El fichaje por Podemos del que fuera jefe del Estado Mayor de Defensa con Zapatero ha generado una gran ola que, ahora, tienen que surfear todos. Veremos con cuánto éxito. El propio José Julio Rodríguez tiene que hacer frente a su propio pasado de declaraciones que poco o nada tienen que ver con lo que parece que propone Podemos. Y Pablo Iglesias tendrá que explicar cómo un militar impuesto en sus listas da legitimidad a su candidatura.
Y Pablo Iglesias cantó en El Hormiguero
No vi el programa, pero la imagen de Pablo Iglesias, con la coleta y la barba, tocando la guitarra, me recordó a esos jóvenes curas que cantan canciones religiosas a la chavalada. Muy legítimo y hasta entrañable, pero también muy poco moderno. Donde no han tenido piedad con Pablo Motos ni con Iglesias es en ‘Vice’: “Todo previsto, todo perfectamente calculado, todo organizado: el líder de Podemos necesitaba un vídeo, una imagen que consiguiera viralizarse”.
Que alguien pare esta campaña
Sigo con el párrafo anterior: en la misma publicación piden a los asesores de los políticos un poco de raciocinio por el ridículo al que lanzan a sus candidatos. Seguramente el texto estaba escrito antes de que trascendiera que Soraya Sáenz de Santamaría tuvo un accidente de globo mientras grababa un programa con Jesús Calleja. La nave aerostática perdía altura y ni la vicepresidenta ni el aventurero lograron gobernarla mientras se precipitaba contra un árbol cerca de una zona residencial. Si seguimos con las tonterías televisadas alguien va a acabar haciéndose daño.
Beatriz Talegón era la esperanza de futuro
Beatriz Talegón no supo aprovechar su oportunidad en el PSOE y, desde entonces, busca su hueco en opciones a las que ella misma señala como la verdadera izquierda cuando se suma a ellas. Y en el momento en que se resta, por supuesto, dejan de ser opciones de izquierda verdadera. Pero esta semana ha batido un record: en una semana forma parte de la fundación de una plataforma y, después, decide abandonarla porque, según ella, estaba siendo utilizada para restar apoyos a Alberto Garzón. Tronchante.
Corazones en Twitter
Twitter ha tomado una de las decisiones más controvertidas y, en mi opinión, ilógicas, que yo he visto: ha transformado las estrellas que permitían marcar como “favorito” un tuit en corazones que indican ahora que “te gusta” ese mismo tuit. Además de la evidente copia a Facebook, el corazón (presente en Instagram, defenestrada por Twitter) desnaturaliza una red social en la que muchos de sus usuarios disfrutaban porque la consideraban de tipos duros con ideas sagaces… Que ahora recibirán corazoncitos.