Casado también tiene pasado

El autoproclamado durante este fin de semana máximo exponente de la dignidad de España también tiene pasado. Y no es especialmente bonito. No hablo ya de la exageración en su currículum, hablo de cómo trabajó en la oficina de Aznar que medió entre Abengoa y el gobierno de Muamar el Gadafi en la época en la que la empresa logró un negocio de 950 millones de euros en Libia, según El Plural. Ese es Pablo Casado, el empleado de Aznar, el hombre al que no le importaba “mediar” con dictadores, el que vivía de las comisiones que las empresas le dejaban por meterse en el fango.

Ya hubo otras películas

Dicen los de Vox que en España no se ha glosado debidamente la figura de Blas de Lezo con una película que hable de la gloria de este militar. Ha tuiteado Abascal incluso que está dispuesto a convencer personalmente a Mel Gibson para que produzca el film histórico. Pero nadie recuerda, al parecer, la cantidad de producciones similares que se han llevado a las salas de cine de España con dinero público y poco éxito de audiencia. ¿Las han visto Abascal y Ortega-Smith? Con todo, creo que se equivoca Javier Zurro, que augura en El Español un fracaso de taquilla para Blas de Lezo, obviando el efecto borrego.

El bitcoin no vale lo que cuesta

No falta quien augura que el bitcoin está cogiendo aire y que esta moneda virtual recuperará su valor y volverá a romper su récord. Pero ya son unos cuantos meses de buenos augurios y malos resultados: “El coste de producción para minar bitcoins ya es mayor que el valor del propio bitcoin, por lo que ha llevado a una situación donde muchos productores han entrado en pérdidas. Esta situación, ha llevado a varios centros de minería de bitcoin desconectar cientos de máquinas para lograr recortar gastos” (Xataka) mientras seguimos sin saber sobre cómo se genera su valor.

Y el aguacate es ahora fuente económica

Mientras en Xataka nos explican que la tecnología no siempre se revaloriza, en Magnet nos traen una historia mucho más optimista: en Kenia y Tanzania están sustituyendo las plantaciones de café por las de aguacates y están obteniendo mayores beneficios. Beneficios que, además, afectan directa y positivamente a la población agricultora gracias a la moda sostenida del consumo de esta fruta. La parte mala es que la planta es bastante agresiva con el entorno pero, al parecer, no lo es más que la soja o el maíz. Buenas noticias, para variar, sobre algo rico… Y sano (también para variar).

Fútbol de verdad

Hoy en Bizkaia más de uno pasará el día con bastante sueño: el partido de ayer en San Mamés acabó a una hora horrorosa. Esto no pasaría si la liga española fuera como la Premier y pusiera unos buenos horarios para acudir al campo por encima de un lejano interés desde China. Pero este no es el único ejemplo de cómo la Premier escucha y cuida al aficionado que va al campo: este fin de semana hemos sabido que se mantiene el acuerdo por el que una entrada no costará más de 30 libras a un aficionado del equipo visitante en ningún campo de la mejor liga del mundo.