La crisis económica y política en España, que ha conllevado una inevitable crisis de valores; y la sensación de estafa permanente que no logramos sacudirnos, han provocado el lógico ascenso del populismo, y éste, la carrera para ver quién es más crítico. Tanto que contradecirse hoy importa menos que ser agresivo. Un ejemplo lo apreciamos en esta noticia de ‘Te Interesa’: “Defensa compró 1.078 sables en China cinco euros más baratos que en Toledo”. ¿Cuál es el problema? Porque hemos leído de todo: que se tiene que premiar el ahorro, por pequeño que sea. Que se tiene que premiar la compra nacional, aunque sea más cara. Que el ejército no sirve para nada. Entonces, ¿que gaste dinero es bueno o malo? ¿Y que lo haga en sables es mejor o peor?
La veleta del PP
El PP va a tener que estar muy atento a en qué dirección sopla el viento porque, en contra de lo que ellos mismos creían, hasta 100.000 de sus votantes habrían apoyado a Podemos en las pasadas elecciones europeas, según el CIS y como recoge ‘Vozpópuli’. En el PSOE se llevan la peor parte: hasta 400.000 votantes cambiaron de papeleta y prefirieron la de Pablo Iglesias. Además, los socialistas partían de una situación peor a la de la mayoría absoluta recabada por Rajoy. Este dato, y el de la sociología del votante, muestran a Podemos como el imán de todos los desencantos sociales. Todos. El voto protesta, cualquier protesta, lo ha cosechado Podemos.
Chistes en la calle Génova
No sabemos si el PP mandó poner en su sede una barra de la risa durante la reforma que habría pagado en “B”, pero ganas de chistes parecen no faltarles. El último, la “chivatazo” a ‘El Confidencial Digital’ de cómo Arantza Quiroga “reprendió” a Soraya Sáenz de Santamaría. Para mearse de risa. Porque la mano derecha de Rajoy, si algo hace, es mandar y ser firme. Y pueden vendernos como quieran que Quiroga “ha mostrado agallas y personalidad política” que, en el caso de un encontronazo con Sáenz de Santamaría, no cuela. Se han pasado de maquillaje.
Canarias inicia su camino
Coalición Canaria, que obtuvo 21 escaños en las últimas elecciones autonómicas en el archipiélago, empatado con el PP, que ganó los comicios, podría haber arrancado su propio proceso que pasaría por cambiar de nombre y empezar a denominarse “Partido Nacionalista Canario”. No solo eso: este nuevo partido tendría que ser capaz de integrar varias tendencias nacionalistas en Canarias y afrontar, desde esta perspectiva, las necesidades y las políticas de la comunidad durante los próximos 20 años, según un documento elaborado por las universidades de La Laguna y Las Palmas de Gran Canaria que encargó la propia CC.
Entre Jenaro y Paco
Jenaro García y Paco Martínez consiguieron urdir toda la trama de Gowex, todos los clientes falsos que servían para atraer clientes e inversores reales que son los que se han quedado con un palmo de narices. También mantuvieron el escenario de cartón piedra que les permitía crecer en bolsa sin que ningún sistema de control en España detectara las irregularidades. Ninguno. Jenaro ponía la cara y el carisma, Paco las cuentas y las marionetas. Eran una pareja perfecta, según ‘El Confidencial’, capaces de sostener la cara de sorpresa cuando les pillaron. “Paco y Jenaro”, hasta suenan a novela sobre la picaresca.