mismo sitio, pero estoy convencida que nos va a sacar de esta espiral de malos resultados. Y no hago de pitonisa. No. Simplemente me remito a los 3 partidos anteriores al del Getafe. Contra Osasuna, contra el Valencia y contra el Lyon el Athletic por momentos volvió a jugar bien, y en momentos,  hasta muy bien. Saben jugar y lo van a volver a hacer. Nos están afectando muchas cosas (ya no me refiero sólo a lo extradeportivo). Muchas son de carácter deportivo. Estamos teniendo un montón de lesiones que están haciendo mucha «pupa» (por decirlo suave). Aurtenetxe, Amorebieta, Ander Herrera, Ruiz de Galarreta, y ahora Gurpegi… Jugadores que no están ni de lejos como estaban el año pasado: De Marcos, Muniain, Iraola, Amorebieta, Susaeta,… Idas de pinza como la de Ander Herrera en Valencia, que nos penalizó muchísimo puntualmente en ese partido, que nos ha supuesto jugar contra el Getafe sin él, lo que se notó una barbaridad, hasta hacer que nuestro centro del campo naufragase, estando casi inexistente. Y que quizá nos provoque una situación similar en Granada, si el entrenador no lo remedia… Al acabar la sanción Ander volverá a jugar y se mejorará. Ya sé que es complicado echar la culpa  o fiar la mejoría a la falta o a la presencia de una sola persona, pero a las pruebas me remito…

También quiero recordar que Llorente sigue siendo jugador del Athletic. Que se nota cuando sale al campo, porque se crean más oportunidades. Hago recuento de ellas: dos pases de gol en Lyon (uno convertido y el otro no por el paradón del portero), larguero contra el Getafe, otros dos cabezazos a puerta, y alargar el balón en San Mamés para que San José marque. Su calidad en el campo se está notando. Si esto es así, que es así, ¿por qué no juega más? Sí, ya sé que Bielsa no le saca… pero podría sacarle. Y cuando se le saca ¿Por qué se le sigue pitando? Puedo entender los motivos, que los entiendo, pero el silbar a LLorente es algo que hace daño al club. ¿Que estamos cabreados con él por no querer renovar? Lo entiendo pero si él ahora juega y lo hace bien, es algo beneficioso para el Athletic y no comprendo, que un aficionado del Athletic no quiera lo mejor para su Club. ¿Que no le podemos ni ver?… pues se le pita al final del partido. Pero no hagamos daño al Club.

Vuelvo al principio, que he mezclado temas, paciencia, por favor, que esto va a mejorar, seguro. Quizá no en uno o dos partidos, pero sí en cuatro o cinco. Paciencia.

 

 

¡Bienvenido, Herrera!

Pasado el susto de los minutos finales contra el Osasuna del fin de semana y con tres puntos más en el zurrón parece que la vida futbolística se ve mejor. Buena parte de “culpa” de ello la tiene, seguramente, Ander Herrera.

¡Cómo se notó su presencia!

Comentaba la semana pasada que con algunas cosillas más era seguro que el Athletic mejoraba, y vaya sí mejoró. No es que el resultado sea como para tirar cohetes, pero el juego al menos, sí que lo fue. Era más parecido al que se realizaba el año pasado, y que tantas alegrías nos dio.

Para empezar me remontaré al partido del jueves en Praga, donde del resultado prefiero no hablar. Pero sí del momento en el que aparece Herrera en el campo, a partir del cual el juego del equipo mejoró. El desaguisado ya en el resultado era tal que tampoco es que se pudiera mejorar mucho. Pero ese cambio, con respecto a la calidad del juego, ya se ha visto más claro este domingo en San Mamés.

Iturraspe le necesita al lado para dar mayor consistencia a su juego. Distribuye muy bien y así de paso Muniain pasa a la banda y deja el puesto a su dueño natural, mejorando él mismo Muniain, en sus propias prestaciones.  A Iker le ha quedado muy grande realizar el trabajo de Ander. Se liaba él sólo y perdía unos balones peligrosísimos. Ander también perdió algún balón que dio “un poco mucho” de miedo, pero… hace menos de un mes que le han operado, así que se tiene que poner todavía en forma.

Hablando de la operación aprovecho la ocasión para tirarle de las orejas. Quizá el tirón de orejas lo deba compartir con el Club, Junta Directiva. Está claro que para él, así como para Amorebieta tenía que ser una ilusión enorme ir a los Juegos Olímpicos, y con su selección en el caso del central, pero… tal y como estaban físicamente ¿deberían haber ido? La respuesta es clara. NO. No, por el Athletic que es el Club que les paga. Tanto uno como otro se han perdido un montón de partidos que han podido suponer que el Athletic se encuentre donde se encuentra. Muy abajo en Liga y con problemas enla EuropaLeague. Y ya encima la gota que colmó el vaso de la paciencia de cualquiera fue, que a pesar de estar ya España eliminada de los JJ.OO., jugase el tercer e intrascendente partido. Eso ya fue el colmo. Muy mal la Federación, muy mal Ander, y muy mal el Club. Porque ¿quién nos devuelve los puntos perdidos y el dinero perdido (las victorias en Europa también suponen dinero)?

Tras el rapapolvos decir, que el domingo ya pudimos empezar a disfrutar un poquito más del juego del equipo. Se combinó mucho mejor. La presencia del bilbaino fue fundamental en esa creación. Da los apoyos muy bien y eso aumenta o mejora la movilidad de los compañeros. Si en el último pase o en la definición, Markel y De Marcos hubiesen estado inspirados, y no lo hubiese estado Andrés, el guardameta rojillo, el resultado podía haber sido de escándalo. La próxima vez será.

Para acabar decir, que a pesar de la bronca que le he echado: ¡Bienvenido, Ander!