Precisamente porque hay instituciones públicas que sí se empeñan en ayudar y generar riqueza y tejido comercial, es justo criticar a aquellas que dicen que ayudan y no lo hacen. De esta crisis o salimos todos, o no sale nadie, y si ha habido un momento malo para los brindis al sol, es el que vivimos. Así que nos sumamos a la crítica dura que hemos encontrado en ‘Menéame’ ante la historia de la dueña de un local en Galicia que denuncia la interminable sucesión de impedimentos legales y la eterna burocracia a la que se ve sometida. Si se ayuda a abrir nuevos negocios, se ayuda, no se dice que se hace y luego se abrasa a tasas y avisos.
Esto no ayuda
Por mucho que me esfuerce en entenderlo, no lo consigo: “Barcelona multará con hasta 100.000 euros a los propietarios de pisos vacíos”, según en ‘Libremercado’. “El consistorio hace caso así a una de las reivindicaciones que la Plataforma de Afectados por la Hipoteca”. Y, ¿qué se logra con esto cuando hay VPO también vacía? ¿No se consigue, únicamente, más presión sobre quien quiere vender una vivienda pero no puede porque el mercado está muy contraído? ¿Cuántos desahucios se paran multando a quien hereda una casa, por ejemplo? La gigantesca trampa de los bancos no se va a detener acosando a los pequeños propietarios.
La ‘Marca España’ se inmola
Pocas noticias como la que hemos leído en ‘El Confidencial’ podrán hacer más daño a una ‘Marca España’ que sigue tambaleándose: “Panamá ofrece al embajador de EEUU acabar el Canal en sustitución de Sacyr”. El daño, además, ya está hecho: parece imposible que la ampliación del canal se termine en tiempos, formas y presupuestos pactados; y empieza a tomar forma la posibilidad, incluso, de que sea otra empresa la que lo termine, y no española, precisamente. De este modo, y por medio de una de sus principales empresas, la imagen y la credibilidad de España quedan por los suelos.
El PP, molando
Espero que no se convierta en una tendencia y que, en la campaña que nos viene, no veamos en los actos esos fondos verdes para hacer “chromas”. Me explico: tú te pones delante de ese fondo verde, el fotógrafo te indica el sitio adecuado, dispara, y consigues tu foto con tu político favorito y en el momento que más te emocione. Esta puesta en escena tan ridícula ha sido una de las atracciones de la convención del PP en Valladolid, y estaban tan orgullosos de la idea, que la han contado en Twitter, donde un usuario les respondió: “Falsos hasta para las fotos”.
En Twitter no vale todo
Gracias a Begoña Beristain, tan buena periodista en ‘Onda Vasca’ como en Twitter, he llegado a esta noticia de ‘NewsEsp’: “La Audiencia Nacional celebra este lunes el primer juicio por enaltecimiento del terrorismo a través de Twitter. En el banquillo de los acusados se sentará una joven de 21 años que utilizó la red social para mandar mensajes en los que ensalzaba a los Grapo y en los que animaba, entre otras cosas, a pegar ‘un tiro en la nuca’ al presidente del Gobierno, Mariano Rajoy, y al ministro de Economía, Luis de Guindos”. Pero la culpa, no es de ella, sino de quien le dijo que en Twitter podía decir lo que quisiera y que sus opiniones eran interesantes.