La mala suerte de Cuco Ziganda

No me quiero erigir en la defensora a ultranza de nuestro entrenador Cuco Ziganda. Simplemente quiero comentar una serie de cosas que me llegan a concluir que la mala suerte que está teniendo es muy real.

¿Mala suerte? (Foto: Athletic Club)

Para empezar comentar que el equipo que tiene Ziganda es el mismo que tiene el Club desde hace 2 años, no ha habido ni una mísera incorporación. Es decir, son los mismos jugadores, pero claro, con 2 años más, lo que en el caso de algunos y visto su DNI puede suponer un problema. Supongo que al coger el equipo solicitaría refuerzos a la Junta Directiva. Pero por todos es conocida la habilidad de nuestros dirigentes en este tema. Perdón, he dicho habilidad y quería decir, extrema torpeza.

En segundo lugar, la elección del entrenador en muchos foros no fue bien acogida, por lo que prácticamente desde el minuto uno, hiciese lo que hiciese, tenía críticas, lo que supongo tampoco habrá ayudado mucho, porque la sensación de estar jugándote el puesto cada poco, no debe ser sencilla de llevar.

A ello hay que unirle el que el equipo tuvo que empezar a competir muy pronto jugándose desde los primeros partidos las habichuelas pues de ellos dependía que estuviésemos en Europa League o no. Partidos en los que se jugaba sin alguno de los supuestos titulares por enfermedad, como Yeray, o por estar lesionados, cómo es el caso de De Marcos o de Iturraspe,  o de Rico.

Bastantes jugadores estaban flojos con respecto a lo que nos tienen acostumbrados: Laporte, Williams, Aduriz, Raúl García, San José, Beñat… Vamos lo que viene siendo casi un equipo completo. La sala de máquinas del equipo, los mediocentros no funcionaban. Uno de los más utilizados el año pasado, Beñat, empezó flojo y perdió la titularidad, hasta que sorpresivamente nos enteramos que tenía problemas de pubis, por lo que tuvo que ir a Alemania a que le metiesen la tijera. «Espectacular y acertada» política de comunicación del Club que no había dicho absolutamente nada… de modo que unos criticaban a Ziganda por no sacarle y otros criticaban a Beñat cuando salía porque estaba bastante mal. Pero… Lo que estaba era lesionado. Alucinante. ¿Por qué no dijeron nada? ¿Por qué no se operó en verano?

Otro enorme problema añadido. El jugador con mucha diferencia que mejor estaba jugando y que en muchos partidos se estaba echando el equipo a la espalda, Iker Muniain, se vuelve a romper los ligamentos de la rodilla, de modo que nos tenemos que olvidar de él hasta la temporada siguiente.

Durante todo ese tiempo Cuco hace todo tipo de variables, con sus jugadores en el centro del campo, para conseguir algo que funcione. Los más utilizados, Mikel San José y Mikel Vesga, demuestran una y otra vez que con ellos no funciona el equipo. Se recuperan Itu y Rico, y empiezan a tener más presencia, mejorándose así la creación y la contención.

A Iñaki no se la reconoce, no se sabe lo que le ocurre, pero no es ni sombra del jugador que fue el año pasado. Ha metido algún gol que nos ha venido muy bien pero han sido como oasis dentro del mal hacer. Esto hace también que a Aduriz no se le pueda dar mucho descanso.

Laporte tampoco es ni de lejos el jugador que fue antes de lesionarse de gravedad hace dos veranos. Sigue cometiendo errores de bulto con muchísima frecuencia. Errores impropios para la calidad que tiene. Y su compañero de baile el año pasado, con el que se compenetró de maravilla, Yeray, estaba recuperándose de su grave enfermedad. Ahora ya recuperado se tiene que poner bien físicamente.

Además de recuperarse Iturraspe de la lesión, también lo hace De Marcos, pero en su primer partido, partido más que notable, recibe un golpe que le vuelve a lesionar.

