Sánchez ama el sanchismo

Pedro Sánchez tiene una capacidad asombrosa para tomar malas decisiones y sobrevivir a ellas. Y con todo lo que le ha pasado (ha sido expulsado de su propio partido y se ha encontrado en Moncloa después de una moción de censura improvisada), parece que publicar sus memorias demasiado pronto para alegría de los críticos no es tan grave. Pero sí lo es. Lo que está trascendiendo no suma pero sí resta porque él se lo ha buscado: airear decisiones personales chuscas y políticas reprobables, con ese aire de “oda a sí mismo”, como lo definen en Letras Libres, puede desgastarle más de lo que calculó.

Demasiados corazones

El periodista Álvaro Carvajal ha juntado cuatro fotos: en ellas se ve a Sánchez, Iglesias, Casado y Girauta en actos de sus partidos presididos por un corazón. Y añade: “Demasiado corazón para tanta política desde las tripas”. Apelar a la emoción está bien, apelar a los instintos es más complicado, pero no apelar a las ideas es, evidentemente, un error. Un error que cometen los líderes de los principales partidos españoles en el Congreso (hasta que entre Vox): ¿dónde están los proyectos, las medidas? No lo sabemos, de momento, todos ofrecen lo mismo: un corazón dibujado y su bandera.

Y en Vox, ordeno y mando

Los representantes de Vox no están todavía en el congreso y ya han decidido saltarse su democracia interna: así funciona la extrema derecha española. Más claro, agua. “La dirección nacional de Vox ha decidido dar un golpe en la mesa para ejercer un control férreo en la confección de candidaturas electorales, tanto para el cartel de generales como para autonómicas y municipales”, leemos en El Confidencial. El colmo del facherío, como si de un chiste se tratara, es que este cambio estatutario se ha «debatido» en la Asamblea que organizaron ayer, 23-F. 

Sacaron los tuits a la calle

Precisamente de dar un golpe de Estado es de lo que acusan a los políticos catalanes que están siendo juzgados estas semanas. Un golpe de Estado que el humorista gráfico Ferrán Martín define así en Twitter: “Este va ser el primer golpe de estado de toda la Historia basado en tuits. Tócate la pera”. Unos sacaron los tanques y las metralletas a la calle, y otros, según los jueces y fiscales, sacaron unos tuits. Los del golpe de Estado real están hoy en la calle y aparecen de vez en cuando en algún medio porque se les ha hecho un homenaje. Los del digital llevan más de 500 días en la cárcel preventivamente. ¡Qué inmensa injusticia!

Todos tenemos ya uno

“Las ventas de smartphones en el mundo no crecen sino que han caído un 4,1% en el último año”. Es una frase en Trecebits, pero podría ser una sentencia: el mercado se ha llenado de smartphones que no se renuevan tan fácilmente por mucha obsolescencia que les programen. Los precios de los terminales para profesionales se han disparado, además, de un modo inexcusable. Así que tiramos con nuestros aparatos, auténticas maravillas tecnológicas, y abandonamos la idea de comprar otro. Por suerte, la burbuja de la compra compulsiva de otro iPhone u otro Samsung parece que se pincha.