No se me ocurre mejor ejemplo de lo que es hoy la política española que el que nos regaló Pablo Iglesias en Twitter y en Facebook: un vídeo grabado por sí mismo, en primerísimo primer plano, celebrando la repetición de las elecciones generales, a las que llama, con atrevimiento, “segunda vuelta”. Por supuesto, habla en nombre de “la gente”, porque “la gente” es él, como la política española, de palo-selfie, Twitter y elecciones como si no costaran, es él.
Pedro Sánchez y la derrota definitiva
La de Pedro Sánchez como secretario general del PSOE es la crónica de una derrota absoluta y constante. Su partido ha escarbado en el suelo de sus propios resultados, el aparato le ha atado de pies y manos, y su apuesta por Ciudadanos no le ha llevado a ningún sitio. Incluso cuando quiere dar un “txalo” hay un trasfondo de derrota: el PSOE fue generoso con Podemos en los ayuntamientos y Pablo Iglesias le ha chuleado cuando ambos han llegado al Congreso.
Rajoy, del “postureo” a “la gente”
Pablo Iglesias lleva preparado para esta repetición de elecciones desde que vio los resultados de su partido el 20 de diciembre con la sensación de que la campaña se le había quedado corta. Él quería más campaña, y más campaña vamos a tener. Situación que no desagrada al PP, que confía en mantener su voto fiel y “rapiñar” alguno más. Para ello, ha empezado a hablar del “postureo” de sus rivales, y se ha apuntado, como Podemos, a apelar a “la gente”.
Con nombres y apellidos
Como hace Javi Vizcaíno, me excluyo del fracaso colectivo que señalan algunos: yo no he hecho mal nada para llegar a esta situación. En la misma línea se expresaba el lehendakari: “No ha fracasado la política, han fracasado los políticos que no han demostrado capacidad para generar confianza ni estabilidad”. Lo hacía, además, durante la Junta de Oinarri en la que se daba a conocer el mejor dato de crecimiento del PIB vasco desde 2008.
Los problemas que no afronta España
El 26 de junio sabremos el resultado de las elecciones. En julio se podría conformar el Congreso, y con suerte en septiembre estaríamos hablando del nuevo gobierno español (o de nuevas elecciones). Nueve meses tirados por la borda desde el 20-D en los que, por ejemplo, España se confirma como triste líder en fracaso escolar de la UE, duplicando la media europea: “El 20% de los jóvenes entre 18 y 24 ha abandonado prematuramente el sistema educativo sin haber terminado sus estudios” (El Confidencial).