Supongo que Cuco estará buscando a ver quién es el que le está haciendo vudú, porque la mala suerte que estamos teniendo este año es evidente, con las lesiones y con los muchos jugadores que no están bien. Bueno, y con alguna brillante mente pensante, que visualizó, intuyó en verano, que Mikel Merino no era necesario. En fin,…

Y así que llegamos al partido contra el Real Madrid tras el total y absoluto desastre de la eliminación contra el Formentera, un Segunda B,  que ha supuesto un golpe a la moral enorme y el que los cuchillos estuviesen enormemente afilados rozando el cuello del entrenador. Hete aquí que el equipo hace un primer tiempo más que aseado dominando por momentos a los madridistas y teniendo oportunidades para ponernos por delante en el marcador, aunque ellos también gozasen de algunas. Pero… la mala suerte del Cuco otra vez que se disfraza con una nueva lesión de Iturraspe. Salta al campo San José en el minuto 40 y el partido cambia. El segundo tiempo, tras un par de ocasiones nuestras y un más que posible penalti a Raúl, no pitado, se convierte en un casi monólogo blanco, pasando por algunos momentos de agobio auténtico, pero la defensa estaba resistiendo el asedio muy bien gracias sobre todo a la pareja de centrales Núñez y Etxeita, que hicieron que no echásemos nada de menos a Aymeric. Pero, el mal fario hace que se vuelva a lesionar De Marcos, en el colmo del despropósito, chocándose con Núñez. ¡Qué mala suerte! Así y todo, el Athletic se liberó de la presión y de los ataques continuos del Real Madrid gracias a la expulsión de Sergio Ramos, que hace que esos últimos minutos se diese un cambio de papeles siendo el Athletic el que estuvo rondando la puerta de Keylor Navas. A pesar de ello, se mantuvo el empate a cero. Punto valiosísimo teniendo en cuenta de dónde veníamos y quién era el rival.

Tras el éxito, la frase  de todo el mundo es la misma. Con los rivales grandes el Athletic se crece y hace buenos partidos pero ¿qué va a ocurrir ahora contra el Zorya y el Levante? Y por supuesto, me pregunto lo mismo, pero claro, también tengo en cuenta que en estos partidos no vamos a tener los mismos jugadores porque De Marcos e Iturraspe se han lesionado otra vez. Por lo tanto, vamos a tener que contar con algún jugador que hasta ahora no lo está haciendo muy bien. Es decir, nuevo problema para Ziganda. A ver cómo lo soluciona, ya que se le tienen muchísimas ganas. Esto último que comento me da bastante pena porque estoy llegando a pensar que mucha gente quiere que el Athletic pierda los siguientes partidos para que echen al entrenador de una vez. Una pena. Bueno, más que una pena, lamentable.

Pensando en todo lo que comento os pregunto… ¿no os parece que Ziganda y de rebote, el Athletic, esta temporada, están teniendo malísima suerte? Yo estoy convencida de que sí. Y que en cuanto cambie un poco el viento vamos a ir hacia arriba.

¡A por el Zorya y aúpa Athletic!

Lamentable eliminación copera ante el Formentera

Penoso, patético,… hay más adjetivos, muchos más, pero sólo voy a añadir  TRISTE, que es con el que me quedo.

Zorionak Formentera (Foto: EFE)

Triste porque  cuándo metió  el gol el Formentera  lo primero que pensé fue que me alegraba enormemente por ellos  y que quizá  es el mal menor para nuestro equipo tal y como se encuentra en estos momentos. No creo que estamos para nada  y mucho menos para seguir jugando dos partidos a la semana. Asi que… no voy a decir que qué bien, pero… ¡qué disfruten los isleños el regalo!, que a nosotros parece que nos queda grande.

Y puestos a criticar de Ziganda criticaría su insistencia en sacar a una pareja de mediocentros como Vesga y San José, que no crean absolutamente nada. Bueno, miento. San José le ha dado dos pases buenos a Williams,  pero ya se ha encargado el delantero de desaprovecharlos. Nada más. Cuco, Vesga y San José no están. No. No están.
Y por no centrarme sólo en ellos también decir que Iñaki tampoco… ¿qué le pasa? Está … no está. Las que falló ayer… madre mia, y es que ni siquiera pasa bien… nada. No es de recibo todo lo que falla. No. Tampoco son aceptables las dos últimas jugadas del partido. Iñigo Lekue… ¿en qué estabas pensando en la jugada antes de córner? Buf…

¡Qué mal cuerpo se me ha quedado! Y no sólo por el frío que pasé… sino por la sensación de impotencia. Dentro de unos años recordaré y podré decir esa frase  que nos gustan tanto de «yo estuve ahí», pero no refiriéndome a Manchester, sino a La Catedral en este famoso «Formenterazo». Ah… y que quede claro que no me arrepiento de haber ido. Con mi equipo a las duras y a las maduras. Y aunque quedan pocas fuerzas… ¡ánimo a todos los que ayer estuvieron tan mal! La próxima mejor. Y por supuesto…

¡Aúpa Athletic!

 

Mikel Rico y Susaeta muy bien

Si observamos las estadísticas de Mikel y Markel esta temporada nos indican que no son jugadores de los considerados titulares para Ziganda.

