Que una secretaria de Estado critique en Twitter abiertamente las declaraciones de una ministra no solo no queda bien, es que está mal. Y sí, ya sé que se trata de dos partidos distintos y que en España no tienen experiencia en coaliciones ni, por lo que se ve, coexistencias. Pero el espectáculo que recurrentemente ofrece Ione Belarra es bastante triste para todos, también para los que no sean ni del PSOE ni Podemos pero sepan que la de gobernar es una cosa muy seria que no puede intentar condicionarse a golpe de tuit. Incluso aunque el tema sea tan grave como investigar o no a Juan Carlos I.
A este no hace falta que se lo expliquen
En Podemos pueden ponerse tan dignos como quieran que no me creo nada: hasta que no metan mano a los gastos que van repartidos en los diferentes ministerios su republicanismo solo será de boquilla. Hoy sabemos que Patrimonio Nacional, dependiente del Ministerio de la Presidencia, “paga los sueldos y viajes del personal desplazado a Emiratos Árabes Unidos para asistir al rey emérito”, incluidos los “tres ayudantes de cámara”. En Eldiario.es también recuerdan que a Hacienda “pertenece el parque móvil, Exteriores paga los viajes oficiales, Interior se hace cargo de la seguridad, y Defensa, de la Guardia Real”.
Y Casado, de atril en atril
Si la versión más actual del Lazarillo de Tormes en España es Juan Carlos I (y sucesores), ¿qué podemos esperar de los principales políticos del país? Ahí está Pablo Casado, hablando desde todos los atriles que le dejan y sacándose fotos como si fuera un ministro. El guionista Toni Díaz lo describía perfectamente en Twitter: “Desde hace meses estoy escribiendo un guion inspirado en ‘Good bye, Lenin!’ (2003) con un señor que, para evitar un disgusto a sus padres, les ha convencido de que ha estudiado en Harvard, se ha sacado un máster en dos patadas y ha ganado unas elecciones generales”.
Todos somos listos. O no
Otro tuit que me ha parecido estupendo esta semana es el de Sergio Ferrer: “En octubre noviembre diciembre enero febrero habrá que hacer un confinamiento total y dirán que no se podía saber, acordaos de mis palabras”. El tuit, además, era una respuesta a sí mismo del pasado agosto: “En junio julio agosto septiembre todos confinados otra vez, os lo digo yo”. Este periodista y biólogo se ríe abiertamente de quienes llevan meses siendo agoreros y, claro, alguna vez tendrán razón porque las malas noticias se amontonan, por desgracia para todos… Y por culpa de todos. Que nos quede claro.
El cascabel del gato
El hilo de Antonio Ortiz sobre las desviaciones entre la medición de resultados en Internet (visitas) y el recuerdo de los usuarios sobre las webs que han visitado es de lo más interesante: la información on-line y en redes sociales es cada vez peor por culpa de la lucha por los clicks en la que hemos entrado todos (yo, el primero, cuando intento “vender” mis columnas en Facebook o Twitter). La medición no diferencia entre lectores de la versión digital de un diario y personas que encuentran un resultado en Google a una duda puntual. Nos hacemos trampa con las mediciones y estamos pagándolo caro.