Los graves insultos que han lanzado los chicos de un colegio mayor de Madrid a sus compañeras son graves e injustificables en cualquier contexto. Pero también han servido para abrir un buen melón, el de esas instituciones que quieren parecer elitistas pero no pasan de rancias. En ellas las novatadas se heredan porque en su sustrato socioeconómico todo se hereda. El feminismo es para los pobres: “Si a tu hija no la llaman puta a berridos todas las noches desde el bloque de enfrente es porque eres un perdedor muerto de hambre que no tiene dinero para procurarle el mejor ambiente de estudios posible”, tuitea Hermanos Peláez.
Una organización criminal
La OPEP es una organización criminal. Terrorista, incluso, porque con sus acciones lo que intenta es infundir miedo, con ese miedo generar ansiedad y acopio, y con el acopio de combustible que haga la población atemorizada, ganar dinero. Sin duda, la OPEP es una banda de extorsionadores organizada para tener el mundo a sus pies. Y el mundo, mal liderado, se ha postrado con un modelo energético insostenible y que enriquece a personajes que, pese a los millones, siguen pareciendo siniestros. El anuncio de que recortará la producción solo para mantener el precio (y beneficiar a Rusia, de paso) tiene que suponer un punto de inflexión.
El primer rudimento de la educación
Si no sabes algo, pregunta. Ese rudimento sigue siendo válido cuando tienes 42 años. Lo sé por propia experiencia. Pero puede que algunos crean que ya han pasado esa pantalla y que su intelecto funciona de otra manera, más madura. O todo lo contrario: “¿Sabía o no sabían en Unidas Podemos que las Cuentas para 2023 incluirían una subida del 25,8 por ciento del Presupuesto de Defensa? Pues si se escucha la versión de Hacienda parece que no hay duda al respecto. ‘La gente que se ha sentado con nosotros lo sabía. Los interlocutores preguntan. Es que parece que son tontos, ¿por qué desmarcarse?’”, leemos en El Independiente.
Echa la culpa a Yolanda
¿Cómo quieren que creamos en Podemos que ellos no aceptarían nunca un incremento presupuestario en Defensa y que, al mismo tiempo, no son tontos, como sugieren en algún ministerio, según El Independiente? Pues echando la culpa a Yolanda Díaz: la señalan a ella como la persona negociadora del “ala morada” (mucha “Ala Oeste” han visto algunas y algunos) que conocía esa subida para Defensa y que, además, la ha ocultado al resto de su propio bando en el consejo de ministros (y de poco les ha servido ver la serie de Aaron Sorkin) para que no la rechazasen. En esos juegos de manos todos son los primos. Y primas.
Un camino largo
El camino que han andado las jugadoras, los equipos técnicos y de prensa, entre otros, del Athletic femenino es largo, como ayer nos recordaban en su cuenta en Twitter: 20 años, que no son nada si los cantas y menos si los vives. 20 años de reivindicación, de lucha en el campo, de títulos celebrados en el parking, de algún terremoto interno, de vestuarios diferentes al de los chicos, de récords, de que la afición haga la ola cuando nos golean en San Mamés y de despertar cada mañana ante la injusta realidad. No quito ningún mérito a las directivas que impulsaron y mantuvieron ese equipo, solo pido más porque creo que es lo justo.