Los mejores del partido Rico y Susaeta (Foto:EFE)

A pesar de ello los dos salieron el jueves en el segundo tiempo como revulsivo en la Europa League y cumplieron más que de sobra. Eso ha supuesto que ayer jugasen también como titulares y completasen el partido con una actuación ambos más que notable. Ese agujero negro que es el centro del campo del Athletic ayer lo fue menos. Por supuesto, parte de culpa la tienen estos jugadores con la ayuda también inestimable de Iturraspe. A ver si ya por fin así Cuco considera que ha dado con la tecla y saca como titulares a Ander y a Rico. No digo Mikel para no crear confusión ya que parece que San José y Vesga no están precisamente bien, a pesar de contar, casi hasta ahora con la total y absoluta confianza del míster. El de ayer es quizá el partido de esta temporada más aceotable de los jugados fuera de casa. Esperemos que sea el inicio de una remontada en la clasificación. Escalada que no será posible si no se arregla el otro problema, que ayer fue el de la defensa, porque a los errores gruesos se le unieron una serie de despistes generalizados que hicieron que casi regalásemos los dos goles al Deportivo. Los gallegos con un juego más bien escasito apunto estuvieron de darnos el disgusto final, en el último segundo de partido, en esa ocasión qué in extremis y de forma repetitiva siempre se dedican a regalar nuestros jugadores. Gracias al remate final defectuoso del deportivista si no… hoy no podríamos siquiera disfrutar de ese triste punto que conseguimos con el empate.

Ah… y estamos de enhorabuena por la vuelta de Óscar de Marcos. Qué rabia que se tuviese que retirar lesionado porque lo estaba haciendo también francamente bien.

No puedo acabar el comentario sin decir la maravilla de contraataque entre Rico, Oscar y Adu, que culminó Markel. ¡Qué preciosidad! No he visto el resto pero… seguramente deberia ser el mejor gol de la jornada. También Raúl sobresaliente en la asistencia a Iñaki. Un Iñaki, por cierto,  al que no sé qué le pasa pero… a pesar de que juega… yo le echo de menos. ¡Aúpa Williams!

Y el miércoles la Copa contra el Formentera… ¡a las 21:30! ¡Qué difícil nos lo ponen! Espero que vayamos el mayor número de socios posibles al campo y si no se puede ir por el motivo que sea, por favor, dejad los carnets. Mila esker

¡A por el Formentera y aúpa Athletic!

 

Triunfo del Athletic, pero… ¿y el fútbol?

Soy la primera que salió ayer encantada de La Catedral. Encantada, claro, por el resultado única y exclusivamente, porque si pienso en todo lo demás me preocupo.

Alegría por el milagro consumado (Foto: EFE)

Ganamos 3 a 2 contra el Hertha de Berlin y no solo seguimos vivos en la Europa League sino que encima podemos, incluso, quedar primeros de grupo. Alucinante. Increíble, sobre todo visto un primer tiempo lamentable en el que los alemanes nos volvieron a dar un baño total y absoluto, en el que el único tiro a puerta de nuestro equipo fue el de Aduriz gracias al penalti. No se puede jugar menos, no se puede hacer peor,… Porque… ¿a que no queréis que os comente nada sobre el segundo gol del Hertha… 30 segundos después del milagroso empate de los nuestros?

El segundo tiempo mejoro un poco pero eso, sólo un poco,  como muy bien reconoció Aritz al acabar el partido en una entrevista. Menos mal que lo ve igual que nosotros porque sino es cuando nos cabreamos más. En la txiki mejoría tuvieron que ver los cambios que introdujo Ziganda sacando al campo a Iturraspe, el cual debió jugar de inicio, y a Susaeta. Ambos, le metieron un poco de vida al equipo, ya que con San José estaba muerto. También ayudó el Hertha, que se echó hacia atrás, quizá pensando en pillar otra vez al equipo en algún contraataque. Este segundo tiempo, tampoco es que fuese como para echar cohetes pero ante el desierto inicial… De todas formas, el triunfo no nos debe cegar porque no siempre es posible ganar a base de arreones, a base de hígados, a base de empuje… Todo esto se agradece, por supuesto, pero se necesita mucho más.

Por sacar cosas positivas quiero volver a destacar a Rico; a Balenziaga, que es incansable; a Aritz y a su efectividad goleadora (en este caso con los dos penaltis); a Lekue que jugó mucho partido con un golpe enorme en el pie y a ver cómo está hoy; a Córdoba, que no deja de intentarlo; a Raúl, por lo listísimo que es y su manera de iniciar el contraataque del tercer gol con un saque de falta rapidísimo; a Balenziaga por contraatacar y hacerlo tan perfecto; y, sobre todo, a un extraordinario Iago Herrerín, que nos volvió a mantener vivos en el partido, haciendo tres paradones ya para el minuto 13, y una parada en el último minuto del descuento ( cómo es posible que se les deje rematar a los alemanes en ese último minuto, ¡qué horror, cómo estamos!).

Conclusión: contenta, pero con reservas porque los milagros no tienen lugar muchas veces en un mismo año, y ya es probable que hayamos cubierto el cupo. Hay que mejorar, hay que jugar algo al fútbol, hay que recuperar a muchos jugadores que están en el campo, pero no están… Se puede Athletic, se puede.

Y el domingo, sin tiempo para descansar, nos toca jugar otra final, contra el Deportivo de la Coruña, que tal y como estamos ahora, es un equipo de nuestra Liga. Hay que ganar sí o sí. Y como se puede y porque se puede… ¡a por ellos! y…

¡Aúpa Athletic!

P.d.: Permitidme que introduzca un comentario muy personal, que con mucha diferencia ha sido lo mejor del partido: Mi ama de 88 años me ha acompañado a San Mamés, y en el primer tiempo, que estábamos jugando horriblemente mal, ella estaba encantada de la vida, simplemente por el hecho de estar allí, estaba súper emocionada, y me lo decía. Eso es el Athletic, este sentimiento, da igual que se haga mal o bien, somos de unos colores y los queremos. Y no os voy a decir lo contenta que se ha ido a la cama con los tres puntos en el bolsillo,… porque ya lo sabéis.

¡Gracias Athletic por hacernos sentir esto!

Mikel Rico revulsivo para empatar contra el Villarreal

El centrocampista de Arrigorriaga llevaba hasta ayer una temporada en blanco en Liga. Cero minutos.

Muy buenos minutos de Rico (Foto: Athletic Club)

Y saliendo desde el banquillo se convirtió en el revulsivo que el equipo necesitaba.  Hizo suyo el centro del campo, consiguió recuperar muchos balones y encima se echó el equipo a la espalda. Todos los balones que cortaba los enviaba hacia arriba, cosa a la que, en esta temporada, no nos tienen en absoluto acostumbrados nuestros medios centros, que abusan del pasa atrás hasta el aburrimiento. Mikel con una actitud encomiable, qué es la que se tiene que pedir a un jugador que sale de refresco, metió una intensidad al juego y una marcha más que es lo que el equipo necesitaba. El Villarreal hasta ese momento estaba jugando casi sin despeinarse. Tras unos inicios de partido que fueron claramente rojiblancos, a partir del penalti clarísimo de Iturraspe, el equipo desapareció del campo y cayó en las garras del juego de toque y de control de los amarillos. Llegábamos tarde a todo, como Williams que dejó rematar plácidamente a Trigueros desde el borde del área para que convertiese la jugada en gol. El Villarreal continuó  dominando el juego con una suficiencia pasmosa. Nosotros incapaces de crear nada seguíamos las sombras del submarino amarillo. Por cierto, Kepa de nuevo excepcional, parando el penalti y otro balón que iba a la escuadra.

¡Qué porterazo! (Foto: Athletic Club)

Urrutia, por favor…. ¿es que no lo ves?

El cambio de imagen vino en el segundo tiempo con Mikel Rico. Se empezó a mirar hacia arriba con más intensidad y con más rapidez, pillando a los contrarios en más problemas. Así, el incombustible Balenziaga volvió a subir la banda y puso un balón franco para Aduriz, que de nuevo lo convirtió en oro. Gol del zorro recien renovado. Enhorabuena, Aritz, por las dos cosas, y enhorabuena al Athletic porque vamos a seguir contando con nuestro eterno goleador un año más. No hay palabras para definirlo.

De ahí hasta el final fue casi un monólogo zurigorri, salvo por dos errores enormes de Laporte y Williams que no costaron caro de milagro. ¿En qué estaban pensando? Por cierto, Williams no creo que estaba para jugar todo el partido, pero Cuco no lo vio así. ¿Qué le pasa a Iñaki?

También se notó la salida de Aketxe. Pena su  precioso remate final cerca del palo. No hubo tiempo para más. Se recuperó un punto y habrá que quedarse con el arreón final, con que el equipo no cede ante la adversidad y que siguen trabajando hasta el último minuto.

El jueves contra el Hertha de Berlin necesitamos más que lo visto hoy. Necesitamos que esos 15 últimos minutos finales, se den durante más tiempo.

¡A por el Hertha y aúpa Athletic!